Alex Proyas hizo lo imposible al adaptar El Cuervo en 1994. La película, que fue su debut en el cine, marcaría su camino en la industria y labraría una leyenda, a menudo oscura y trágica, sobre la creación de un filme que marcaría para siempre el Séptimo Arte y el género d los adaptaciones de cómics en la gran pantalla. Proyas, que luego firmaría la excelente Dark City, rubricó el legado del personaje, encarnado por Brandon Lee, hijo de la leyenda Bruce Lee, que fallecería durante el rodaje de la cinta por un trágico accidente con una pistola de fogueo. Ahora, en 2024, el mítico Eric Draven regresará a los cines en 2024 con Bill Skarsgård, buscando que la maldición de esta saga se rompa para siempre y prometiendo, en palabras de su director, dejar a Marvel y sus superhéroes atrás.
El Cuervo regresará al cine en 2024 con una ambiciosa película que promete romper la maldición sobre la saga y el personaje
El Cuervo ha sufrido muchos reveses en sus reinicios, secuelas e intentos que buscaban cambiar el aciago destino del personaje en la gran pantalla. Hablamos de un filme que ha tardado más de dos décadas en salir adelante, un récord incluso para Hollywood, que intentó llevarla a buen puerto en 2008 y que ha pasado por varias manos, actores y ejemplos de reinterpretación -con Jason Momoa saliendo por patas cuando no lo vio claro-, sin que ninguno fuese aprobado o lo demasiado fuerte y sólido como para materializarse en una película. Se habló de Stephen Norrington, Juan Carlos Fresnadillo, F. Javier Gutiérrez y Corin Hardy, y de actores como Momoa, Bradley Cooper, Luke Evans y Jack Huston. No hubo manera de encontrar la fórmula. Hasta ahora.
En estos momentos, con varias huelgas azotando Hollywood, se cumple el milagro. Habrá una nueva película de El Cuervo, y sí, no se trata de una mera promesa: está rodada y se encuentra en sus etapas finales. El filme se finalizó en septiembre del año pasado, y en estos momentos, está más que montada y lista para que se le encuentre un hueco en las pantallas. Y no es mentira ni un simple rumor. La película llegará en 2024, con Rupert Sanders, cineasta responsable de Ghost in the Shell - El alma de la máquina y Bill Skarsgård, el payaso de IT, dando vida al mítico personaje de Eric Draven, todo un hito de las viñetas, que emprendía en los tebeos una venganza, regresando de la muerte, para vengar la muerte de su esposa.
Tras a versión de Lee, que pasó a la historia con ese papel, y años después del estreno de la original, se estrenó la fallida El cuervo, ciudad de los Ángeles, con el actor suizo Vincent Pérez, un fracaso con sabor francés que enterró la licencia para siempre. Más tarde, Marc Dadascos protagonizó una serie de 22 episodios que no tuvo suerte. Y qué decir de las dos películas de principios de los 2000.
La nueva versión de El Cuervo es la película anti-Marvel: pretende revolucionar el género de los superhéroes
La nueva adaptación del cómic de James O'Barr es uno de los grandes estrenos de Lionsgate de cara al año que viene, y el productor Sam Pressman ha confirmado a Deadline que pretende revolucionar el género de los superhéroes y arrasar con Marvel. Y no lo tiene fácil. El Cuervo es una de las películas de culto más amadas por los aficionados al mundo del cómic, pero la obra se quedó marcada por un la muerte de Brandon Lee, el protagonista, perdió la vida en una secuencia después de ser tiroteado por Michael Massee, un actor secundario que empuñaba una Magnum 44 y que aseguró no tener constancia de que el arma en cuestión estaba cargada.
Con 50 millones de dólares en sus manos, una inversión moderada, el productor del filme lo tiene claro: es una película única que va a cambiarlo todo. "El Cuervo ha sido una parte muy importante e integral de nuestra empresa y estoy muy orgulloso de los progresos y el trabajo que se ha hecho. Creo que la gente va a flipar con la película. Nuestros socios quieren abordarlo de una forma muy 360, ya sean videojuegos, una serie de animación o un universo, pero tiene este legado cósmico que puede expandirse más allá de una historia singular", confirmaba el creativo. "Es una licencia única, no es una película de estudio, no es una película de Marvel - es una especie de película anti Marvel. Tengo grandes esperanzas en ella y me encanta lo que Molly Hassell ha hecho para llevarla a la cima, y Rupert Sanders es un visionario", concluía.