X
Juegos
Foro
Plataformas
Género/s: Action-RPG
Fecha de lanzamiento:
PC:
También en: PC PS4 Switch
FICHA TÉCNICA
Desarrollo: Supergiant Games
Producción: Supergiant Games
Distribución: Steam
Precio: 18,99 €
Jugadores: 1
Formato: Descarga
Textos: Español
Voces: Inglés
Online: No
ANÁLISIS

Primeras impresiones Transistor

Los californianos Supergiant Games, creadores de Bastion, han mostrado su nuevo juego Transistor, y tras haberlo probado éstas son nuestras conclusiones.
·
Actualizado: 21:31 17/8/2020
Versión PC. También disponible en PlayStation 4 y Nintendo Switch.

Si tuviésemos que considerar a un juego como "el triunfador" de la Penny Arcade Expo que tuvo lugar en Boston a mitad de Marzo, sin duda alguna tendríamos que hablar de Transistor, de Supergiant Games. Puede que otros juegos como los realizados por las grandes compañías fueran más visitados, pero las colas que se arremolinaban en torno a este misterioso juego independiente superaban de largo las vistas por los grandes juegos de Ubisoft, Sony o Riot, por poner 3 ejemplos.

¿Y dónde está la magia? Os preguntaréis. Los conocedores del anterior trabajo de esta empresa, Bastion, sabréis que es un juego que ha polarizado a la opinión especializada.

Si bien se elogia sin lugar a dudas la original manera de contar la historia, su maravilloso aspecto sonoro y gráfico, y otros detalles, los más críticos han expresado sin titubear que es un juego más, que no aporta demasiado, y que es más continente que contenido.

En cambio, en Transistor sus creadores están haciendo lo posible por reforzar el punto débil de su anterior título, aprovechando la maestría que alcanzaron en todos los aspectos de forma que ya mostraron en Bastion. Así, la historia nos lleva a un futuro cercano y al parecer algo distópico, donde una banda de asesinos está asesinando indiscriminadamente todo tipo de artistas, incluyendo a la protagonista del juego, una famosa cantante llamada Red. Pero a Red, en lugar de asesinarla, le roban la voz. A cambio, se encuentra una espada, que además de tener voz, es la que da nombre al juego.

Así, una vez empuñemos a Transistor, ella (o él, porque ha sido poseída por el espíritu de un amigo de Red), nos guían en la partida. En este mundo sorprendente, donde una mujer cuya mayor batalla era salir al escenario y poner los pelos de punta del respetable a base de usar sus afinadas cuerdas vocales, tiene que aprender cómo son las cosas ahí fuera. De manera que a Red (vamos, nosotros), Transistor le tiene que explicar qué son esas máquinas infernales que le persiguen, por qué las puertas están cerradas, cuáles son sus poderes, y qué es lo que está pasando en el mundo mientras ella sólo se dedicaba a cantar.

Y lo hace de una manera que nos recordará a la de Bastion, pero dentro de un mundo con otros condicionantes. La voz de Transistor es otra vez masculina, pero es más lejana, más fría, más robótica. Como si alguien que conoce lo que está pasando estuviera encerrado dentro de una espada, que no deja de ser lo que pasa en el juego. El resto del apartado sonoro acompaña fantásticamente lo que vemos, y esperemos que Supergiant Games mantenga el listón durante el resto de la aventura, pues no está de más recordar que Red es una estrella de la música, y es la protagonista del juego. Así que es de justicia escuchar durante todo el juego melodías que nos recuerdan sus mejores momentos.

Si en algo tenían espacio donde poder mejorar respecto a Bastion es en la jugabilidad, y si bien el anterior es un juego que mezcla habilidad y acción con cierta sensación de exploración (como pueda suceder en Diablo o Zelda), en esta ocasión tenemos un interesante apartado táctico entre las posibilidades que ofrece. Esto es debido a su curioso sistema de control, ya que aunque podemos encararnos a los enemigos que nos encontremos a base de espadazo y tentetieso (en este caso otro tipo de habilidades como la posibilidad de disparar un rayo a distancia), Transistor posee una habilidad (llamada "Turn") que nos permite parar el tiempo, y mediante una barra de energía que se gasta conforme vayamos encadenándolas, realizar una tras otra acción (movernos, disparar, usar ítems...), que sucederán en el orden que encarguemos tras acabar nuestro "Turn".

Por desgracia para Red, una vez se realice este "Turn" la energía de Transistor anda bajo mínimos, lo que implica que no podremos ni atacar cuerpo a cuerpo, así que si quedan enemigos en pantalla deberemos buscar refugio tras los diferentes objetos del escenario (que por cierto, se suelen poder romper), y esperar para poder volver a atacar de nuevo.

Durante la partida nos encontraremos personajes de los que aprender (o más bien, absorber), nuevas habilidades, y cada una de estas habilidades tendrá un efecto sobre el escenario o los enemigos distinto, de manera que en algunas ocasiones nos interesará más emplear unos, y en otras será más conveniente usar otros.

Otro aspecto donde se parecen Bastion y Transistor, al menos de inicio, es en el uso de una perspectiva isométrica sobre unos escenarios que tiran de varios estilos gráficos para ambientarnos lo mejor posible en el universo que Supergiant Games nos haya querido situar. En esta ocasión se abandona totalmente el estilo medieval fantástico bucólico pastoril para adentrarnos en un espacio más contemporáneo, pero a la vez ligeramente futurista, con abundancia de blancos, azules y negros, brillos y sombras, y esa sensación de desconcierto, de que esto se le ha ido a la humanidad de las manos, como si hablásemos de alguna metrópolis actual oriental.

Por suerte, en esta ocasión el aspecto gráfico no se queda "solo" en una isométrica preciosista, sino que lo acompañan, por un lado, breves escenas pictóricas que se aprovechan, aún más, para ponernos en situación, y por otro lado algunos momentos donde nuestra protagonista recorre el escenario usando un desplazamiento lateral, como si de un juego de plataformas se tratase, pero que a día de hoy se emplea más como un recurso gráfico, que como una posibilidad jugable.

En resumidas cuentas, es fácil de entender por qué este juego llamó tanto la atención de los asistentes a la Penny Arcade Expo. No sólo el pedigree de sus creadores llama la atención, sino que al menos hasta donde hemos podido probar, destaca en todos y cada uno de sus apartados.

Es bello sonora y gráficamente, es atractivo, es interesante, y encima es original. Lo único malo es que tendremos que esperar hasta 2014 para saber qué plataformas son las elegidas por sus autores (o algún editor que lo lance) para aparecer en ellas, pero sin duda alguna (salvo sorpresa mayúscula o gran desgracia) será un imprescindible aparezca en la plataforma que aparezca.

Colaborador