'Soldier', la desconocida secuela de 'Blade Runner' de Ridley Scott, fue enterrada debido a sus malas críticas y sus malas cifras de recaudación. Sin embargo, es uno de los filmes más destacados dentro de la carrera de Kurt Russell debido a que, por tan solo 104 palabras, ganó hasta 15 millones de dólares. Keanu Reeves no fue el que más ganó por decir menos en 'John Wick', ese título lo mantiene el querido padre de Wyatt Russell.
La olvidada secuela de 'Blade Runner' hizo a Kurt Russell de oro: ganó 144.000 dólares por palabra y fue un fracaso
A pesar de contar con David Webb Peoples, guionista de 'Blade Runner' y de partir de ciertos elementos de la obra de Ridley Scott para ser una especie de secuela encubierta, 'Soldier' fue un absoluto traspié dentro de la carrera de Paul W.S. Anderson, que acaba de estrenar 'Tierras perdidas' de forma desapercibida. El largometraje contó con un presupuesto de unos 60 millones de dólares y apenas recaudó 15 millones, hundiéndose en comentarios negativos.
Lo que no se hundió fue la cuenta bancaria de Kurt Russell, que se metió en el bolsillo, precisamente, el total de la recaudación por tan sólo deci 104 palabras. Se trata de un guion muy escueto para un papel protagonista, con unos diálogos sencillos y directos para favorecer el ritmo de la acción y la intensidad, elementos propios de Anderson por otro lado. No obstante, en ese caso no salió bien.
Ahora bien, como recuerdan desde Espinof, a pesar de que 'Soldier' fue una mina de oro para el actor protagonista, este no salió demasiado bien parado debido a que asumió parte de las escenas de riesgo, sufriendo así lesiones graves como la ruptura del tobillo izquierdo y también parte de la parte superior del pie derecho. Es decir, que la producción tuvo que retrasarse, provocando así gastos extra para Warner.
En cualquier caso, aunque 'Soldier' no sea ni considerada obra de culto a estas alturas, aun forma parte de la memoria de los verdaderos amantes de 'Blade Runner' gracias al libreto de David Webb Peoples e incluso a la propia interpretación de Kurt Russell, acompañado por otras estrellas como Connie Nielsen, Michael Chiklis y Jason Isaacs.
