Cuando Konami nos invitó a probar Meta Gear Solid Delta: Snake Eater y Silent Hill 2, la compañía japonesa tenía preparada una sorpresa junto a sus dos grandes títulos: Deliver at all Costs. Este juego independiente, originalmente concebido como un proyecto universitario, ha ido creciendo hasta convertirse en un juego completo y aunque, obviamente, no tiene el mismo renombre de las sagas con las que compartió evento, nos dejó unas muy buenas primeras impresiones.
El repartidor definitivo
Deliver at all Costs es un juego de conducción y aventura desde una perspectiva isométrica que combina una puesta en escena y un diseño de misiones bastante cómico con una narrativa aparentemente bastante más seria. Es posible que el título os suene, y es que el proyecto original se lanzó de manera gratuita en itch.io, donde sigue disponible ahora bajo el nombre de Delivery Man. A efectos prácticos es un prototipo tempranísimo del juego, así que podéis probarlo si os pica la curiosidad.
Se trata de un título de mundo abierto, con un mapa dividido en diferentes zonas independientes pero conectadas, y en el que podemos conducir libremente para explorar y buscar secretos o misiones secundarias, o ir directamente a por la siguiente misión principal.
Nos parece importante destacar que no sólo conducimos, sino que podemos y tenemos que bajarnos del coche para aventurarnos allá donde no lleguen las cuatro ruedas, algo que será imprescindible para muchas misiones.
Deliver at all Costs nos lleva a los Estados Unidos de los años 50 para ponernos en la piel de Winston Green, quien, al borde del desahucio, decide buscar trabajo como repartidor. Claro que las cosas no van a ser tan fácil como se pensaba, y los repartos no van a ser para nada tradicionales. Aquí es donde este título brilla. Aunque sólo hemos podido jugar hora y media y desde el principio, por lo que hemos tenido que hacer los primeros tutoriales y demás, nos ha quedado muy claro –y los desarrolladores nos lo han confirmado– que podemos esperar todo tipo de locuras al volante.
Las misiones van desde llevar un pescado gigantesco a través de la ciudad pasando por ciertos puntos para que coma a repartir regalos a nuestros mejores clientes accidentalmente avergonzándolos por sus compras, pasando por llevar un misil que explotará al menor contacto mientras nos persiguen vecinos enfadados. Por supuesto, queda esperar a ver cómo evoluciona, pero nos ha gustado mucho lo que hemos visto por ahora.
¿La seña de identidad? El caos
Deliver at all Costs está diseñado en torno a las físicas. Por una parte, tenemos la destrucción. Podemos romper prácticamente cualquier cosa que se interponga en nuestro camino, incluyendo muchos edificios, lo que le da un toque muy espectacular a prácticamente cualquier prueba, pero las físicas también se aplican de otras maneras. Por ejemplo, el mencionado pescado gigante dará coletazos mientras conducimos, desviándonos de nuestra trayectoria y obligándonos a reajustar la conducción.
Sobra decir que este tipo de ideas será una constante –por ejemplo, otra misión acoplaba un puñado de globos de helio a nuestro vehículo, despegándolo de la carretera cada vez que cogíamos una pendiente y haciéndonos perder el control–, lo que unido a las fantásticas físicas de la conducción hizo que nos lo pasáramos genial a los mandos. Eso sí, todos los vehículos tenían las mismas físicas en la versión que probamos, pero los desarrolladores nos confirmaron que esto cambiará en la versión final, y cada uno tendrá su propio estilo.
Además, aun estando todavía en desarrollo, nos pareció muy competente en lo técnico, con mucho detalle visible incluso desde la perspectiva alejada que muestra. Como nota, la cámara se puede girar hacia la izquierda y hacia la derecha, aunque sólo a dos posiciones fijas, por lo que mantendrá siempre la perspectiva isométrica desde un ángulo u otro. Por último, queremos destacar la banda sonora original de música de los años 50, compuesta para la ocasión, y que, lo poco que hemos escuchado, nos ha gustado mucho.
Una agradabilísima sorpresa para los fans de la conducción
Deliver at all Costs nos ha parecido un juego muy, muy divertido, con una original mezcla de conducción y exploración a pie, aderezada con unas físicas muy bien implementadas que no sólo hacen que todo se destruya de manera muy vistosa, sino que también nos dejan muy buenas sensaciones al volante. Si a esto le unimos lo que parece ser una historia muy trabajada, con un toque un tanto serio que contrasta con la alocada puesta en escena de su jugabilidad, el resultado es un prometedor título al que creemos que hay que seguirle la pista.
Por ahora no tenemos muchos más detalles sobre su lanzamiento, más allá de que llegará el próximo año a PC, PlayStation 5 y Xbox Series X/S, pero creemos que es uno de esos títulos que, si os gusta el concepto que propone, no va a decepcionar.
Hemos realizado estas impresiones jugando a la versión de PC en un evento organizado por Konami en Londres.