X
Juegos
Foro
Plataformas
Género/s: MMORPG
Fecha de lanzamiento:
PC:
FICHA TÉCNICA
Desarrollo: Destination Games
Producción: NCSoft
Distribución: Friendware
Precio: 44,95 €
Formato: PC DVD
Textos: Inglés
Voces: Inglés
Online: Sí
ANÁLISIS

Avance Tabula Rasa

Sobrevive a una guerra a gran escala en este prometedor juego de rol masivo online desarrollado por el Richard Garriot, creador de la serie Ultima.
Versión PC.

Ultima Online y EverQuest fueron los dos grandes títulos que inauguraron la fiebre por los juegos de rol masivos online que a día de hoy se han convertido en todo un fenómeno de masas, sobre todo gracias a éxitos como el de Blizzard con su World of Warcraft. Sin embargo, para Richard Garriott, padre de la serie Ultima y el citado Ultima Online, este género se encuentra estancado desde hace años ya que las compañías desarrolladores prácticamente no han variado ninguna de las bases jugables establecidas por los ya citados clásicos, creando además títulos en los que los usuarios prácticamente sólo se preocupan de subir niveles y tener las mejores estadísticas.

Con la intención de cambiar esta visión del género y ofrecer una experiencia jugable mucho más divertida y variada, Garriott y el equipo Destination Games se encuentran ultimando el desarrollo del prometedor Tabula Rasa para PC, el juego de acción y rol online que preparan y del que hemos tenido la oportunidad de probar una versión ya avanzada del mismo que deja entrever las novedades que introducirá en este popular género.

La intensidad de la guerra

Tabula Rasa nos sitúa en un universo futuro que se encuentra sumido en una terrible guerra entre una mortífera especie alienígena, los Thrax, y el resto de culturas extraterrestres, incluyendo a los humanos, que deberán unir sus fuerzas para hacer frente a esta devastadora amenaza. Nosotros tomaremos el control de un recluta humano perteneciente a esta resistencia, lo que ya desde un principio nos obligará a combatir sin tregua contra este terrible enemigo. Y es que en este nuevo trabajo de Richard Garriott nos encontraremos con un prometedor juego de acción en tercera persona que combinará a la perfección los clásicos elementos del género rol con la base del juego online como sustento a la hora de mostrar apasionantes batallas contra el inmenso ejército de los Thrax.

Como siempre, antes de entrar en el juego deberemos crear a nuestro avatar que podremos diseñar con una buena variable de rostros y vestimentas, aunque en este sentido se podrían presentar más modelos para que no haya una proliferación de clones al principio de la aventura. Aún así, pronto comenzaremos a encontrar una enorme cantidad de objetos que modificarán nuestro aspecto de forma considerable, y que evitarán que se produzca esta misma situación al presentarnos un variado grupo de combatientes con distintos tipos de ropas que no solo variarán en sus tonalidades.

También cabe resaltar que en este proceso no escogeremos ni tipos de personaje ni repartiremos puntos de habilidad entre una gran variedad de parámetros configurables, puesto que todo el mundo comenzará la aventura en Tabula Rasa encarnando a un recluta novato. Con este avatar deberemos superar un intenso tutorial en el que se nos explicarán los fundamentos básicos del juego, centrándose sobre todo en el sistema de control, que será realmente intuitivo por mantener el control clásico de los juegos de acción en tercera persona, y sobre todo por mantener la pantalla limpia de menús y demás elementos característicos en este tipo de juegos, haciendo que la experiencia de juego sea de lo más sencilla e intuitiva.

De este modo, como decimos, moveremos a nuestro avatar con el teclado mientras que controlamos el punto de mira de nuestras armas con el ratón. Cada vez que veamos a un enemigo, deberemos apuntar rápidamente hacia ellos y comenzar a disparar con nuestra arma principal usando el botón izquierdo del ratón, o usar habilidades secundarias, de las que hablaremos a continuación, con el botón derecho. En este sentido, el sistema de apuntado resulta de lo más divertido, sobre todo porque por fin nos sentiremos dentro de las batallas al jugar un papel más intenso que en otros títulos del género. Como siempre, cada vez que usemos uno de nuestros ataques le restaremos salud al enemigo, o no, siempre dependiendo de las estadísticas de nuestras armas y personaje, manteniéndose de este modo los clásicos elementos del género rol.

Sin embargo, en esta creación de Destination Games también deberemos apuntar a los enemigos, pudiendo fijar los objetivos, para poder atacarles, lo que lógicamente nos obligará a estar moviéndonos constantemente buscando nuestros objetivos para hacerles el mayor daño posible, y evitar que ellos nos lo hagan a nosotros usando los elementos del entorno a modo de cobertura. Así pues, si nos encontramos en una trinchera y nos agachamos, acción que resultará fundamental en el transcurso de la aventura, logramos que el índice de daño que nos infrinjan los enemigos sea menor que si nos dispararan o golpearan estando al raso.

