Hemos podido dedicar las últimas jornadas a probar una versión ya casi final de F1 2013, la nueva apuesta por la velocidad de Codemasters, entrega que llegará en octubre a Xbox 360, PlayStation 3 y PC, con el campeonato ya a punto de finalizar. Este calendario de lanzamientos para el juego oficial del campeonato es, sin embargo, ya algo habitual para los aficionados que saben que tienen que esperar al último trimestre del año para recibir su dosis de F1 en forma de videojuego.
Este es el último año de la normativa actual en el mundial, pues el año que viene se correrá con nueva normativa aerodinámica (un único escape en la zona central de la trasera del coche será el cambio más visible, con total seguridad) y motores V6 turboalimentados en los que la recuperación de energía será más importante que nunca. Podemos suponer que los desarrolladores de Codemasters tendrán también bastante trabajo para adaptar su juego a todos esos cambios estéticos y técnicos, pero está claro también que va a representar una gran oportunidad para renovar el juego.
Por ahora, con F1 2013 nos encontramos un título que no ofrece grandes diferencias con respecto a la entrega del año pasado pues se sigue trabajando en la fórmula de refinar lo que ya se ha conseguido y que ha dado, todo sea dicho, buenos resultados. Por supuesto, había que trabajar en alguna novedad refrescante y palpable más allá de las búsqueda por la refinación y el perfeccionamiento… mientras se hace tiempo para que el año que viene llegue toda esa nueva normativa y, claro, la versión para nuevas consolas. No parece que este juego que ahora nos ocupa vaya a dar el salto a PlayStation 4 y Xbox One (tampoco va a lanzarse en Wii U) pero podemos dar por seguro que la próxima entrega apostará por las nuevas plataformas del mercado.
Quizá la gran novedad de este año esté en la posibilidad de correr con coches y circuitos clásicos. Esto se nota en un primer momento porque han introducido un filtro de imagen que logra ese toque algo antiguo en la imagen (pero que podemos desactivar desde el menú de opciones en cualquier momento). La verdad es que es un filtro amarillento sin muchos alardes, lo que es positivo: podría haberse caído en un barroquismo de defectos de imagen para reforzar ese aspecto "retro" que hubiera ido en retraimiento de la experiencia. Con este efecto se consigue un buen efecto que no nos molesta en ningún momento y es probable que haya jugadores que jamás se molesten en probar a quitarlo mientras trastean por el menú de opciones.
En la versión que hemos podido probar estaban disponibles varios coches de finales de la década de los 80, incluyendo clásicos de Lotus y Ferrari, con los que hemos recorrido los circuitos de Jerez y Brands Hatch, dos veteranos circuitos que ya no están en el calendario de la Fórmula 1. Las primeras sensaciones que nos llevamos con el juego fueron al mando del Ferrari F1 87-88 sobre el asfalto español y luego pasamos al inglés, donde se celebró el GP de Reino Unido entre 1964 y 1986.
Lo que pudimos observar al probar luego los vehículos nuevos es que las sensaciones de conducción son diferentes, aunque para poder apreciarlas es mejor no utilizar ningún tipo de ayuda a la conducción y correr con el cambio de marchas manual. Cuanto más nos acercamos a la experiencia de simulación, más matices se perciben en el juego; en cambio, si no tenemos esos parámetros en cuenta, no hay tantas diferencias pero a cambio resulta mucho más fácil hacerse con el manejo de los monoplazas, sin excepciones.
La selección de coches clásicos incluye joyas como un Williams FW07B de 1980, un coche construido en torno a la técnica del efecto suelo: no pudo ganar el campeonato del 79 (que se llevó Ferrari gracias a la pericia de Jody Scheckter), pero sí lo hizo con su evolución B para el año siguiente Alan Jones fue imbatible con este coche, seguido de su compañero de equipo, Nelson Piquet. Pilotarlo es una experiencia muy divertida y la sensación de agarre que transmite gracias al efecto suelo (que fue prohibido posteriormente por la FIA) hace que las sensaciones sean muy diferentes a las que, por ejemplo, el F1 87-88 de Ferrari del que hablábamos antes, incluso cuando estamos bajo la lluvia.
