Hasta ahora, Gameloft ha destacado por sus conversiones y creaciones originales para teléfonos móviles, con títulos tan populares como Marcel Desailly Pro Soccer, Siberian Strike, o las dos conversiones de los recientes Prince of Persia y Splinter Cell por citar algunos. También han ofrecido creaciones suyas para N-Gage, la consola portátil y teléfono móvil de Nokia, siendo uno de sus títulos disponibles para este sistema el propio Asphalt Urban GT, un juego que, por tanto, está disponible tanto en la citada N-Gage como en teléfonos móviles además de, ahora también, Nintendo DS.
En consecuencia, el juego ha sido adaptado para NDS, de manera que el uso que va a hacer de sus características especiales es limitado, pero no por eso tendremos que prejuzgar la calidad del título cuando llegue a nuestro mercado. Es cierto que usa la segunda pantalla para unos menús no del todo intuitivos y como mapa en el que señalar la posición de los vehículos una vez estemos en carrera...
no son usos que podamos calificar como originales, pero, al fin y al cabo, pretender que todos los juegos para Nintendo DS tengan que usar todas –o buena parte de- sus características especiales es un planteamiento que tampoco nos parece muy acertado, sino más bien reduccionista y una buena excusa a la que pueden aferrarse ciegamente los detractores (actitud irracional donde las haya) de la consola.
Es lógico que las compañías busquen usar esas características a su favor y que los usuarios lo evalúen como ventajoso, pero no es lógico considerar que un juego que no lo haga (o no al menos de una manera radicalmente fresca) es, por definición, execrable o "indigno" de aparecer en la consola. En cualquier caso, casi toda la acción tiene lugar en la pantalla superior, presentándose ésta despejada casi por completo de indicadores, aunque sí están presentes el velocímetro, el indicador de turbos y nuestra posición: lo esencial. La pantalla inferior alberga toda la información sobre los vehículos en la pantalla de selección de automóvil, y varios indicadores además del mapa mientras estamos echando una carrera.
Frente a esto, Asphalt Urban GT ofrece un buen surtido de coches licenciados de marcas tan populares como Lamborghini, Hummer, Jaguar o Volkswagen en entornos urbanos con una tasa de 60 cuadros por segundo totalmente estable, ofreciéndonos, de este modo, una sensación de velocidad muy buena con un estilo arcade puro y duro. El juego basará su mecánica de juego en nuestro dominio sobre la técnica del derrape y en premiar una conducción agresiva y peligrosa dándonos impulso: sin un buen uso de esas posibilidades, estaremos destinados a fracasar.
Sin embargo, como es cada vez más habitual, el incentivo natural de un arcade de superar nuestras propias marcas no es suficiente, por lo que han incluido un moco Carrera en el que deberemos enfrentarnos a competiciones para ir desbloqueando más circuitos y más coches, que deberemos ir comprando con el dinero que consigamos. Por supuesto, cuanto mejor sea nuestro vehículo (y mejores sean las modificaciones que le hagamos para aumentar sus prestaciones), mayor será la sensación de velocidad, y es que no podemos esperar que un Hummer nos transmita la misma sensación que un deportivo.
Esta sensación está muy bien lograda, y unido al diseño de vehículos y escenarios compone uno de los juegos más interesantes gráficamente de la primerísima hornada de juegos que acompañarán a Nintendo DS en su lanzamiento europeo, pese a que para mantener esa tasa de cuadros por segundo hayan tenido que recurrir a trucos como introducir elementos 2D. Con todo, parece que el aspecto general es bastante sólido.
Algunas reacciones de los vehículos pueden parecer demasiado artificiales y forzadas, motivadas en buena medida porque la física no es del todo realista; no es algo esencial en un arcade como éste, pero aún así el resultado no parece del todo redondo en este sentido. Por otro lado, debemos señalar que dado el frenético ritmo que impone el juego, algunas reacciones de los vehículos parecen las más adecuadas, al no cortar la acción en ningún momento y ayudar, de este modo, a mantener en todo momento la fluidez esperable en su desarrollo.
El juego ofrecerá la posibilidad de jugar con hasta cuatro personas más, siempre y cuándo todos y cada uno de ellos tengan su propia copia del juego. Este modo multijugador, que presentará varias opciones de juego, elimina a los vehículos controlados por la inteligencia artificial del videojuego, pero no es un gran problema.
Lo que sí puede resultar extraño es el hecho de que si optamos por echar una carrera nosotros solos y luego queremos ver la repetición, se nos presentará de un modo muy espectacular, simulando una retransmisión televisiva, en la que, por alguna extra razón, desaparecen todos los vehículos y elementos del escenario, salvo nuestro propio coche... de manera que adelantamos al vacío, nos golpeamos contra el vacío, y nos empuja el vacío. El resultado es raro, cutre y poco afortunado en general, y no creemos que para Europa esta extraña circunstancia se haya corregido.
Con sus defectos y sus virtudes, Asphalt Urban GT será la única opción dentro de los juegos de velocidad (junto a Ridge Racer DS) durante los primeros meses de la consola, y parece que tiene, por suerte, una serie de aspectos que lograrán captar la atención de los que más disfrutan con los arcades de carreras. Pese a todo, habrá que esperar todavía un mes para evaluarlo cuando finalmente llegue a las tiendas de nuestro continente.