La solenopsis invicta, conocida mayormente como hormiga roja de fuego, ha sido detectada en Europa y eso quiere decir que su expansión a nuestro país podría realizarse en un abrir y cerrar de ojos. Este particular insecto es muy temido debido a su alta capacidad de expansión. Se trata de una de las especies más invasoras del planeta que puede llegar a causar graves estragos entre las especies nativas de cada territorio y, también, múltiples problemas en humanos. Procedente de Sudamérica, la hormiga roja de fuego carga con un veneno que es extremadamente doloroso en picaduras y que puede generar reacciones alérgicas que, en algunos casos, pueden provocar la muerte. Un estudio publicado en Current Biology confirma que ya han anidado en Europa, en el Mediterráneo, y eso nos pone en alerta.
Elena Angulo, investigadora en la Estación Biológica de Doñana (CSIC), aseguró que hay que tener extremo cuidado con esta particular criatura y que no hay que tomarse esto a la ligera: "La hormiga de fuego es una de las peores especies invasoras", decía. "Tiene una picadura muy fuerte, que puede causar reacciones alérgicas importantes en las personas e incluso producir la muerte. En los lugares donde está establecida como especie exótica invasora, como en China, Estados Unidos o Australia, tiene un alto impacto en la salud y en el bienestar, así como en sectores económicos como la agricultura. Su control en esos países supone un gasto de miles de millones de euros".
La hormiga roja de fuego puede llegar a ser mortal debido a su peligroso veneno y, de momento, se han detectado 88 nidos en Europa
Joaquín L. Reyes-López, profesor titular del área de Ecología de la Universidad de Córdoba en declaraciones a Science Media Centre, aseguró que esta hormiga en particular supone una amenaza para el orden mundial. La solenopsis invicta se extendió en el pasado a Estados Unidos y a China, y se espera que también haga lo mismo en Europa, territorio en el que se habría "colado" desde el puerto de Siracusa. "En las zonas favorables para su asentamiento, costas o lugares húmedos, puede ocasionar graves daños a los ecosistemas locales. Además, constituyen un grave problema de salud para los seres humanos debido a sus picaduras", informaba Reyes-López.
Gema Trigos Peral, investigadora en el departamento de insectos sociales y mirmecófilos del Museo e Instituto de Zoología de Varsovia (Polonia), afirmó que España tenía todas las papeletas para llegar a convertirse en el nuevo hogar de la solenopsis invicta debido a su clima: "España sería uno de los países más afectados", explicaba. "Existe un clima perfecto y una gran variedad de hábitats (aunque a estas hormigas les gustan mayormente las zonas modificadas por el ser humano, como las zonas urbanas y las agrícolas)". Con todo, este ser supone una amenaza para la agricultura y para la salud humana, y por supuesto también para la biodiversidad. Su picadura puede llegar a ser mortal y tiene una alta capacidad para reproducirse rápidamente.