La conclusión de Juego de tronos en 2019 se convirtió en uno de los momentos más controvertidos de la historia de la televisión. A pesar de ser una de las series más exitosas a nivel global, su última temporada recibió una respuesta bastante negativa en comparación al resto de temporadas, y muchos fans se mostraron decepcionados por el desenlace apresurado de la historia. Kit Harington, quien interpretó a Jon Nieve, ha reflexionado sobre este desenlace, admitiendo que el equipo de producción estaba agotado y que, aunque se cometieron errores narrativos, la fatiga generalizada hizo que continuar con la serie no fuera una opción viable. Esta admisión ha sido una de las pocas declaraciones sinceras del actor sobre el final de la serie, reconociendo los desafíos que enfrentaron durante la producción.
Harington ha sido bastante honesto acerca de la dificultad que enfrentaron tanto él como el resto del equipo durante la última temporada de la serie. En una entrevista reciente con GQ, mencionó que al observar fotos de sí mismo en esa etapa, se veía agotado y sin energía para continuar con otra temporada. Esta fatiga colectiva, según el actor, influyó en la calidad de la narrativa, resultando en decisiones que no fueron del todo acertadas. A pesar de reconocer que el final pudo haber sido mejor, también indicó que no veía otra alternativa dado el estado en que se encontraban todos los involucrados.
"Creo que si hubo algún fallo en el final de Juego de Tronos, es que estábamos todos tan cansados que no podíamos seguir más tiempo. Entiendo que algunas personas pensaron que fue apresurado y quizás estoy de acuerdo con ellos. Pero no estoy seguro de que hubiera otra alternativa. Miro fotos mías en esa temporada final y parezco exhausto. Parezco agotado. No tenía otra temporada por delante", explicó durante la entrevista.
"Todos tienen derecho a su opinión. Creo que se cometieron errores, en cuanto a la historia, tal vez hacia el final. Creo que hubo algunas decisiones interesantes que no funcionaron del todo", añadió.
Sobre el final de la serie había demasiada expectación
La reacción negativa de los fans al final de la serie no fue completamente inesperada, dado que las expectativas eran extremadamente altas. Juego de tronos había capturado la atención global y generado un seguimiento masivo, por lo que cualquier fallo en la conclusión sería amplificado. Harington menciona que, aunque las críticas son válidas, también considera que el impacto que tuvo la serie es una prueba de su importancia cultural. Para él, el hecho de que tantas personas se sintieran tan fuertemente sobre el final es un testimonio del poder de la serie, incluso si el final no cumplió con todas las expectativas.
A lo largo de los años, el final de esta ficción basada en Canción de hielo y fuego de George R.R. Martin, ha sido analizado y debatido extensamente, pero Harington ha tratado de mantenerse positivo respecto a su tiempo en la serie. Aunque inicialmente estaba decepcionado con algunas decisiones narrativas que afectaron a su personaje, Jon Nieve, el actor ha aprendido a apreciar lo que lograron en conjunto. En entrevistas anteriores, Harington ha expresado que, aunque fue difícil aceptar algunas críticas, también se siente orgulloso de haber sido parte de una serie tan influyente y de haber contribuido a una historia que resonó en todo el mundo.