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Fecha de lanzamiento:
PC:
PS4:
FICHA TÉCNICA
Desarrollo: Robot Entertainment
Producción: Robot Entertainment
Distribución: Steam
Precio: Free to play
Jugadores: 1
Formato: Descarga
Textos: Español
Voces: Inglés
Online: Sí
ANÁLISIS

Impresiones Orcs Must Die! Unchained

Robot Entertainment reinventa su saga estrella para convertirla en una prometedora combinación de MOBA y Tower Defense.
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Actualizado: 21:31 17/8/2020
Versiones PC, PS4. También disponible en PlayStation 4.

En el 2011 Robot Entertainment nos sorprendió con Orcs Must Die!, un divertido y frenético Tower Defense en el que teníamos que defender diversas fortalezas de ingentes cantidades de orcos haciendo uso de nuestras habilidades y de un enorme número de trampas. Gracias a lo rápida que resultaba su jugabilidad, a su desenfadado sentido del humor, a lo bien implementados que estaban sus controles y a su sistema de puntuación (el cual nos invitaba a conseguir combos a la hora de picar carne de orco), el juego consiguió engancharnos bastante.

Sin embargo, se quedaba algo corto de contenido y se echaba en falta un modo multijugador para poder compartir estas carnicerías con nuestros amigos, carencias que fueron subsanadas un año más tarde con Orcs Must Die! 2, una secuela que no os podéis perder a poco que os guste el género.

Esto nos trae a día de hoy, a una época en la que los juegos de moda en PC son los MOBAs gratuitos y donde todo el mundo intenta hacerse con un hueco en dicho mercado, motivo por el cual los chicos de Robot Entertainment parecen haberse animado a probar suerte también, transformando esta divertida saga en un juego multijugador gratuito de carácter competitivo en el que dos equipos de cinco personas tendrán que enfrentarse en encarnizadas batallas.

Si hay algo que nos ha llamado la atención sobre él tras probar su alfa, es lo bien que se ha mezclado la jugabilidad habitual de la serie con el estilo de juego característico de los MOBAs. Así pues, tal y como marcan los cánones del género, nuestro objetivo será acabar con la base del equipo rival avanzando por un mapa, que en vez de tener tres calles principales solo tiene dos.

Lo interesante es que esto no lo haremos pegándole a la propia base, a un nexo o a un comandante, sino consiguiendo que nuestros orcos lleguen a ella y atraviesen un portal, una tarea que como es de suponer, es mucho más fácil de decir que de hacer. Por el camino nos encontraremos con diversos jefes, puertas cerradas, trampas de todo tipo y como no podía ser de otra forma, con los miembros del equipo rival.

Así pues, lo primero que tendremos que hacer será escoger a uno de los personajes disponibles o que hayamos conseguido. Cada uno de ellos tiene un disparo principal, otro secundario, dos habilidades y puede llevar equipadas un número limitado de trampas. Como era de esperar, cada uno está destinado a cumplir un rol determinado dentro del equipo y saber sacarles provecho mientras nos organizamos junto a nuestros compañeros será clave para alzarnos con la victoria.

Cabe destacar que los controles son prácticamente los mismos que los vistos en Orcs Must Die! 2, por lo que la cámara es en tercera persona y la acción en tiempo real, lo que nos obligará a tener que apuntar todas nuestras habilidades y golpes a la vez que esquivamos los ataques de los enemigos. De hecho, la forma de poner trampas también es la misma, haciendo que su colocación sea muy fácil e intuitiva, ya que solo tendremos que apuntar al lugar donde queramos colocarla.

En cuanto al desarrollo de la partida, esta se va desarrollando por oleadas de orcos, como en cualquier juego otro juego de esta saga, con la salvedad de que a la vez que nos defendemos en cada una de ellas también tenemos que presionar. De esta forma, con cada oleada se irán debilitando las defensas de cada equipo y los jugadores irán obteniendo puntos de experiencia a base de realizar combos matando enemigos. Estos nos servirán para mejorar los monstruos que mandemos a combatir, por lo que las oleadas se irán intensificando y haciéndose mucho más difíciles de detener. Además, con esto también conseguiremos dinero que podremos invertir en abrir una nueva línea de ataque y evidentemente, en colocar más trampas.

Todo esto da como resultado unas partidas que nos han parecido muy divertidas y con un punto de originalidad que las diferencia de lo visto en otros juegos, aunque tenemos que reconocer que hacerse a ellas puede costarnos un poco, ya que el caos que se monta en cada oleada, el pobre tutorial del que hace gala y lo particular de su propuesta conseguirán que no nos enteremos prácticamente de nada al principio.

Eso sí, se nota que el juego todavía está en una fase de desarrollo muy temprana, con un launcher que deja muchísimo que desear, una interfaz mejorable y unas opciones de comunicación de grupo irrisorias. Esto último es algo especialmente grave, ya que muchas veces no las veremos y desearemos para comunicarnos con nuestros compañeros y organizar estrategias, por lo que esperemos que sea algo que se mejore sin falta en un futuro.

En cuanto a la progresión del jugador, tras cada partida iremos recibiendo experiencia y puntos que podremos invertir en comprar nuevas trampas, personajes y criaturas, lo que nos permitirá crear nuestras propias builds. Decir que en cada partida solo podremos escoger un "mazo" (todas estas cosas están representadas con formas de cartas) y esta elección tendrá que hacerse antes de entrar en batalla.

Gráficamente nos encontramos con un título muy agradable a la vista y tremendamente similar a lo visto en las entregas anteriores, por lo que volvemos a encontrarnos con un apartado artístico muy cartoon y desenfadado, así como con unos buenos diseños y modelados de personajes. Eso sí, hemos notado que las animaciones todavía necesitan algo de trabajo, ya que resultan un tanto toscas. Esto también se puede decir de las texturas, las cuales no tienen demasiada definición, aunque considerando que actualmente el programa no permite configurar sus opciones de vídeo, es de esperar que esto mejore.

En lo que respecta al sonido, se reutilizan varias melodías de la saga, aunque la banda sonora acaba haciéndose bastante repetitiva a pocas partidas que juguemos. Esto mismo se aplica a los efectos de sonido, ya que vuelven a reutilizarse todos los FX que ya nos habituamos a escuchar hace un par de años. El doblaje solo hemos podido escucharlo en inglés (el cual tiene una calidad muy buena), por lo que no sabemos si acabará doblándose también a nuestro idioma, al igual que ocurrió con los dos primeros títulos de la serie, los cuales hacían gala de unas voces e interpretaciones muy buenas.

Orcs Must Die! Unchained nos ha dejado un buen sabor tras este primer contacto, ya que su combinación de MOBA con Tower Defense funciona sorprendentemente bien y le da un toque muy único que puede acabar por convertirse en su gran baza para hacerse un hueco en este feroz y competido mercado, por lo que si sois aficionados al género os recomendamos que no le perdáis la pista, ya que si evoluciona favorablemente puede acabar por convertirse en toda una sorpresa.

Redactor