Los ciberdelincuentes siguen haciendo de las suyas en internet, en unos últimos meses que han estado plagado de ataques, caídas, virus y robos de datos a todo tipo de compañías en lo que ya parece una guerra cibernética en la que todo vale.
La última afectada aquí es la taiwanesa Acer, una marca conocida por sus productos de hardware y sus periféricos entre los que encontramos también dispositivos para jugadores como portátiles, monitores, teclados, ratones o tarjetas gráficas ideadas especialmente para los gamers.
Esta marca ha reconocido hace unas horas que esta semana ha sufrido un ataque informático con un grupo de hackers accediendo de forma ilegal a sus servidores para robar 160 GB de datos internos de la marca entre los que por fortuna no se encuentran datos personales o de las cuentas de sus usuarios, por lo que en este sentido a nivel del consumidor podemos estar tranquilos.
Un robo de información confidencial que se vende al mejor postor
Entre los 160 GB se encuentran un total de 2869 archivos repartidos en un total de 655 directorios que incluyen todo tipo de contenido que va desde presentaciones de productos confidenciales que aún no han sido compartidos con el gran público, manuales de uso o archivos ISO, de BIOS o ROM para diferentes dispositivos de Acer.
El objetivo del hacker es extorsionar a Acer y ya se ha puesto en contacto con la empresa taiwanesa para pedirles un rescate de los datos, apuntando a que solo aceptará el pago con la criptomoneda Monero y lo que no ha salido a la luz es el montante de una operación que probablemente sea rechazada por Acer ya que, a fin de cuentas, nada le garantiza que no se quede con los datos igualmente y los venda al mejor postor.
Este no es el único hackeo a una gran compañía que hemos visto en los últimos meses. A estas alturas del año pasado NVIDIA sufrió un ataque parecido y hace solo unas semanas Activision Blizzard sufrió otro hackeo con el que se filtró información personal de varios empleados.