A las puertas del estreno de la temporada final de Stranger Things, los hermanos Duffer han decidido hacerle un favor a quienes no tienen tiempo (ni energía) para volverse a tragar las cuatro temporadas completas. En lugar de un maratón imposible antes del Volumen 1, que llega a Netflix el 26 de noviembre de 2025, han señalado solo cuatro capítulos que funcionan como atajo narrativo: una especie de "rail rápido" hacia la batalla definitiva contra Vecna en Hawkins.
Los dos primeros elegidos nos devuelven a la segunda temporada, cuando el Azotamentes pasa de ser una sombra en el cielo a una amenaza íntima que se instala dentro de Will Byers. Los Duffer recomiendan el 2x04 y el 2x06, episodios en los que el chico se convierte, literalmente, en los ojos y oídos de la criatura en el mundo real. No son solo capítulos de posesión y exorcismo suburbano: es ahí donde la serie empieza a tratar al Mundo del Revés como un sistema coherente, con reglas propias, jerarquías y una conexión mucho más profunda con Hawkins de lo que parecía en la primera temporada.
Del Azotamentes al "elegido"
Revisitar esos capítulos hoy permite ver con otra luz la evolución de Will, convertido en receptor privilegiado del horror, pero también la forma en que la propia serie cambia de escala. Lo que en la primera temporada era una historia "pequeña" de desapariciones y laboratorio clandestino se reescribe, en la segunda, como un conflicto mucho mayor, casi mitológico. Las escenas en las que el Azotamentes usa a Will como espía y los intentos del grupo por comunicarse con él desde dentro anticipan muchos de los temas que la quinta temporada promete llevar al extremo: la conexión mental con el monstruo, el coste emocional de ser "el elegido" y la idea de que Hawkins es solo el epicentro visible de algo mucho más grande.
Los otros dos capítulos clave pertenecen a la cuarta temporada, el momento en el que la serie decide enseñar, por fin, qué hay detrás del monstruo. El 4x07 y el 4x09 funcionan casi como una película partida en dos: repasarlos es volver a la masacre del laboratorio de Hawkins, al pasado de Henry Creel y a la transformación de ese niño con poderes psíquicos en Vecna, el villano que ha reescrito la historia del Mundo del Revés desde dentro. Ahí se atan los hilos entre Once, los experimentos del Dr. Brenner y la arquitectura misma de esa dimensión oscura que llevaba años devorando a la gente del pueblo.
Una recta final milimetrada
También son episodios claves para entender por qué la temporada final va a sentirse como un cierre de ciclo. La revelación de que el Mundo del Revés quedó "congelado" en una fecha concreta, el mapa mental que Vecna traza sobre Hawkins y el cliffhanger final con las grietas abriéndose sobre el pueblo preparan el terreno para una conclusión que, según han adelantado los Duffer, va a recuperar directamente esas imágenes. Con Volumen 1 el 26 de noviembre, Volumen 2 el 25 de diciembre y un episodio final programado para el 31 de diciembre de 2025, la estructura de estrenos refuerza la idea de una recta final muy planificada, que se apoya en todo lo sembrado en esas temporadas intermedias.
Para quien llegue justo de tiempo, este mini-maratón de cuatro episodios es, en la práctica, un resumen emocional y mitológico de Stranger Things: el trauma de Will, la maduración del grupo, el nacimiento del Azotamentes como entidad "inteligente" y la caída de Henry/Vecna como antagonista central. Verlos ahora, sabiendo hacia dónde se dirige la historia, permite detectar guiños, frases y planos que en su día pasaron desapercibidos y que la temporada 5 va a reciclar o contestar.