Varias mujeres desafían en redes sociales las conductas sexuales de Cameron Stewart y Warren Ellis

Todos los días en los medios somos testigos de casos de hombres actuando como depredadores sexuales. Todas las semanas, quién más quien menos, tiene una amiga o conocida a la que le han escrito por privado algun(os) desconocido(s) con imagenes subidas de tono, proposiciones indecentes y comportamientos injustificables. Aunque se quiera mirar para otro lado, no pasa un día sin que estas actuaciones lleguen a todos nosotros en forma de pantallazos de movil en redes sociales, reportajes en los telediarios y/o nuestras propias órbitas personales. Desde los conocidos micro-machismos hasta casos de abuso y acoso sexual, es cuestión de estadística que estos comportamientos omnipresentes en nuestra cultura y sociedad también se reproduzcan en el seno de la industria del cómic. 

Cada cierto tiempo se filtran noticias, se elevan acusaciones y se demuestran comportamientos reprochables dentro de la industria del comic, ya sea bajo situaciones de abuso de poder o en circustancias individuales. El caso más sonado en estos últimos años ha sido el de Eddie Berganza, editor en DC Comics desde comienzos de los años noventa, normalmente asociado a la franquicia de Superman. A comienzos del año 2010 fue nombrado Editor Ejecutivo de la compañía, pero por los primeros rumores de sus comportamientos incívicos y acoso sexual fue degradado a un puesto inferior en el organigrama, de editor. Aquella decisión fue muy polémica en su día (2012) porque no fueron pocas las voces que exigían a DC Comics y Warner que la única solución posible era el despido. La situación se volvió insostenible para la compañia en el momento que Eddie Berganza apareció en una portada del periódico Daily News junto a otros acosadores sexuales que estaban siendo investigados en aquel momento (2017). Se trataba de nombres como Harvey Weinstein, Brett Ratner, Jeremy Piven, Louis C.K., Jann Wenner, Richard Dreyfuss, Roy Moore, Dr. Larray Nassar, Kevin Spacey o Gary Goddard, algunos de los cuales luego han salido libres de cargos y otros han perdido el juicio al que se han visto sometidos, tanto burocrático como social.

Pocas horas después de aquel 11 de noviembre de 2017, DC Comics suspendía de empleo y sueldo a Eddie Berganza. Dos dias después, emitían un comunicado de cuatro líneas haciendo oficial su despido que rezaba así: «Warner Bros y DC Entertainment han terminado el contrato del empleado como Editor de Grupo de DC Comics Eddie Berganza. Estamos comprometidos a erradicar el acoso y asegurar que todos los empleados, así como nuestra comunidad de colaboradores freelance, conozcan nuestras políticas y estén cómodos informando de cualquier caso del que tengan conocimiento y que sepan que estarán apoyados por nuestra empresa«.

Las reacciones a lo largo y ancho de la industria no se hicieron esperar y autores como Shea Fontana, Gail Simone, Alex De Campi (quien explicó cómo no se permitía a mujeres trabajar en las series de Superman), Greg Rucka (que había regresado a DC Comics a guionizar Wonder Woman con la condición de no hacerlo con Berganza), Tony Isabella, Lilah Sturges, Tamra Bonvillain o Tess Fowler, quien fue la más clara al respecto. Y continuó siendolo.

A aquel 2017 le quedaban pocos meses para acabar, y aquella tormenta quedó tapada en cierta manera por dos movimientos puramente editoriales que coincidieron en el tiempo y que llamaron la atención de todo el mundo. La marcha de Brian Michael Bendis a DC Comics (y su posterior problema de salud que casi le cuesta la vida) y el despido de Axel Alonso como Editor en Jefe de Marvel Comics, con C.B. Cebulski entrando a sustituirle. Estos dos bombazos informativos pusieron en cuarentena el «Caso Berganza», pese a que otros sectores de la industria daban voz (y altavoz) a más casos de #MeToo que aparecían todos los días. Como, por ejemplo, el del productor y guionista de televisión de la serie de Supergirl, Arrow o Legions of Tomorrow, Andrew Kreisberg, que también fue denunciado por acoso sexual y despedido de su trabajo en las series de Warner aquella semana de Noviembre. Desde entonces, no ha vuelto a trabajar en la industria.

Desde entonces y con una cultura más mentalizada cada día de que el camino es denunciar todos estos casos es la mejor manera de acabar con los acosadores, se han producido varios casos a lo largo y ancho de la industria del cómic, siendo quizás el más sonado el de Brian Wood. A veces estas denuncias se mezclan con el escandalo paralelo del #ComicGate, otras veces no. Y muchas veces puede parecer que se resuma a una cuestión de credibilidad, ya que ante la dificultad de demostrar todos estos casos, es el gran público el que tiene que hacer el ejercicio de a quién creer: al acusado o al acusador. Puede parecer, por momentos, que a no ser que el acusado aparezca en la portada de un diario de tirada nacional, no habrá verdaderas consecuencias.

