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'No tiene sentido': El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ataca a Netflix y exige que 'Emily en París' regrese a París

Emmanuel Macron está decidido a luchar porque la serie continúe desarrollándose en su ciudad.

El mandatario francés, Emmanuel Macron, no está nada contento con el final de la cuarta temporada de Emily en París. En una entrevista reciente para Variety, ha manifestado su insatisfacción con el potencial traslado de la acción de la serie, y su protagonista, a Roma en la quinta temporada de la ficción, que Netflix estrenará en 2026. De acuerdo con el reglamento al que el presidente alude, el núcleo de la serie y su nombre están vinculados a la ciudad de París, y una alteración del contexto no produciría el mismo efecto cultural y visual. "Vamos a luchar fuerte para que regrese", declaró, agregando que la producción perdería parte de su encanto si se muda a la capital de Italia.

Emily ha hecho casi más por el turismo que la Torre Eiffel

Este comentario resalta la relevancia de la producción como un estandarte mundial para la cultura francesa. Por no mencionar la cantidad de turismo que ha atraído a la ciudad de las luz. La serie, que ha recibido críticas en ciertos sectores por mantener estereotipos, también ha sido valorada por su habilidad para captar la atención de millones de espectadores a una interpretación romántica de la vida en París.

Macron manifestó su respaldo a esta perspectiva, subrayando la importancia de la serie como un medio de promoción para la nación, y señaló que incluso su esposa, Brigitte Macron, tuvo un rol destacado en la cuarta temporada.

La fama de Emily en París ha superado barreras, con seguidores que monitorean cada acción de la personaje principal, encarnada por Lily Collins. La noticia de que Emily podría trasladarse a Roma ha provocado una intensa reacción entre los seguidores, quienes discuten si la serie permanecerá constante sin el escenario parisino.

La influencia de la serie no se restringe a la promoción del turismo. De acuerdo con Macron, la serie ha funcionado como un portal hacia la moda, el diseño y el modo de vida francés. Pese a que la producción ha recibido críticas por no reflejar todos los aspectos de la vida en la ciudad, el presidente francés sostiene que su mensaje positivo es lo que más sobresale. En realidad, apunta a que la serie representa un "excelente negocio" para la reputación de Francia a escala global.