En este sentido, como explicábamos, la interfaz resulta tremendamente clara, presentándosenos en pantalla el nivel de salud y escudo de nuestro héroe, y el nivel de energía a gastar en las habilidades especiales del juego. Por otro lado, en la pantalla inferior tendremos un pequeño inventario en el que colocar las armas principales que usaremos con el botón izquierdo del ratón, que seleccionaremos rápidamente con el teclado numérico; y las habilidades especiales situadas en la parte derecha, que como decíamos usaremos con el botón correspondiente del ratón. El minimapa y la barra de experiencia serán los otros dos elementos visibles en pantalla, aunque podremos ir abriendo el resto de menús con las siempre útiles teclas de acceso rápido, lo que nos permitirá acceder al inventario de nuestro héroe, a un mapa general de la región o el planeta, e incluso a los menús de habilidad y estadísticas de nuestro personaje, También podemos acceder a todas estas opciones manteniendo pulsada la tecla Control; lo que desplegará un menú radial sobre nuestro avatar en el que tendremos todas las opciones disponibles a las que accederemos pinchando sobre las mismas con el ratón.

En lo referente al citado menú de habilidades, cada vez que subamos de nivel (obtendremos experiencia matando enemigos o cumpliendo las misiones que nos encomienden) se nos otorgarán unos puntos de atributo que deberemos gastar en mejorar tres aspectos físicos de nuestro protagonista (mente, cuerpo y espíritu) que modificarán lógicamente las capacidades del héroe en lo referente al empleo de diversas armas, la contundencia con la que realizarán ataques, o la capacidad de acumular un mayor nivel de energía; y los puntos destinados a gastar en las citadas habilidades especiales, que en este caso se nos presentarán de una forma novedosa. Haciendo honor a su nombre latino, en Tabula Rasa deberemos buscar por todo el mundo una serie de Logos, que son mensajes grabados de la especie alienígena Eloh encargada de expandir sus avanzados conocimientos tecnológicos por todo el universo, y que serán las tablas que nos permitan adquirir los conocimientos necesarios para desbloquear las diversas habilidades especiales que nuestro protagonista podrá usar si gasta en ellas un número determinado de estos puntos de habilidad.

Este hecho, lógicamente, nos obligará a explorar concienzudamente todos los entornos para encontrar todos estos altares con los Logos y de este modo tener una mayor libertad a la hora de desarrollar a nuestro avatar. Además, como es habitual en el género, no todos los jugadores tiene por qué optar por el mismo camino, ya que en esta obra de Destination Games podremos ser un soldado que se especializará en diversos tipos de combate, o centrarnos en las clases trabajadores, aunque nunca dejaremos de lado la guerra. Además, indistintamente, todos los jugadores podrán crear y mejorar diversos ítems o armas, aunque en este caso, dependiendo de la calidad del objeto en cuestión y de nuestro propio nivel de habilidad, los trabajos de creación y mejora variarán; sobre todo en este último caso, ya que un fallo en este proceso puede hacernos perder el objeto por completo, resultando muy arriesgado el intentar mejorar un arma que ya de por sí resulta mortífera, por ejemplo.

Por otro lado, el equipo de Richard Garriott ha implementado un interesante sistema que permitirá a los usuarios clonar en cualquier momento de la partida a su personaje, lo que a grandes rasgos significa que podremos variar nuestro estilo de juego en cualquier momento de la partida desarrollando al personaje/s clonado de otra forma distinta sin necesidad de tener que repetir los pasos iniciales de la aventura. En este sentido, en el juego nos encontramos con un sistema de evolución de personajes que se nos presentará mediante un sencillo esquema con dos grandes ramas como ejes centrales. Como decíamos, todos los usuarios comenzarán como simples reclutas, pero tras llegar al nivel cinco de habilidad deberemos escoger entre la rama de combatientes o los especialistas, encontrándonos ya dentro de estos dos grupos distintas subramas que nos permitirán especializarnos en las diferentes facetas de juego que Tabula Rasa ofrece. Por supuesto, dependiendo del camino escogido nuestra forma de jugar variará, como también deberemos comenzar a buscar objetos destinados a nuestro estilo de juego (habrá armas u objetos defensivos exclusivos de cada tipo de personaje).

Con todo esto, nos moveremos por inmensos parajes en los que habrá decenas de enemigos atacando sin tregua nuestras posiciones, lo que será otra de las grandes diferencias con respecto al resto de títulos del género. Como siempre, en Tabula Rasa habrá diversas zonas en las que varios personajes nos encomendarán misiones que deberemos cumplir a cambio de experiencia, dinero, y diversos objetos. Este tipo de objetivos serán bastante clásicos, aunque en Tabula Rasa se ha implementado un sistema de misiones que variarán en tiempo real dependiendo de nuestros actos, y que obligarán al jugador tomar una serie de difíciles decisiones que modificarán de forma considerable el desenlace de algunas de las misiones, como el tener que decidir si debe morir un soldado que más adelante puede resultar de vital ayuda para eliminar a los enemigos, o que muera un inocente civil con familia que lo único que va a hacer en la misión es seguirnos mientras reza para no morir.

