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Jeffrey Dean Morgan, de The Walking Dead, casi abandona Hollywood por culpa de un pegajoso personaje de Star Trek

Jeffrey Dean Morgan, quien da vida a Negan en The Walking Dead, estuvo a punto de abandonar el mundo del cine y la interpretación por culpa de un pegajoso personaje de Star Trek.

Jeffrey Dean Morgan, uno de los actores más queridos de The Walking Dead que está a punto de incorporarse a la exitosa The Boys mediante su temporada 4, estuvo a puertas de abandonar el mundo de la actuación por culpa de Star Trek y un pegajoso personaje. Aunque muy pocos lo saben, el aplaudido Negan del universo televisivo de AMC y Robert Kirkman participó en Star Trek: Enterprise a principios de los 2000 como Damron, una raza alienígena llamada Xindi caracteriza, dentro de la industria, por ser una de las más complicadas de representar por la increíble cantidad de maquillaje que se requería, y eso es justo lo que provocó que Morgan se plantease marcharse de Hollywood.

Jeffrey Dean Morgan no soportaba el maquillaje de su personaje en Star Trek y por poco abandona Hollywood

Mucho antes de incorporarse a The Walking Dead y saltar a la fama como uno de los villanos más emblemáticos de la televisión, el también cabeza de reparto de 'Watchmen' se abrió camino en la industria colándose en 'Star Trek: Enterprise', lo que no era mala idea teniendo en cuenta que la aventura de ciencia ficción creada por Gene Roddenberry es una de las obras más reputadas de la industria. Sin embargo, las largas sesiones de maquillaje y lo dura que fue la experiencia para encarnar a Damron hicieron que Negan se planteara toda su carrera, y ya es decir teniendo en cuenta que la serie de zombis de AMC los actores se pasan el día empapados en sangre falsa y vísceras de no-muertos.

"Me hizo querer dejar de actuar".

Así lo confesaba el actor en una entrevista para EW: "Tenía que pagar mis facturas. Sabía que iba a hacer de un tipo que decía algunas cosas. Luego recibí una llamada diciendo que necesitaba llevar una prótesis. Recuerdo que me goteaba algo pegajoso en mi cara y tenía pajitas que salían de mi nariz.

No podía ni comer y sentía claustrofobia. Me iba a mi casa llorando. Fue el trabajo que me hizo querer dejar de actuar". Con todo, parece que Morgan tomó la decisión de quedarse y fue lo mejor que pudo regalar a la televisión y los amantes del terror.