Análisis de The Walking Dead: Our World (Android, iPhone)
La llegada de smartphones con más capacidad de rendimiento, mejores cámaras y más características enfocadas al videojuego, han logrado que el mercado de las aplicaciones reviva de forma paulatina. Tras unos años de locura y oferta casi asfixiante, los juegos que llegan a las tiendas digitales de los principales sistemas operativos como iOS y Android son cada vez mejores.
Solventando los escollos como el abuso de los micropagos y los free-to-play enmascarados, versiones de grandes éxitos como Fortnite y PUBG demuestran que hay un mercado que juega en móvil, que desea jugar con otros usuarios y que por lo tanto, está dispuesto a pasar horas de más con un dispositivo ya presente en nuestro día a día como el teléfono móvil.
Pokémon GO revolucionó el mercado en 2016 con un éxito sin precedentes en smartphones. Su lanzamiento se convirtió en un fenómeno que llevó a millones de jugadores a revivir sus batallas de la infancia con las famosas criaturas de Nintendo por las calles de las principales ciudades del mundo. Su combinación de realidad aumentada y la idea de trasladar el juego de la comodidad del salón a la calle, rompiendo una barrera y ampliando los límites jugables de la aplicación, triunfó.
Facturando miles de millones de dólares, el videojuego influenció en toda una oleada de nuevas apps. Ahora tenemos Jurassic World Alive, una versión con los dinosaurios de la saga cinematográfica de Parque jurásico y el salto se ha consolidado con The Walking Dead: Our World, un título que añade zombis a la famosa fórmula del título de Niantic.
Caminantes por nuestra ciudad
The Walking Dead: Our World es un nuevo videojuego basado en el éxito de televisión de AMC, The Walking Dead. La serie protagonizada por Andrew Lincoln y Norman Reedus nos cuenta la historia de un grupo de supervivientes en su lucha contra las hordas de muertos vivientes que se han apoderado del planeta, y de la forma en la que las personas se enfrentan a un escenario tan apocalíptico como de pesadumbre.
A lo largo de varias temporadas, y con sus altibajos, la producción televisiva basada en el cómic de Robert Kirkman ha tenido decenas de juegos y adaptaciones, algunas con más calidad que otras, pero es la primera vez que se intenta condensar este particular universo a una app que rompe la cuarta pared.
A simple vista podría decirse que estamos ante un videojuego que reúne todas las características de Pokémon GO o el citado Jurassic World Alive y las adapta a su propio universo. Como supervivientes de la pandemia zombi que asola las calles, deberemos enfrentarnos a los muertos, reunir recursos, mejorar a nuestro personaje e intentar formar un grupo lo suficientemente poderoso como para garantizar la seguridad de la zona en la que queramos establecer nuestro fuerte.
La aplicación usa los datos de Google Maps para la construcción de nuestro propio escenario en base a lo que nos rodea, ofreciéndonos calles, plazas, edificios y parques en unas rudimentarias 3D para ambientarnos en su relato postapocalíptico.
Hablamos de una app un tanto extraña, a la que vendría bien el calificativo de híbrida, porque mezcla realidad aumentada y construcción/defensa de bases al igual que algunos de los anteriores de la saga, invitándonos a recolectar recursos y supervivientes para formar grupos más poderosos con los que sobrevivir.
No son los simples gimnasios de Pokémon GO, pues eso son plazas fijas que delimita el juego: aquí cada usuario puede elegir en qué emplazamiento levantar una armería o un refugio. De hecho nos encontraremos con grupos de jugadores, zonas controladas y algunas características competitivas, pero el título está más enfocado a la supervivencia que al competir de forma directa y encarada contra otros usuarios.
Deberemos desplazarnos por nuestro entorno, combatiendo en primera persona contra los no muertos cuando toca -procurando apuntar a la cabeza-, rescatando civiles que han caído en las redes de estos mordedores, mejorando nuestras características y combatiendo por los recursos. Recursos que serán vitales, pues hablamos de un título que premia mucho la dedicación y mejora, quizás más que incluso su más directa competencia. Deberemos estar muy pendientes a los suministros, desde la munición a la energía -necesaria para hacer las acciones del juego-, pasando por las habituales monedas virtuales.
¡Los muertos vivientes somos nosotros!
En este tipo de videojuegos, como ya de nos demostró Pokémon GO, hay que tener un plan de contenidos y progresión muy marcado. Necesitamos algo más que una simple subida de niveles, y si bien The Walking Dead: Our World incorpora misiones y desafíos en su estructura, en un intento de hacer atractivo y variado el videojuego desde el minuto uno. Y lo cierto, es que lo consigue, al menos en su arranque. Durante los primeros días estaremos realizando misiones, recogiendo suministros, combatiendo las distintas zonas de infestación del mapeado -lugares en los que se acumulan una cantidad de zombis ingente- y mejorando a nuestros compañeros, héroes y armas.