Del mismo modo, a veces deberemos decidir si ayudamos a un grupo de aliados sabiendo que van a realizar misiones de dudosa legalidad, o dejarles morir por no creer conveniente el intervenir en sus acciones. A estas misiones, como decíamos, se le unen también intensos combates contra los Thrax que nos obligarán a avanzar por la aventura en la mayoría de casos junto a otros usuarios. Y es que en este sentido, la cantidad de enemigos que llegarán a aparecer ante nosotros resulta abrumadora, creando además la sensación de estar verdaderamente en un inmenso campo de batalla.

En cada región del juego nos encontraremos con una serie de puntos de control o bases de operaciones que podrán caer en manos del enemigo en cualquier momento siempre que la resistencia no pueda soportar las incesantes acometidas. Lo genial de Tabula Rasa es que nosotros jugaremos papeles importantes en este tipo de actos que no estarán prefijados por las misiones que nos encomienden los diversos habitantes de este universo, sino que se desarrollarán sin descanso a lo largo de todo el día. Por lo tanto, en cualquier momento podemos encaminarnos con otros jugadores a una de las regiones enemigas y conquistarles su base de operaciones como en los clásicos "Capturar la bandera", o luchar sin tregua contra los Thrax para evitar que nos arrebaten una de nuestras bases, lo que significaría que sus ataques se intensificarán notablemente en esa región. Además, por la mayoría de zonas del planeta en el que hemos jugado había batallas en las que intervenían naves y decenas de enemigos que se enfrentaban a las defensas establecidas en torno a grandes trincheras de la resistencia, lo que como decimos nos sumerge de lleno en este conflicto de grandes proporciones.

Otro aspecto que cobrará un gran protagonismo en el juego son los combates entre jugadores que estarán presentes en Tabula Rasa en forma de duelos individuales, por grupos, o batallas entre clanes, donde deberemos poner en práctica todos los conocimientos adquiridos en la guerra contra los Thrax. En este sentido, estos combates siempre deberán ser consensuados, es decir, que ningún usuario podrá atacar a otro jugador sin que éste haya aceptado el duelo.

A nivel técnico, el juego muestra un notable acabado en cuanto a los gráficos, ofreciendo unos entornos de grandes dimensiones plagados de detalles en los que como explicábamos constantemente veremos a decenas y decenas de personajes y criaturas luchar sin descanso. Este aspecto, unido al gran trabajo llevado a nivel artístico, hacen de esta creación de Destination Games un título agradable de ver y sobre todo sorprendente, pese a que en imágenes pueda parecer un juego más discreto. En este caso, destacan efectos de partículas como las incesantes columnas de humo que se elevarán desde los frentes de batalla, o los efectos devastadores que tendrán nuestras armas en los enemigos: si les disparamos con un arma o habilidad especial cuando les queda poca vida disfrutaremos de secuencias que mostrarán sus dolorosas muertes (que se queden un rato de pie temblando y echando chispas por la descarga eléctrica recibida, que estalle un núcleo de energía en su interior, etc.).

A nivel sonoro también resulta un título bastante interesante, con melodías muy cañeras que acompañarán a la perfección a la acción. Aún así, lógicamente, en estos dos aspectos aún quedan elementos por pulir, como las animaciones de nuestro avatar al nadar, o el propio sonido del agua cada vez que nos zambullimos. También hay otro tipo de errores bastante molestos como el quedarnos atascados en diversos elementos del entorno, o hundirnos directamente en el suelo, que esperamos se solucionen en la versión final. Por otro lado, dada la importancia que se le está dando a la historia y el contexto de todas las misiones, está por ver si NCSoft decide finalmente traducir al castellano el juego, lo que sin duda sería una gran noticia para un gran número de aficionados al género.

En definitiva, Tabula Rasa se trata de un título de acción y rol realmente prometedor. Lo visto en estas primeras horas de juego nos ha parecido realmente sorprendente, no por que sea una revolución en el género, no lo es, sino por lo divertido que resulta y lo apasionantes que serán las batallas que podremos vivir junto a otros jugadores. El sistema de desarrollo de personajes, no tan centrado en las estadísticas sino en las habilidades, y la gran importancia que se le está dando a la exploración son otros aspectos realmente llamativos, y que sin duda nos permitirán diseñar a nuestro personaje de la forma que mejor nos guste sin excesivas complicaciones, pero siempre con una gran cantidad de alternativas.

Tal vez la posibilidad de clonar a los personajes sea una de las opciones más polémicas del juego para gran parte de los aficionados al género, aunque en verdad es un sistema que facilita enormemente la creación de nuevos personajes a partir de una base ya decidida por el propio jugador (mejorar varias facetas en la rama recluta y a partir de ahí probar distintas combinaciones hasta dar con el personaje perfecto). Tampoco podemos cerrar estas impresiones sin mencionar el magnífico trabajo llevado a cabo en lo referente a la interfaz de usuario y el sistema de control, así como la notable inteligencia artificial con la que se ha dotado a los enemigos, y que hará que por primera vez en un juego de este tipo sintamos de verdad estar combatiendo junto a otros usuarios en una devastadora guerra. Sin ninguna duda, estamos ante uno de los juegos más prometedores del año.