El actor James Franco se enfrenta a dos demandas por supuesta explotación sexual, interpuestas por dos actrices que fueron alumnas de su ahora cerrada escuela de interpretación. Las demandantes, Sarah Tither-Kaplan y Toni Gaal, retratan también el "ambiente de acoso" que vivieron tanto fuera como dentro de las clases.
Las demandas han sido presentadas ante un tribunal de Los Angeles, y establece que los presuntos abusos habrían tenido lugar en Playhouse West Studio 4, la academia de interpretación de Franco que se inauguró en 2014 y cerró sus puertas en 2017.
Franco denunciado por acoso y explotación sexual
Tal y como recogen los documentos judiciales obtenidos por People (vía Entertainment Weekly), Tither-Kaplan y Gaal señalan que Franco y sus socios "fueron partícipes de un comportamiento generalmente inapropiado y sexual hacia las estudiantes". Al parecer, "sexualizaban su poder como profesores y empleadores al darles la oportunidad de desempeñar papeles en sus proyectos".
Esta situación desembocó en "un ambiente de acoso y explotación sexual tanto dentro como fuera de las clases". Además, también demandan a Franco por discriminación sexual y fraude, entre otras cuestiones.
Afirman, además, que las estudiantes fueron obligadas a participar en escenas sexuales explícitas "que superaron con creces los estándares de la industria". Piden también que se destruya cualquier grabación de vídeo de las escenas de sexo que tuvieron que grabar y han pedido que la demanda adopte el estatus de ser una acción de clase, para que otras presuntas víctimas también puedan sumarse.
Esta historia, sin embargo, viene de lejos: Los Angeles Times publicó en enero de 2018 el testimonio de Tither-Kaplan contra Franco, haciéndose eco también de las denuncias de otras cuatro mujeres.
"Siento que hubo un abuso de poder", declara Tither-Kaplan. "Hubo una cultura de explotación de mujeres que no son grandes estrellas".
De esta forma, Tither-Kaplan señala que Franco aprovechó su posición de poder al explotar a las mujeres con las que trabajaba con el pretexto de darles una oportunidad en la industria cinematográfica.
Qué ha dicho Franco al respecto
El abogado de Franco, Michael Plonsker, ha emitido a su vez una declaración negando las acusaciones en nombre del actor. "Esta no es la primera vez que se hacen estas afirmaciones, y ya fueron desacreditadas", afirma en un comunicado obtenido por People. "No hemos tenido la oportunidad de revisar en profundidad esta queja mal informada, ya que se ha filtrado a la prensa antes de que se presentara y nuestro cliente aún no ha sido atendido".
Además, agrega: "James no sólo se defenderá, sino que también buscará daños y prejuicios de los demandantes y sus abogados, por presentar una demanda con el fin de buscar publicidad". La compañía de producción del actor, Rabbit Bandini, y sus dos socios han sido nombrados como demandados en las denuncias de ambas actrices.
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