Con cada misión y encuentro con los no muertos recibiremos una serie de cartas, que nos irán desbloqueando mejores héroes y personajes -como los célebres Daryl, Michonne, Rick Grimes o Carol, por citar algunos- para nuestras misiones, pistolas y fusiles automáticos de mayor potencia y calibre para hacer más cantidad de daño en los tiroteos contra las criaturas. También encontraremos granadas y otros elementos arrojadizos que pueden facilitarnos la tarea. En función de nuestro éxito, nos encontraremos con distintas recompensas. Si apuntamos siempre a la cabeza obtendremos mejores premios, así que debemos tener siempre un ojo a la hora de reventarle los sesos al zombi que tenemos delante. Es mejor disparar poco y con atino a vaciar cargadores enteros.
En The Walking Dead: Our World tenemos dos tipos de valores monetarios virtuales, oro y monedas. El primero se usa para construir edificios o refugios, mejorarlos y hacerlos más completos, mientras que las monedas se utilizan para configurar y aumentar las habilidades a nuestros personajes. Es aquí donde el juego hace su agosto, pues en la tienda del título encontramos packs y bundles con los principales héroes, que si bien pueden salirnos de forma aleatoria como cromos y recompensas en las misiones, pueden adquirirse de forma directa empleando monedas -o dinero real-, saltándonos las esperas. En nuestras partidas no hemos notado un muro de pago excesivo o muy asfixiante, algo que agradecemos después de tantos juegos apretando al consumidor, así que se puede jugar sin necesidad de gastar un solo céntimo si tenemos en cuenta las habituales esperas o la lenta progresión -unida a la repetición-.
Apartado técnico
El juego hace gala de un motor gráfico en 3D que es capaz de lo mejor y lo peor. Por una parte ofrece una serie de elementos muy cuidados, como la representación tridimensional de los personajes de la producción televisiva, y el detalle de recrear con volúmenes edificios y monumentos. Sin embargo, y aunque la realidad aumentada está presente, a veces da la impresión de ser meramente anecdótica, otorgándole poca importancia. Está bien integrada en los escenarios, mejor que incluso otros títulos, pero no tiene el papel capital que podría haber llegado a tener teniendo en cuenta lo atractivo que es ver a muerto viviente andando por la calle de nuestro barrio o a Norman Reedus dándole caza enfrente de nuestra frutería de confianza. También hemos detectado algunos bugs, como edificios que aparecen y desaparecen -con lo molesto que es construir algo con dinero del juego para que luego no está disponible- y algún que otro problema con las texturas.
En plano de la interfaz, un apunte. The Walking Dead: Our World tiene una de las interfaces de texto y visuales más recargadas e incómodas de cuantas hemos visto. No es práctica, no en el sentido de Pokémon GO o incluso Jurassic World World, en las que el contenido prima por encima de otros aspectos visuales. Todo parece dispuesto con poco o ningún orden, resultando confusa hasta que pasamos un tiempo delante de ella. No es intuitiva, y en un título que está hecho para que disfrutemos de partidas cortas cuando salimos de casa, nos parece un error.
En cualquier caso, el título se comporta bien, es espectacular en terminales de mayor rendimiento -nosotros hemos analizado el videojuego en un iPhone X- y aunque consume mucha batería -hace un uso intensivo del GPS, por eso os recomendamos que os descargáis parte de los mapas de Google Maps en vuestro terminal-, merece la pena echarle al menos un vistazo. Está traducida al castellano y goza de buena sonorización.
Conclusiones finales
The Walking Dead: Our World es un juego entretenido, muy completo en opciones, y con un sistema de micropagos medianamente tolerable. A nivel técnico, pese a algunos bugs y fallos puntuales, nos parece muy competente y su planteamiento llega a ser muy interesante, sobre todo por compartir espacio y misiones con algunos de los protagonistas de la serie de televisión de AMC -y que en nuestro país emite FOX-. Sin embargo, el peso de la repetición y el excesivo farmeo al que debemos someternos como jugadores en determinados momentos del videojuego, acaban por lastrar un título que acaba siendo como una especie del día de la marmota con zombis. Recomendado para los aficionados a la serie, los zombis y los que siguen enamorados de una tecnología con tanto potencial como la realidad aumentada.
Hemos analizado el juego descargándolo de forma gratuita de la App Store.