 

Esta semana en la industria del cómic USA han salido a la palestra dos nuevos nombres de autores como posibles depredadores sexuales. El primero de ellos, Cameron Stewart. El autor de Sin Título, Seaguy o Batgirl fue reprochado en Twitter por la artista Aviva Artzy. «¿Ese post del que hablaba sobre estar en un caso de captación sexual cuando yo era una adolescente? Estoy hablando de Cameron Stewart. El dibujante de comics. Nos conocimos cuando yo tenía 16 años y él tenía unos treinta. ¿Quizá 32? Fue en 2009.» Al primer tuit añadió más información: «filtreamos por teléfono y tuvimos una cita, en 2009, cuando yo tenía16 años. Luego quedamos como amigos durante mucho tiempo y de vez en cuando me escribía para decir que le daba pena haber perdido la oportunidad de salir conmigo. Me llevó mucho tiempo darme cuenta de lo que había pasado realmente, de lo que hizo y de que, en realidad nunca fuimos amigos«.

https://twitter.com/AvivaMaiArtzy/status/1272708780065796096

https://twitter.com/AvivaMaiArtzy/status/1272708782431318021

https://twitter.com/AvivaMaiArtzy/status/1272708783312187395

https://twitter.com/AvivaMaiArtzy/status/1272708784188768256

Al leer el anuncio de Aviva Artzy, varias mujeres más compartieron su experiencia con Cameron Stewart, muy similares, como el caso de Kate Leth, que tuiteaba que también le pasó cuando tenía unos 19 años y él 32 y cómo él le dibujó como la Muerte de Sandman cuando estaban en un hotel para atraerla. En un tuit posterior, precisó que por la fecha del dibujo (que todavía conserva, aunque ella misma admite que no sabe por qué) que en realidad ella debía tener unos 20 o 21 años, en 2010. Y, por último, añade que cuando habló de esto en su día solo le sirvió para entrar en la lista negra de DC Comics.

https://twitter.com/kateleth/status/1272738680512233472

https://twitter.com/kateleth/status/1272754046659465217

https://twitter.com/kateleth/status/1272938609851551745

Como se indicaba algunas líneas más arriba, en estos casos el beneficio de la duda siempre está presente por parte del testigo que observa estos hechos. Por eso, el hecho de que Martha Cooke, la mujer de Darywn Cooke, las apoye publicamente puede ser un punto contundente para formarse una opinión más clara del asunto. Cooke colaboró durante años con Cameron Stewart en varios proyectos, entre los que destaca la Catwoman de principos de siglo. Así que se puede intuir facilmente que Darwyn y Martha conocen cómo es Cameron Stewart. Las palabras de Martha también son contundentes: «Ésta es la primera de muchas mujeres muy muy jóvenes que han sido valientes para dar el paso y denunciar este comportamiento depredador. Sé que habrá otras tantas. Todas ellas están diciendo la verdad, yo ví cómo ocurría«. Tras esto, Martha añade que «él era muy cuidadoso a la hora de esconder su trato manipulador, desagradable y depredador hacia las mujeres bajo un exterior encantador. A mucha gente le sorprenderá escuchar estas «acusaciones locas» pero no os dejéis engañar. Esa la parte más creepy, cómo él actua normal pero trata de salir con adolescentes».

Por si fuera poco, añade: «en caso de que mi mensaje anterior pueda parecer ambigüo, Cameron Stewart es conocido por ser un depredador, particularmente de mujeres jovenes en el mundo del cómic y en las tiendas de cómics. Mucha gente lo sabe porque yo misma se lo he dicho. No merece vuestra protección. Acabad con él«.

Otro testimonio contundente es el de Andrea Demonakos, organizadora de varios festivales de comics en Toronto, donde residía anteriormente Cameron Stewart. En su mensaje afirma que «en la comunidad de cómics de Toronto se ha sabido durante una década que era un depredador sexual y básicamente fue echado de la ciudad después de cagarla muchas veces. He avisado a muchas mujeres que alejaran de él en muchas ocasiones«.

Pronto esta polémica salpicó a algunos colaboradores del propio Cameron Stewart, como el caso de Babs Tarr, con quien colaboró en Batgirl (donde Barbara Gordon era más joven que nunca y volvía a un entorno universitario, en un enfoque pensado para atraer a un público lector más joven y femenino) y en Motor Crush. Mucha gente preguntó a Babs Tarr por su opinión, y se pronunció de la siguiente manera, afirmando que la propia Aviva le avisó de cómo era Cameron hace tiempo y que la apoyó al 100% en su momento y la apoya ahora también al 100%.

https://twitter.com/babsdraws/status/1272743685407596544

Quien más ha detallado su relación con Cameron Stewart es Evelyn Hollow, en varios mensajes que incluimos a continuación, en inglés, donde explica cómo empezó una relación sexual con Cameron Stewart cuando ella tenía 18 años y él más de treinta.

https://twitter.com/_EvelynHollow/status/1273185418557751298

Tras destaparse este caso y quedar reflejado en Twitter y en distintas páginas webs, varias mujeres denunciaron en redes sociales comportamientos similares de Warren Ellis, el guionista de Planetary o Authority. La primera de ellas fue Katie West, aunque enseguida borró el hilo de Twitter donde lo denunciaba y tuiteó «que no quería arruinar mi vida y no quiero arruinar la de nadie más. Esto no es sobre una sola persona. Esto es sobre un patrón de comportamiento y nuestra complicidad colectiva en este comportamiento«.

