Muchos amantes de los juegos de estrategia han disfrutado de los juegos de la saga XCOM y guardan un buen recuerdo de la primera entrega (que tiene el mismo nombre que el juego que nos ocupa), que salió en 1993, es decir, hace casi 20 años. Algunos de estos fans que jugaron al original en su adolescencia acabaron trabajando en la industria de los videojuegos y han decidido, tras todos estos años, realizar una nueva versión del juego original adaptándolo a los nuevos tiempos y haciendo que sea accesible para aquellos que no conocen la saga (pero sin dejar de ser atractivo para aquellos aficionados a la misma). Tras haber podido probar las primeras pantallas del juego hemos de decir que estamos encantados con el resultado y os contamos qué nos encontraremos en este nuevo XCOM: Enemy Unknown.
Protege la Tierra de la invasión alienígena
El comienzo del juego nos cuenta con un vídeo cómo los extraterrestres llegan a la Terra y comienzan a sembrar el terror. Para luchar contra ellos se envía a un escuadrón que pasamos a controlar en la primera misión, que será el tutorial. En ella se nos enseñarán las bases del juego de una forma bastante amena, como el movimiento, o los ataques, todo ello dentro de un sistema de combate por turnos.
La idea es que cada uno de nuestros hombres (que podrán ser hasta un máximo de seis, aunque en lo que jugábamos sólo eran cuatro) tendrá dos turnos de movimiento siempre y cuando se mantengan dentro de unos límites, o uno si va en carrera a un lugar más alejado, perdiendo la oportunidad de otra acción después. Si nos quedan acciones podremos disparar, algo que haremos activando el modo combate, seleccionando el arma (cada unidad podrá llevar varias equipadas) y el blanco. Algo que queremos destacar es que probamos el juego con mando, y funciona realmente bien, han sabido adaptar los controles a la perfección, resultando muy cómodo e intuitivo.
Un aspecto muy importante del juego serán las coberturas, y es que en función de dónde nos paremos dentro del escenario, estaremos más o menos protegidos. Esto vendrá representado por un escudo más o menos coloreado, que hará que los enemigos tengan un menor porcentaje de posibilidades de darnos (o nosotros a ellos, si es que están a cubierto). Aunque estas coberturas serán muy importantes, no podremos depender de ellas, pues según reciban disparos irán rompiéndose, lo que nos dejará indefensos, y teniendo en cuenta que con un par de disparos enemigos nuestras unidades morirán, es algo a tener muy en cuenta.
Pero si la parte de los combates es profunda y muy interesante, donde el juego destaca más es en la parte de gestión de la base XCOM, y es que tras cada misión, volveremos a ella y tendremos la oportunidad de progresar en distintos aspectos. Esta base, cuya localización podremos escoger nosotros mismos al principio (cada lugar tendrá unas ventajas), contará con una serie de zonas dedicadas a diferentes tareas.
En lo que jugamos, con una base relativamente pequeña (se puede ir ampliando según avanzamos) teníamos principalmente los barracones, donde podíamos promocionar a los soldados dándoles nuevas habilidades y modificar su equipo, el laboratorio de investigación, donde poníamos en marcha investigaciones acerca de tecnología alienígena (aunque aparte de un tiempo nos requerirá una serie de recursos que deberemos ir consiguiendo en las batallas), la zona de ingeniería, para crear nuevas armas (usando ingenieros, que cuestan dinero) y la zona de mando, donde tomaremos algunas decisiones importantes, como cuál es nuestro próximo objetivo.
Cualquier decisión cuenta
Un aspecto realmente importante en XCOM: Enemy Unknown es el hecho de que todas nuestras decisiones afectan al juego: desde construir la base en un lugar, hasta investigar una cosa antes que otra, pasando por defender una ciudad dejando a la otra desamparada. Esto último será muy importante, pues XCOM se mantiene con el dinero de los distintos países, y si esos entran en pánico porque no les hemos protegido de los ataques extraterrestres, pueden llegar a retirarnos su apoyo y por tanto quedarnos con menos recursos.
Un modo que no estaba presente en el original es el multijugador, que permitirá a dos jugadores enfrentar sus escuadras, con el detalle de que podrán combinar humanos y alienígenas como deseen. La única condición a la hora de crear nuestro equipo es no pasar de los 10.000 puntos que nos dará el juego, debiendo sopesar muy bien los pros y los contras de cada unidad. Cuanto más poderoso sea un personaje más dinero costará y menos nos quedará para comprar otras. Según sus creadores, la base de este multijugador es la habilidad, ya que las unidades no van subiendo de experiencia ni nada, sino que en cada partida empezarán de cero, haciendo que gane el que sepa planificar mejor la estrategia. En este modo a cada uno de los turnos se le ha dado un tiempo máximo de nueve segundos para conseguir partidas ágiles y rápidas.
Pasando al apartado gráfico nos encontramos con un juego muy cuidado, desde sus cinemáticas generadas por ordenador, pasando por los escenarios y las distintas unidades. Algo que nos ha gustado bastante es en ocasiones cuando realizamos una acción durante el combate, la cámara cambia sola para ofrecernos un ángulo más espectacular, algo que no frena el ritmo de juego y que le da más espectacularidad. Sin duda el juego se ve muy bien y se nota que hay mucho trabajo y mimo detrás.
La verdad es que este XCOM: Enemy Unknown nos ha gustado mucho y creemos que será un homenaje estupendo al original. Estamos seguros de que los que ya conocen la saga quedarán encantados al ver cómo se han respetado las bases, mientras que aquellos que nunca hayan jugado a uno lo verán como una puerta de entrada y se encontrarán con un juego que tiene mucho que ofrecer, entre otras cosas una campañaa de unas 20 horas que promete ser altamente rejugable.