“Los sentimientos de Miyoko en Asagaya” de Shin’ichi Abe muestra la complicada vida del autor y su mujer en el Tokio de finales de los años sesenta.

Tras el dramático final de la Segunda Guerra Mundial en Japón, el país del sol naciente no sólo tuvo que sobreponerse a las consecuencias directas de las bombas atómicas, sino también hacer frente a una crisis de identidad como sociedad y a una ocupación por parte del ejército estadounidense. En esa situación, en 1950, nace Shin’ichi Abe quien se convertiría años después en uno de los mangakas más destacados de un nuevo tipo de manga: el gekiga, un género que se caracterizó por contar historias mucho más grises, realistas e intimistas de lo que se llevaba en aquel momento. Y es que por aquel entonces Osamu Tezuka dominaba en ventas.

Entre 1971 y 1973 Abe publicó en la revista Garo diez historias cortas que terminarían conformando el manga Los sentimientos de Miyoko en Asagaya que ahora llega a España de la mano de la editorial Gallo Nero. Para entender este manga hay que tener en cuenta que la revista en la que se publicó no pagaba a los autores cuyas obras aparecían en ella. A cambio, los autores tenían completa libertad en cuanto a los temas que querían tratar en sus obras, y la forma de representarlo.

Los sentimientos de Miyoko en Asagaya son, como ya hemos comentado, diez historias cortas donde de forma autobiográfica Abe cuenta sus vivencias y miserias junto a su mujer (y musa) Miyoko (o Miyo) en el barrio de Asagaya. Este barrio de Tokio, que en aquel momento formaba parte de la zona más bohemia y literaria de la ciudad, es el escenario de la obra. Y marca el tono de la misma. La primera historia, que es la que da nombre al volumen, es un monólogo desgarrador protagonizado por Miyoko donde se establece el tono gris característico de la obra.

A partir de esa historia, Shin’ichi Abe presenta de forma honesta, y muy directa, historias cotidianas de su matrimonio a finales de los años sesenta. El lector tiene que tener en cuenta que todas ellas están marcadas por la pobreza imperante en la época, la enfermedad mental del autor y su alcoholismo. Abe no escondía nada en sus representaciones y entrega al lector en este manga su vida íntima, sus pensamientos y sentimientos con una crudeza poco habitual. Y es que el autor es en todo momento consciente de la subjetividad de esta obra, y lo explota. Ya que lo que pretendía era mostrar sus vivencias, sus dramas, y los de aquellos que vivían a su alrededor. Y para ello, no duda en mostrar incluso su vida sexual con Miyoko. Haciendo completamente pública su vida privada. El autor se deja llevar por sus pasiones en esta obra que muestra cómo él veía la vida, e incluso en algunos momentos se muestra incluso violento en su narración. Teniendo en cuenta los hechos que narra en torno a temas como la soledad, la decepción, la depresión, la amargura y la miseria, entre otros por el estilo, y cómo lo hace, esta obra es obviamente para adultos.

El apartado gráfico de Los sentimientos de Miyoko en Asagaya predomina por encima de los diálogos, que en muchas de las historias brillan por su ausencia. El estilo de dibujo de Abe es realista, con trazos finos. Crea ilustraciones a doble página sin texto que las acompañe, y consigue crear atmósferas y sentimientos para el lector sin necesidad de utilizar más de una doble página para ello. El gekiga suele tener un tipo de dibujo muy realista y serio acorde a su temática, sin embargo, Abe prescinde de esa seriedad o corrección para centrarse en su visión de los hechos que quiere contar. Por ello, sus personajes tienen unos diseños realistas pero sus facciones, dependiendo del momento de la historia, pueden llegar incluso a deformarse para mostrar la visión del autor. De esta forma también consigue evocar sentimientos a través del personaje, y hacia el personaje, por parte del lector. Aunque el autor muestra historias íntimas con su mujer, de forma cruda en algunos aspectos, en cuanto a la representación física todo queda en siluetas.

La edición en castellano de la editorial Gallo Nero es un tomo único donde se recopilan las diez historias cortas en el orden en que se publicaron originalmente en la revista Garo. Además, incluye una biografía del autor para contextualizar la obra, algo que es de agradecer en mangas como éste.

Los sentimientos de Miyoko en Asagaya es una obra adulta para adultos, creada en una época muy específica y cuya impronta queda claramente representada. No es un manga rápido ni sencillo de leer, debido a los temas tratados y la narrativa de Shin’ichi Abe. Sin embargo, es sin duda una obra maestra del autor. Además, no sólo nosotros recomendamos este manga. Este fin de semana, la Asociación de Críticos y Divulgadores de Cómic también lo ha incluido entre sus esenciales del primer semestre de 2020. Así que, desde Sala de Peligro queremos recomendaros que leáis esta obra y compartáis vuestras opiniones con nosotros. Si ya la conocíais, y la habéis disfrutado, también os recomendamos la película Miyoko (2009) de Yoshifumi Tsubota quien adaptó el manga de Abe y creó una pieza única.

Título: Los sentimientos de Miyoko en Asagaya
Guion, dibujo y color: Shin’ichi Abe
Edición Nacional: Gallo Nero
Edición Original: Seirindo
Formato: Cartoné, 272 páginas
Precio: 21,00€