X
Juegos
Foro
Plataformas
Género/s: Rol
Fecha de lanzamiento:
3DS:
FICHA TÉCNICA
Desarrollo: Alpha Dream
Producción: Nintendo
Distribución: Nintendo
Precio: 39,99 €
Jugadores: 1
Formato: Tarjeta
Textos: Español
Voces: No
Online: No
ANÁLISIS

Impresiones Mario & Luigi: Dream Team Bros.

Mario, Luigi y su original aventura de rol vuelven por cuarta vez dispuestos a sorprendernos y divertirnos como en anteriores ocasiones.
·
Actualizado: 21:31 17/8/2020
Versión Nintendo 3DS.

El archiconocido fontanero de Nintendo, además de sus exitosos y clásicos juegos de plataformas, ya sea en dos o tres dimensiones, tiene un sinfín de subsagas que han explorado diversidad de géneros. Las carreras con Mario Kart, los minijuegos y el tablero de Mario Party, los deportes como Mario Golf y Mario Tennis, o incluso los RPG con títulos como el mítico Super Mario RPG: Legend of the Seven Stars de Square para Super Nintendo, la serie Paper Mario de Intelligent Systems, con entregas en Nintendo 64, GameCube, Wii y Nintendo 3DS, y la saga que hoy nos ocupa, Mario & Luigi de AlphaDream.

Una serie relativamente joven y siempre portátil que comenzó en 2003 con Mario & Luigi: Superstar Saga para Game Boy Advance, tuvo una secuela con Mario & Luigi: Compañeros en el tiempo en 2006 para Nintendo DS, y una tercera entrega con Mario & Luigi: Viaje al centro de Bowser en 2009 también para Nintendo DS. Juegos frescos, variados, originales, muy simpáticos y graciosos, una saga que siempre ha convencido, especialmente en su primera y tercera entrega, a cada cual mejor, recibidas con entusiasmo por crítica y público, pese a ser una de las series menos conocidas de Nintendo, o al menos no tan popular como se merecería.

El próximo 12 de julio llegará la cuarta entrega con Mario & Luigi: Dream Team Bros., que ya hemos podido probar, y que como esperábamos no defrauda, manteniendo su frescura, variedad de situaciones, el entretenido sistema de combate por turnos, y lo que es más difícil, su capacidad para seguir sorprendiendo y conseguir sacarnos una sonrisa. La historia se desarrolla en una isla misteriosa, donde Mario deberá ir y venir entre el mundo real y el mundo de los sueños de Luigi para rescatar a la princesa Peach –sí, otra vez-.

Por lo que pudimos jugar, parece que habrá dos tipos de fases claramente diferenciadas. Unas en el mundo real, en las que controlaremos a Mario y Luigi a la vez, con un botón asignado a cada uno, y con entornos tridimensionales, donde nos cruzaremos con los enemigos y bastará con tocarles –mejor si saltamos sobre ellos- para iniciar el combate. Y otras fases en dos dimensiones, los momentos en los que estamos metidos en los sueños de Luigi, con algunos toques plataformeros, acertijos, y que en la mayor parte del tiempo solo controlamos a Mario.

El sistema de combate por turnos se mantiene en esencia muy similar a las anteriores entregas de esta peculiar saga, y siempre hay un factor de precisión o sincronización para causar más daño o evitar los golpes enemigos, algo que se ve aquí potenciado en los ataques especiales, que son prácticamente minijuegos. En esta demo teníamos como ataques principales la opción de saltar sobre los enemigos o usar el martillo, en ambos siendo importante pulsar el botón en el momento preciso, para causar mucho más daño.

El único ataque especial o tándem disponible en los combates en el mundo real era uno con el caparazón, que gastaba cuatro puntos de energía o maná. Mario y Luigi corren lejos del enemigo situándose de espaldas a la pantalla, y lanzan un caparazón al enemigo, como si fuera un muro de frontón. Cada vez que el caparazón vuelve, ya sea con Mario –botón A- o Luigi –botón B-, tienes que devolver el caparazón en el momento justo, para seguir haciendo más y más daño. Cuando los enemigos nos atacan, no solo podemos esquivar sus golpes saltando, sino que además si lo hacemos en el momento preciso podemos incluso realizar un contraataque, y quitarles algo de vida. Tras un rato combatiendo y explorando un escenario no demasiado grande, pasamos a la parte más original y diferenciadora de esta entrega, las fases en las que nos metemos en los sueños de Luigi.

