Con el evento de la Computex 2017 finalizado ya y las nuevas tarjetas gráficas presentadas, hemos visto un avance en la potencia que tienen las propias tarjetas gráficas de última generación. Y es que hemos comprobado que el mundo de la informática y del gaming crece a pasos agigantados.
Son estas innovaciones las que hacen que en poco tiempo las ranuras de conexión PCIe 3.0 se queden obsoletas y ya no se utilicen tal y cómo pasó siete años atrás con las ranuras PCIe 2.0 en su época. Por este motivo es por el que aparecen el nuevo sucesor, y no es nada más y nada menos que el PCIe 4.0.
Esta nueva ranura de conexión llegará con un nuevo estándar que beneficia las conexiones M.2 y U.2, la futura generación de discos duros SSD que serán aun más rápidos. Esta conexión ofrece el doble de ancho de banda que el que teníamos en las PCIe 3.0 y esto se traduce en la velocidad, ya que será capaz de llegar a los 16 GT/s.
Estas ranuras serán retrocompatibles con los componentes que estemos utilizando en las PCIe 3.0 y anteriores, lo que nos dará la opción de utilizar productos específicos de la PCIe 3.0 en las ranuras PCI 4.0, sin duda una muy buena noticia.
En cuanto a las tarjetas gráficas, también podremos aprovechar estas ranuras, aunque el salto de calidad y velocidades no será tan pronunciado como el salto que hubo de la versión 2.0 a la 3.0, pero una mejora es una mejora y es de agradecer.
Ahora la pelota está en el tejado de AMD y NVIDIA, ya que esperaremos que la siguiente generación de sus tarjetas gráficas sean compatibles con estas conexiones. Aunque todavía no estén disponibles para comprar hasta finales del 2017.
Mientras, ya se está trabajando en el desarrollo de la nueva versión 5.0 que llegará hasta los 32 Gbps por pista, volviendo a duplicar las velocidades del PCIe 4.0 y además ya hay compañías que desarrollan sus productos pensando en esta última tecnología.
