Windows 10 ha logrado calar muy hondo entre los jugadores convirtiéndose, de hecho, en el sistema operativo más popular de Steam (la plataforma de juego con más usuarios en PC) estando presente en la mitad de los ordenadores de los jugadores.
Sin embargo, el Sistema Operativo de Microsoft no está exento de fallos como el que provoca que, cuando aparece algún elemento de Windows superpuesto durante nuestras partidas (como la barra de volumen cuando lo subimos o lo bajamos) en títulos tan populares como Overwatch o Rocket League el rendimiento de los mismos caiga en picado provocando problemas temporales que acarrean caídas significativas en la tasa de frames por segundo.
La comunidad lleva ya bastante tiempo quejándose de estos fallos y por fin Microsoft ha salido a la palestra para asegurar que ya ha detectado las fuentes que originan el problema en estos juegos comenzando a solucionarlos en los próximos parches para insiders que salgan para su sistema operativo.
Por desgracia, como adelantan en ADSL Zone, el parche que solucione todos estos problemas podría no llegar al 17 de octubre, día de lanzamiento para el gran público de la Fall Creators Update de Windows 10 aunque, según el portal español, de no hacerlo es de esperar que la actualización nos llegue a finales del mes de octubre o durante los primeros días de noviembre.
