Peter Jackson es el director responsable de la aclamada adaptación cinematográfica de El Señor de los Anillos y El Hobbit, así como también dirigió la película de King Kong de 2005. Sin embargo, tras el fracaso en taquilla del último proyecto donde ha estado involucrado, Mortal Engines, parece que Jackson quiere volver a sus raíces.
"Sería muy feliz volviendo a ser repugnante si aparece el proyecto adecuado", compartió Jackson en una entrevista con The Hollywood Reporter. "Sería interesante ver cuán desagradables podemos ser Fran [Walsh, su colaborador] y yo, en nuestra edad más avanzada en comparación con nuestros años de juventud. Hemos aprendido algunas cosas desde entonces. Sabemos un poco más sobre el mundo. ¡Así que nuestros niveles de asco podrían alcanzar lugares completamente nuevos!"
Las primeras películas de Jackson, como Braindead, Bad Taste y Meet the Feebles fueron producciones centradas en presentar todo tipo de situaciones desagradables. Debido a que eran películas más bien de corte independiente, las producciones podían incorporar escenas realmente violentas sin tener que preocuparse de lo que pudieran decir los altos ejecutivos.
"Nuestra única filosofía era que íbamos a ser tan repugnantes como pudiéramos", admitió. "Y no teníamos ningún tipo de estudio en el set porque, en realidad no había ningún guion para seguir: lo estábamos escribiendo a medida que avanzábamos".
Estaremos atentos al anuncio del (repugnante) nuevo proyecto de Peter Jackson, si el director al final consigue encontrar la forma de trabajar según su vieja usanza.
