Matthew McConaughey pasó de ser la estrella de las comedias románticas a una de las figuras del Hollywood más exigente y dramático. El actor, que acaba de publicar sus memorias, ha querido explicar cómo ha ido encauzando su carrera profesional, lidiando con episodios muy traumáticos como un episodio de abusos sexuales que ocurrió en su adolescencia y del éxito desmesurado que llegó a experimentar tras su debut con Richard Linklater en Movida del 76. Ahora confiesa, a través del programa de Apple TV+ The Oprah Conversation cómo estuvo planteándose dejar el cine.
Una carrera que casi se trunca por el agotamiento y el 'encasillamiento'
Hay muchas figuras de gran repercusión en el séptimo arte que llegan a un tope de tolerancia que los hace plantearse el abandono de su carrera en pos de otros intereses profesionales. Ya sea por un exceso de fama, dinero o cansancio acumulado, es bastante común ver cómo determinados actores y actrices, como comentábamos en Vandal Random piensan en dejarlo todo. "Pensé en otras profesiones", explica el actor en la entrevista cuando relata determinados pasajes de su libro. De hecho, creía que podría haber sido profesor, algo que es actualmente en la universidad, o incluso entrenador de fútbol de instituto. No descartó tampoco dedicarse a algo más liberal, como director de orquesta o guía espiritual.
"No creía que iba a volver, lo tenía decidido. Hice algunos papeles y empecé a tener esa sensación de que cuanto más difícil se volviera, más gratificante sería. Continúa, quédate ahí, no tires del paracaídas, McConaughey" afirma en relación a esa chispa que comenzó a sentir y que lo hizo mantenerse en la actuación. Luego de ese impulso, el actor aceptó papeles como True Detective y Dallas Buyers Club, que le acabaría dando el éxito y el reconocimiento de la crítica, y grandes blockbuster como Interstellar o El lobo de Wall Street.
Os recordamos que las memorias del actor, Greenlights, cuentan la historia de la vida de McConaughey, de 50 años de edad, están planteadas en varias luces de distintas tonalidades: verdes, amarillas y rojas. Estas son las que marcan su vida, alertando al lector de los momentos buenos, regulares y malos en la vida del actor.
