Están siendo unos días realmente movidos. Desde el arranque de los Juegos Olímpicos de París 2024, con una ceremonia de apertura un tanto polémica, han surgido algunas teorías de conspiración y rumores que vinculan el evento con el satanismo y la adoración a figuras que buscan ofender o parodiar la religión católicas. Pese a que muchos afirmaron que era todo una representación de El festín de los dioses, de Jan Harmensz van Biljert, que juntaba a Dioniso, el dios griego del vino y la alegría, y el resto de dioses del Olimpo, algunos actores y actrices que participaron en el evento afirmaron que era una versión moderna del cuadro La última cena, de Leonardo Da Vinci con drag queens. Y claro, en Hollywood, con distintos actores y actrices, se han hecho eco de la polémica, a la que se ha sumado Donald Trump en las últimas horas.
'Las Olimpiadas celebran abiertamente a Satán': Actores y actrices de Hollywood junto al expresidente Donald Trump critican la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos
Ha sido una de las noticias más comentadas, viralizadas y compartidas en redes sociales. Al parecer, varios elementos de la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos han sido interpretados por algunos como indicativos de simbolismo oculto o rituales oscuros, vinculados al satanismo en cualquiera de sus formas.
Pese a que estas ceremonias suelen ser producciones artísticas que combinan la cultura, la historia y las tradiciones del país anfitrión, sin intención de transmitir mensajes ocultos, muchos consideran que las representaciones ofrecidas y retransmitidas eran realmente ofensas a la religión católica y cristiana.
Como explican en Variety, Donald Trump consideró que era una "desgracia" que se rieran de La última cena y varios actores de Hollywood, como Rob Schneider, conocido por películas como Gigoló y Estoy hecho un animal, quien acaba de publicar un libro sobre la importancia de la libertad de expresión, afirmó que iba a boicotear los Juegos Olímpicos tras la desgracia producida en los inicios del evento. "Lamento decirles a todos los grandes atletas del mundo que les deseo lo mejor, pero no puedo ver unas Olimpiadas que faltan al respeto a la cristiandad y celebran abiertamente a Satán", concluía. Sus seguidores, afirmaban que era una fiesta pagana, llena de símbolos masones y de figuras reprobables de la historia de Francia.
Además, Schneider compartió una fotografía en su perfil de X (Twitter) de lo que considera una ofensa y expresó su sorpresa: "¿Hombres con sus genitales expuestos frente a niños? ¿Drag queens? No estaba seguro si estaba viendo las Olimpiadas o una reunión del consejo escolar", remataba. La propia organización ha querido calmar los ánimos, afirmando que "claramente nunca hubo intención de faltar al respeto a ningún grupo religioso. Si alguien se sintió ofendido, lo lamentamos sinceramente", pero en redes sociales se compartían clips, fotografías y símbolos que alimentaban las teorías. La actriz Candace Cameron Bure, conocida por su papel en Padres forzosos, han compartido su propia versión de los hechos en su perfil de Instagram: "No dejaré de orar en el nombre de Jesús. Rindamos nuestros corazones a Dios, el Padre de Abraham. Recemos. Y oremos por los atletas cristianos, para que iluminen su luz para la gloria de Dios", indicó.