https://twitter.com/katiewest/status/1273028676486148097

Sin embargo, su denuncia fue vista por varias personas que se animaron a compartir la suya también, como el caso de @Thermina o de @Foxtongue. Esta última afirmaba que «Esto es terrible, pero es más fácil cuando estamos todas juntas. Me están llegando más casos y todos tienen un patrón similar. 1.- Contactó conmigo cuando estaba vulnerable o era joven. 2.- Actuó como un mentor, me prestó mucha atención desinteresadamente. 3.- Sobrepasó los límites. 4.- Dijo que era su mundo, que eramos grandes amigos, que eramos sus grandes secretos y que apoyaba nuestras carreras para que no pareciera que podíamos decir que no. 5.- Nos dejó. Y nos echamos la culpa«.

Tras estos primeros casos, siguieron llegando más mujeres denunciado casos de comportamiento similar de Warren Ellis, como el caso de Audra Williams.

Mientras, tras unas horas de reflexión, Katie West volvía a tuitear. «Ayer tuiteé sobre los hombres que abusan de su poder en la industria del comic para acercarse a mujeres jóvenes, manipularlas emocionalmente o tener sexo con ellas. Mi intención era proteger a las jóvenes mujeres. Cité a tres hombres en particular, de los cuales he tenido experiencias personales con dos de ellos. Sin embargo, no dije que mi experiencia personal con esos hombres fuera abusiva. Dije que ellos eran hombres que abusaban de su poder. Desde entonces, Brian Wood se ha puesto en contacto conmigo para disculparse de su comportamient pasado. Ha madurado y se ha reconciliado consigo mismo. Hemos estado hablando y creo que Brian está dispuesto a escuchar y aprender y tomar responsabilidad por sus acciones pasadas.» 

https://twitter.com/katiewest/status/1273373796217520129

https://twitter.com/katiewest/status/1273373913402290177

https://twitter.com/katiewest/status/1273374131006902280

En el último tuit de Katie West (que fue la primera en mencionar a Warren Ellis en esta controversia) apuntó que estaba escuchando testimonios de más de 35 mujeres que le estaban contando sus experiencias con Warren Ellis, y que el número iba en aumento.

https://twitter.com/katiewest/status/1273378421729607684

El último testimonio que incluimos aquí es el de Tess Fowler. Quien fuera la más vocal respecto al «Caso Berganza» también tuiteó durante la jornada de ayer sobre el «Caso Ellis». Fowler decía lo siguiente: «Para todos aquellos que preguntan sobre el tema de Warren Ellis, os puedo decir que es algo que me habían comentado hace aaaaaños. La persona que me lo contó no estaba dispuesta a hablar abiertamente. Pero es algo que ha sido corroborado por otras personas con el paso del tiempo.

Otros dos testimonios por parte de autoras de la industria han venido de la mano de G. Willow Wilson (co-creadora de Ms. Marvel) o de Becky Cloonan. Esta última ha declarado que «Enfrentarse a comportamientos de depredadores sexuales por parte de profesionales establecidos en la industria nunca va a ser una conversación fácil para nadie. Es incómodo, teniendo en cuenta que estamos hablando de que gente a la que hemos admirado durante mucho tiempo o incluso trabajado con ellos resulta que son así. La industria del cómic es muy pequeña y a través de dos saltos puedes conocer a casi todo el mundo, así que hay que ser amable siempre«.

https://twitter.com/beckycloonan/status/1273298266159972352

https://twitter.com/beckycloonan/status/1273298267716141062

Mientras, G. Willow wilson ha afirmado lo siguiente: «No conozco a nadie que estuviera a finales de los 90 o comienzo de los 2000 en el foro de Ellis que pueda decir ahora que esté sorprendido. No era siquiera un secreto. No es que crea a esas mujeres, es que lo vi con mis propios ojos. Mucha gente está preguntando por qué está mal. Os voy a decir por qué. En aquella época, incluso hoy en día, había un grupo de hombres que eran el *único medio* para entrar en la industria del comic«. La guionista continua: «Si tenías aspiaciones profesionales, tenías que convencerles de que abriesen su agenda. Y había dos agendas distintas. Si eras un tio, todo lo que tenías que hacer era tener talento y ser un pelota. Si eras una mujer, era muy diferente. Había una atmósfera de «casting de sofá». Se decía que el sexismo estaba bien siempre y cuando fuera «sexismo irónco». Lo mismo con el racismo. Si te oponías y decías lo contrario y que no hay «sexismo irónico» y solo existe sexismo, pues entonces, adios.«

 

De momento estas han sido algunas de las declaraciones más relevantes. Ni Cameron Stewart ni Warren Ellis han hecho declaraciones estos días. Este último tiene un newsletter semanal que se publica todos los domingos y la expectación sobre lo que pueda decir esta semana es muy alta. Seguiremos atentos.