Aquí el desarrollo cambia a las dos dimensiones, controlándose de manera similar a cualquier Mario clásico, con plataformas, bloques con monedas y enemigos, solo que cuando saltamos sobre estos, se inicia un combate por turnos. En los combates dentro de los sueños de Luigi se producen cambios importantes, ya que solo manejamos a Mario, y tenemos ataques especiales totalmente distintos, los llamados ataques luiginarios. En la demo solo pudimos disfrutar de uno que nos encantó, en el que Mario convierte a Luigi en una pelota y moviendo la consola, mediante los giroscopios, tenemos que guiar a Mario sobre esta bola mientras aplasta a decenas de Luigis y hacemos crecer el tamaño de la esfera, a lo Katamari Damacy, el particular juego de Namco. Cuando llegamos al final del recorrido, tenemos que lanzar la pelota de Luigis sobre el grupo de enemigos, como si estuviéramos jugando a los bolos, realizando más o menos daño dependiendo de lo grande que hubiéramos hecho la bola, y de nuestro acierto en la dirección en la que la lanzamos.

Un ataque demoledor, muy útil y sobre todo divertido, por lo que sentimos mucha curiosidad por saber qué otro tipo de situaciones nos tienen preparadas en la versión final. Tras cada combate, ya sea en el mundo real o en el de los sueños de Luigi, conseguimos puntos de experiencia, y cuando subimos de nivel podemos mejorar alguno de los parámetros: vitalidad, tándem, ataque, defensa, velocidad y bigote. Sí, bigote, ya que por lo que jugamos parece que esta parte peluda del cuerpo de Luigi será muy protagonista, y nos servirá para superar distintos obstáculos.

Cuando estamos en el mundo de los sueños, en la pantalla inferior, en vez de mostrarse el mapa del nivel, vemos una recreación tridimensional de Luigi durmiendo, con la que podemos interactuar, de manera similar, e incluso puede que como homenaje, a lo que vimos en la pantalla de inicio de Super Mario 64. Cuando lleguemos a ciertas zonas de los niveles, unas figuras en los escenarios con un brillo verde nos advierten de que es el momento de interactuar con Luigi mediante el lápiz táctil. Mandamos al Luigi "falso" dentro del objeto, y en la pantalla inferior interactuamos con el Luigi dormido.

En la fase que jugamos había que tirarle del bigote, para que Mario se enganchara y saliera disparo a diferentes zonas del escenario, de otra manera inalcanzables. Otro de los usos es el de atraer unos bloques flotantes que se encuentran al fondo del escenario, para lo que hay que rascarle la nariz en la pantalla táctil, que estornude, y aparezcan los bloques en primer plano. Combates por turnos, saltos, exploración y algún que otro rompecabezas hacen que las fases dentro de los sueños de Luigi sean la mar de entretenidas.

El apartado gráfico es bastante peculiar, ya que si bien en muchos momentos utiliza modelados poligonales de Mario y Luigi, en otras ocasiones, como en las fases 2D, los combates o en las escenas que nos narran la historia, se utiliza un peculiar estilo de sprites basados en personajes prerenderizados, al estilo de la saga Golden Sun. Queda muy bien, con animaciones y posturas que serían casi imposibles en modelados en tiempo real, algo que le da un toque cartoon y de fuerte personalidad al diseño artístico, que como es habitual en esta saga, se permite unas cuantas locuras.

Mario y Luigi nos refrescarán el verano

Nos encanta esta saga creada por AlphaDream, que no ha flaqueado en ninguna de sus anteriores entregas, y por lo que hemos podido probar, tampoco va a hacerlo en la cuarta, su debut en 3DS. Un juego divertido, original, simpático, con un sistema de combate muy entretenido, y muy variado en lo jugable, con rol, puzles, plataformas y todo tipo de situaciones, a cada cual más sorprendente. Queda por ver si Mario & Luigi: Dream Team Bros. consigue superar a la anterior entrega, el genial Viaje al centro de Bowser, pero con que al menos esté a la altura, nos encontraremos ante uno de los mejores títulos del cada día mejor catálogo de 3DS.

Redactor