Misterios sin resolver ha vuelto a las andadas en Netflix, donde los espectadores pueden disfrutar de un remake que busca repetir la enigmática y misteriosa fórmula del programa original. Sin embargo, en esta ocasión encontraremos algunos cambios en los temas que abordarán: las historias de personas desaparecidas quedarán aparcadas, mientras que tampoco encontraremos más historias de OVNIS, a excepción de El ovni de Berkshire que hemos podido disfrutar en esta primera tanda de episodios. El productor del programa, Terry Dunn Meurer, ha sido el encargado de explicar este nuevo enfoque.
Misterios sin resolver se adapta a los tiempos actuales
Según ha indicado el productor Terry Dunn Meurer, el remake de Misterios sin resolver no acogerá demasiadas historias sobrenaturales relacionadas con ovnis o platillos voladores. El motivo se explica si atendemos a que, hoy en día, cualquiera con un teléfono móvil puede hacer un vídeo de tales objetos. Además, asevera que este tipo de pruebas son más sencillas que nunca de refutar. Por lo que, en resumidas cuentas, el misterio está resuelto de antemano.
"No tenemos tantas historias de 'amores perdidos', porque la gente puede encontrar a estas personas ahora en páginas como Ancestry.com, 23andMe e Internet en general", expresaba Meurer en una entrevista concedida a USA Today. "No tenemos tampoco tantas historias de ovnis porque, con los teléfonos móviles, imaginas que si alguien viera un ovni mucha gente lo estaría grabando también, no sólo una persona".
A excepción del episodio El ovni de Berkshire, que recoge los testimonios de diferentes personas que compartieron una extraña experiencia, la mayoría de los capítulos se centran o bien en misteriosas muertes o en desapariciones. Sin embargo, los fans han estado señalando que echan de menos los casos antiguos del programa que data del año 1987, y que ponía la lupa en hechos sobrenaturales.
Otro elemento importante que los fans del programa original echan de menos es la presencia de un presentador: el fallecido Robert Stack fue el encargado de narrar los episodios en los años 80, pero el equipo de producción ha decidido prescindir esta vez de esta figura. "Todo el mundo habla de cómo escuchan esa música, de los episodios originales, y cómo les provoca escalofríos", dice Meurer. "Y luego tuvimos que tomar una decisión difícil: ¿Deberíamos tener un presentador? Decidimos que sería imposible llenar los zapatos de Bob [Stack]".
Los seis primeros episodios de Misterios sin resolver están ya disponibles en Netflix.