Otros vehículos presentes en esta selección de clásicos son dos Lotus, el Team Lotus 98T y el 100T y otro Williams, el FW12 de 1988. Por supuesto, la selección de coches clásicos será mucho más amplia en la versión final del juego, pues está confirmada la presencia de varios modelos más. La lista completa es: Williams FW07B, Team Lotus 98T, Ferrari F1-87/88C, Team Lotus 100T, Williams FW12 (lo que cierra la década de los 80); Ferrari F92, Williams FW14B, Ferrari F310, Williams FW18, Ferrari F399, Williams FW21 (para la década de los 90). Resultan evidentes ciertas ausencias, como McLaren, BAR, Honda, Tyrrell, Jaguar… pero suponemos que en el futuro podrían llegar más vehículos. En cuanto a circuitos, a los dos que hemos disfrutado en esta versión preliminar, habrá que sumar Imola (San Marino) y Estoril (Portugal). Como con los coches, esperamos que la lista pueda ser más extensa en el futuro.
En cuanto a los modos de juego, estarán presentes los clásicos Grand Prix para correr el campeonato de 2013 (y una versión alternativa con los coches clásicos), la contrarreloj, y los modos "Scenario". Cuando estamos con los clásicos, las situaciones que nos ponen no parece que vayan a ser muy variadas pues parece que se ha puesto algo más de esfuerzo en el que está integrado en la sección "Proving Grounds", cuyas pruebas nos ponen en el pellejo de un novato.
Se trata, en los dos casos, de superar situaciones determinadas entrando directamente en la acción, como remontar posiciones, defender la nuestra, etc. La sensación de que hay más variedad en un lado que en otro puede ser, sin embargo, cuestión de las pruebas escogidas para esta versión y habrá que esperar a la versión final. Lo cierto es que somos optimistas porque este modo de juego dio muy buen resultado en su predecesor y estamos seguros de que la versión final tendrá mucha más chicha.
En cuanto a los elementos del campeonato actual, los circuitos están muy bien reflejados. En esta versión hemos podido correr por Alemania, Australia, Bélgica, Brasil, China, Hungría e Italia. Sobra decir que en la versión final estarán todos los circuitos del campeonato de este año (más los clásicos que se integren en la versión final, claro) y por ahora las sensaciones son positivas. No percibimos un gran cambio en su representación en pantalla con respecto al año pasado, pero en cambio sí se puede apreciar un mejor trabajo en los efectos del tiempo (en particular la lluvia y cómo se refleja cuando las gotas impactan contra la pantalla).
Donde sí se aprecia que todo sigue mejorando es en la física general de los vehículos: el comportamiento es más realista y las reacciones de los monoplazas al, por ejemplo, salirse de la pista, resultan más creíbles. Este trabajo resulta más evidente cuando pasamos de conducir los coches clásicos (sin ayudas electrónicas y con motores que tienen un comportamiento muy diferente a los actuales… y colocados en el centro del coche de forma longitudinal), pues entre la versión del año pasado y la de este las sensaciones son mucho más sutiles en cuanto a los cambios.
No puede obviarse la sensación de rotundidad que ofrece el juego y cómo se está trabajando en ciertas mejoras. La más evidente es la inteligencia artificial de los pilotos rivales. Hemos notado algunas inconsistencias en la dificultad, que da saltos evidentes, pero es algo que nos habían advertido y aseguran que el resultado final será mucho mejor. El objetivo, por supuesto, es que su conducción resulte más realista y si exceptuamos las situaciones en las que hemos visto algo raro en su pilotaje (una agresividad extrema, casi suicida), la sensación general es que se ha trabajado en la dirección correcta.
Falta todavía un mes para que el juego llegue a las tiendas. F1 2013 es un título que se percibe ya maduro y que nos hace albergar grandes esperanzas de cara a su versión final. Las dudas serán las clásicas en todo juego deportivo, es decir, saber si sus novedades serán suficientes para los aficionados que ya disfrutaron de la entrega del año anterior. Además, en un momento de transición a las nuevas consolas, el mercado puede ser un poco más complicado para estos juegos. Las respuestas las tendremos en un mes, cuando en octubre debute la versión final. Nosotros, desde luego, tenemos ganas de pisar el acelerador a fondo.