Una de las nuevas sagas aparecidas en la actual generación de consolas que más nos gusta es Dead Space, y el 8 de febrero de 2013 se va a cerrar una trilogía con su tercer capítulo, que por primera vez hemos podido jugar durante la Gamescom y que nos ha dejado mucho mejor sabor de boca que lo que vimos durante el E3 el pasado mes de junio.
Si el primer Dead Space se podía considerar una aventura de terror o survival horror, y su espectacular continuación apostaba por darle una mayor importancia a la acción, algo que no gustó a muchos, esta tercera parte, tras los primeros datos, vídeos y la demo que vimos en el E3, parecía haber dado un giro definitivo hacia la acción en tercera persona, lejos del terror de la primera entrega, incluyendo incluso un modo cooperativo, algo muy típico del género.
Pero por suerte la demo que hemos jugado hace unos días nos ha demostrado que Dead Space 3 tendrá el terror y la gran ambientación de la primera entrega, la espectacularidad y acción intensa de la segunda, y el cooperativo y la creación de armas como algunas de sus novedades.
No sabemos en qué porcentaje estarán repartidos estos elementos, y si la demo de la Gamescom tiene un poco de trampa y no es representativa de todo el producto, pero os tenemos que contar tal cual lo que jugamos, que nos encantó.
Si hasta ahora habíamos visto que Dead Space 3 transcurriría en un planeta nevado lleno de peligros, en esta demostración volvemos a la ambientación de las dos primeras entregas, con una nave espacial y los necromorfos acechándonos. El comienzo es muy espectacular con la nave a punto de colapsar, y huyendo desesperadamente antes de que explote. Controlamos cómo no a Isaac Clarke, pero también vemos a John Carver, el nuevo personaje de esta entrega que nos acompañará jugando en cooperativo, y que al parecer tendrá una elaborada historia y trasfondo detrás, no será un simple añadido para permitir cooperativo para dos jugadores.
Elementos que se destruyen, explosiones, la tensión de agarrar nuestro casco por los pelos en el último instante, y acabamos flotando en el espacio, una escena muy similar a las espectaculares secuencias vistas en Dead Space 2. Ya en el espacio exterior y tras explotar la nave jugamos una escena volando en la que tenemos que evitar y disparar a los distintos elementos que flotan en nuestro vertiginoso camino. Gracias a la herramienta gravitatoria con la que atraemos y lanzamos objetos, conseguimos coger una batería y entrar en una nueva nave, y en lo que jugamos en la demo nos pareció que este dispositivo tendrá bastante peso en la jugabilidad.
Si la primera parte de la demo fue muy Dead Space 2, el resto nos recordó muchísimo a la primera entrega. Una ambientación sensacional, terrorífica, un ritmo pausado, sin demasiados enemigos, algún que otro susto, y mucha tensión a cada paso. El diseño de los necromorfos es excelente, muy variado, y la calidad gráfica en general nos dejó bastante sorprendidos. No esperábamos ya un gran salto a estas alturas de la generación pero Dead Space 3 luce fenomenal en todos los sentidos. Iluminación, modelados, efectos gráficos, fluidez, etcétera, ha hecho un gran trabajo Visceral Games explotando más aún si cabe las actuales consolas.
Nos volvimos a reencontrar con la gran experiencia Dead Space, la que nos gusta a los amantes de la saga, a diferencia de la demo del E3 que parecía un juego nuevo, con demasiados aspectos enfocados a la acción, y veremos cuánta importancia vuelve a tener la ambientación espacial, y si solo es una especie de prólogo o pequeña sección. No nos importa que el escenario de la aventura sea diferente en aspecto al de las dos primeras entregas, es lógico que no se encasille en lo mismo o corre el riesgo de cansar, pero al menos sí esperamos que mantenga el espíritu y la gran ambientación, los escenarios claustrofóbicos, una atmósfera de por sí tan protagonista e importante como la propia jugabilidad, los necromorfos e Isaac Clarke.
Tras acabar la demostración que nos dejó con ganas de más, hubo tiempo para experimentar con la creación y modificación de armas, una de las nuevas características de Dead Space 3. Hay unos terminales, los bancos de armas, en los que podemos construir armas nuevas, hacer modificaciones a las que ya tenemos, e incluso podremos compartirlas con nuestro compañero. La cortadora de plasma originalmente era una herramienta de minería para cortar rocas, que Isaac modificó para usar contra los necromorfos, y esta habilidad a lo "MacGyver" del protagonista se va a usar intensivamente ahora para crear todo tipo de armas.
Ya podías mejorar y modificar tus armas en los dos primeros Dead Space, pero la gracia ahora es que las puedes crear desde cero, eligiendo las diferentes partes. Elegir un "chasis", un motor, el tipo de apuntado, el disparo secundario, etcétera, para crear armas que por ejemplo tengan un disparo principal eléctrico y un secundario de fuego, o que sea a una o dos manos. Que congele, que triture, con munición incendiaria, las posibilidades son enormes. Si por alguna razón os da pereza esto de poneros a construir armas, podremos conseguir los planos de armas ya diseñadas, y con seleccionarlos las crearemos al instante.
Es curioso que al lado de los terminales de creación de armas hay un botón de testeo y si lo pulsamos aparecen varios tipos de enemigos con quienes podremos probar nuestras creaciones. En el modo cooperativo si creas un armas podrás compartirla con tu compañero para que también pueda construirla, y así ir los dos igual de bien equipados. Un elemento novedoso esto de la creación de las armas, bastante trabajado, y que no parece que vaya a tener demasiada importancia en el desarrollo, ya que si no le quieres dedicar tiempo no perjudicará la experiencia global.
Buenas vibraciones
Este segundo contacto con Dead Space 3 tras el E3 nos ha dejado más satisfechos, y no parece que la nueva localización, un planeta nevado, y el modo cooperativo para dos jugadores, vayan a perjudicar la experiencia Dead Space. Habrá que ir viendo si la acción se ha intensificado respecto a la segunda parte, seguro que respecto al primero sí, y su jugabilidad ahora que lo hemos podido probar, y la ambientación, nos parecen soberbios, con unos gráficos de mucha calidad, sin defectos técnicos, con un acabado general de gran altura teniendo en cuenta que le quedan meses de desarrollo. Matar necromorfos es tan divertido como siempre, llevarse algún que otro susto recorriendo tan angustiosos escenarios también, y no dudamos de que estamos ante de una de las grandes aventuras de acción para comenzar el año 2013.