La versatilidad del Wiimote hace que nunca antes los juegos de deportes hayan sido tan interactivos en una consola, y la palma, la adaptación perfecta, ha sido desde el primer momento el golf. Tras Wii Sports, Tiger Woods y Pangya, llega una nueva franquicia de este deporte para la consola de Nintendo, esta vez de la mano de Capcom. We Love Golf! es uno de los pocos juegos de Wii jugables en la feria, ante la tradicional ausencia de Nintendo, y a puerta cerrada, en una de las habitaciones de Capcom, tuvimos oportunidad de probarlo.
A primera vista el juego no se diferencia demasiado de otros juegos de golf japoneses como el de Wii Sports o Pangya. Los gráficos son coloristas, y los personajes tienen el característico diseño manga que todos esperamos. Los escenarios, los dos que había, eran un campo de golf "tradicional" y otro ambientado en una especie de desierto. La superficie de juego sigue siendo césped, pero el entorno que lo rodeaba era desértico. En ambos campos, con dos personajes diferentes (un chico y una chica bastante genéricos), pudimos probar cómo entiende el golf Capcom para Wii, es decir, el sistema de juego.
En primer lugar destaca el sencillo manejo del interfaz previo al golpeo de la pelota. Moveremos la trayectoria deseada con la cruceta, como es de esperar, y pasaremos del modo normal a la vista general del escenario poniendo nuestro mando en posición vertical, sin pulsar ningún botón. A vista de pájaro podremos ver una perspectiva general del hoyo, y decidir qué palos usar para golpear la pelota.
Pero lo importante es, evidentemente, el golpeo de la pelota en sí. Hasta ahora cada juego de golf para Wii ha contado con su propio y particular sistema para golpear la pelota, y bonificar o penalizar al jugador por la trayectoria que realiza con el mando Wiimote. El sistema de We Love Golf! todavía necesitaba ciertos ajustes, pero prometía bastante, bonificando al jugador por la sincronización de sus acciones. Tras pulsar A, el juego nos indicará con una barra cuál es la distancia ideal para lanzar la pelota hasta donde queramos.
Con este indicador, tendremos que iniciar el movimiento de swing hacia atrás intentando llegar, sin sobrepasar, a ese punto, y luego golpear la pelota, eso sí, sincronizando la pulsación del botón A con el momento de golpear la pelota, fijándonos en el icono que nos indica el juego en la barra de golpeo. Este aspecto es la clave de We Love Golf!, lo que determina hasta qué punto salen bien nuestros golpes, y el aspecto diferenciador de su sistema de juego frente a los otros títulos de golf para Wii.
Además del sistema de golpeo con sincronización, podremos aplicar efectos a la bola dependiendo de cómo inclinemos verticalmente el mando de Wii. Antes de pasar al modo de golpeo, podremos ver en la pantalla cómo en tiempo real el palo se mueve al girar verticalmente el mando de Wii, y cómo cambia la trayectoria prevista de la bola.
Uno de los aspectos que todavía estaba verde en la demo mostrada era el putting en el green, que utiliza el mismo sistema de golpeo que los golpes normales pero, como es de esperar, una precisión mucho mayor. En esto último era difícil todavía lograr buenos golpes en el swing, debido a la necesidad de una mayor sensibilidad a la hora de detectar movimientos cortos; en este sentido pasa algo similar a lo que pasaba en las primeras partidas al juego de golf de Wii Sports, que estando a veinte centímetros del hoyo, por medir mal, podemos lanzar la bola a cinco metros. Otro aspecto todavía por mejorar es el cálculo de inclinación del green, que ahora mismo se nos indica por "líneas virtuales" sobre el terreno de juego, pero con pocas opciones para cambiar la perspectiva y así hacernos una idea de a dónde tenemos que dirigir el tiro.
Aunque algunas cosas todavía estaban algo prematuras, We Love Golf nos transmitió buenas sensaciones. El sistema de juego exigiendo sincronización al golpear la pelota es una buena idea, que lo diferencia de los otros juegos de golf de Wii; por lo demás, no pudimos ver si aparte del golf normal el título incluirá minijuegos o alguna opción novedosa para hacerlo más variado. Estará en las tiendas en el año 2008.