Cuatro cómics para celebrar el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo

Esta mañana hemos publicado un artículo donde os comentábamos que justamente hoy se celebran (por lo menos en la zona hispanohablante) el día internacional del libro infantil y juvenil y el día mundial de concienciación sobre el autismo. Hacer recomendaciones sobre cómics de corte juvenil e infantil nos ha parecido buena idea. Pero colaborar con la concienciación sobre el autismo nos ha parecido más que necesario.

El Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, fue decretado por las Naciones Unidas con el objetivo de mejorar la calidad de vida de la población que es autista. Para celebrarlo, a nivel global se llevan a cabo eventos, charlas y programas para sensibilizar a las personas sobre una condición que afecta a un porcentaje significativo tanto de la población infantil como de la población adulta.

Como la idea principal es generar conciencia, y como nosotros no somos expertos en el tema, hemos decidido que nuestro granito de arena va a ser recomendaros cuatro cómics de gente que sí es experta en el tema. Y que os harán entender mejor qué es el autismo, y cómo se relacionan las personas con autismo.

María y yo y María cumple 20 años (Astiberri, 2007 y 2015)

Las dos primeras novelas gráficas pertenecen a María Gallardo, y su padre Miguel Gallardo. Miguel es el autor de ambas novelas, en María y yo Miguel muestra a su hija de doce años en una especie de cuaderno de viaje muy especial. Y es que María tiene autismo.

Juntos se van a las Islas Canarias, y el lector los acompaña durante todo su viaje, haciendo el recorrido desde los ojos de ambos. Y es que, aunque tiene autismo, María tiene un sentido del humor único, y sus vacaciones serán la excusa perfecta para conocerla. Miguel se comunica con su hija mediante sus dibujos, y de la misma forma, presenta al lector su vida junto a ella.

María y yo sitúa al lector en su piel, y muestra situaciones cotidianas de la vida de una persona con Trastorno del Espectro Autista. Con mucho sentido del humor, Miguel nos deja entrar en su vida familiar, para que observemos cómo se desarrolla su día a día. Y es que el autismo de María hace que se comuniquen de forma distinta entre ellos, y con el mundo. Pero eso no quiere decir que no se comuniquen.

Tanto María como Miguel son felices, y es lo que refleja esta novela gráfica. Sin embargo, la incomprensión de los demás respecto al autismo hace que mucha gente mire a María, y en consecuencia a su padre, con pena. Y esto enfada a Miguel, con toda la razón del mundo.

Podemos llegar a entender, que no a compartir, la pena por incomprensión, pero nunca por intolerancia (que también la hay). Por eso, en este día sobre la concienciación queremos compartir que el autismo no es uniforme. Hay tantas variantes como personas. Y es que, cada persona con autismo es un mundo. Exactamente igual que las personas que no tienen autismo.

María y yo desmonta el tópico de la falta de afectividad de las personas con autismo, y es que María es cariñosa a su manera, y disfruta de muchas cosas. Es, como se ha dicho antes, feliz.

En esta novela gráfica encontramos distintas partes que explican cómo María se comunica con su padre (y, por ende, con su familia). Aunque esto no quiere decir que todas las personas con autismo se comuniquen así. En el caso de María, ella mantiene un tipo de conversación con su padre único. Además, Miguel crea una serie de pictogramas con los que consiguen planificar actividades. Ya que, algunas personas con autismo, tienen problemas para adelantarse a lo que ocurrirá. Por lo que necesitan unas rutinas, y un sistema para introducir esos cambios en el futuro. En el caso de María, es mediante dichos pictogramas.

María y yo es una obra maravillosa para entender el autismo, pero también para aquellos padres que crean que pueden tener hijos autistas y no sepan cómo enfrentarse inicialmente a la situación. Miguel explica en esta obra que en cada persona – como se ha mencionado ya varias veces – puede haber (o no) distintos grados de severidad, o distintas combinaciones en los síntomas. De ahí que el autismo se denomine “espectro”. Si hay padres que acaban de recibir el diagnóstico, esta novela gráfica les podrá ayudar mucho, ya que podrán ver cómo tanto María como Miguel son felices. Y verán que sus hijos tienen un futuro por delante.  

Y ese futuro puede verse en la segunda obra, María cumple 20 años. Mismos autores, mismos protagonistas, pero en un momento diferente de sus vidas. Y es que María ya se ha convertido en adulta. María ha crecido, y su forma de comunicarse con su entorno también. En esta segunda obra, Miguel muestra cómo tanto la música como el dibujo se han convertido en partes esenciales de la vida de María. Y es que los usa para comunicarse. Miguel incluso incluye reproducciones de dibujos que la propia María crea y utiliza para comunicarse.

Además, con la distancia de los años que han pasado entre ambos cómics, Miguel explora y muestra no sólo la situación actual de ellos mismos. Si no, también, la evolución de las conductas de María. Y cómo se enfrentan a momentos tensos donde María entra en “bucle”.

Dos obras perfectas para entender qué es el autismo, y sobre todo, para descubrir que hay tantas diferencias entre la gente autista como entre la que no lo es.

Habla María. Una novela gráfica sobre el autismo (Catalonia, 2018)

La historia de Bernardo Fernández (conocido como BeF) es distinta a las anteriores. Aunque también habla del autismo de una hija, y aunque ésta también se llama María, en el caso de Bef y María su relación con el autismo empieza antes incluso que en las obras anteriores. En el caso de María Gallardo, no le diagnosticaron el autismo hasta los ocho años.

Esta novela gráfica, que además se denomina así a sí misma en el título, centra el foco de atención en los padres de María. Y es que, tan importante es entender el autismo, como a las personas que conviven con él. Como cualquier cosa relacionada con los hijos, cuando a Bernardo y a su mujer les dijeron que María era autista se les vino el mundo encima. Bernardo se dibuja a sí mismo en la oscuridad más absoluta, y vemos su progresión saliendo de ella.

Y es que, aunque todos creamos saber cosas sobre el autismo, no es lo mismo conocerlo que vivirlo. Y eso que los padres no es que resientan a su hija, sino que temen por ella en el momento en que ellos no estén. Un miedo que comparten todos los padres, pero más, aquellos de hijos con autismo. Ya que, en los casos que esos niños les cuesta comunicarse fuera de la familia, consiste en un reto mayor prepararlos para un mundo que no los comprende. De ahí la importancia de días como hoy.

El trazo de Bef es muy sencillo, pero al mismo tiempo potente, y es que delinea en negro de forma muy marcada para realzar las caras de todos sus personajes. Esa sencillez hace que resalte de forma clara el mensaje. Y es que consigue conectar con el lector desde el principio.

Más allá de ser una obra para entender el autismo, que también, esta obra deberían leerla todos aquellos profesionales del campo de la sanidad que tengan que dar este tipo de noticias. Y es que es importantísimo que estos sean los primeros que saben cómo van a ser recibidas estas noticias, para ser los primeros en asegurar a los padres el futuro bienestar tanto de los hijos, como de ellos mismos.

La geometría de los silencios (La estrella azul, 2019)

Esta novela gráfica de Carla Berrocal y Marc Buleon cuentan distintas historias de varios adultos que se reúnen en un centro de día para personas con autismo. Todas ellas protagonizadas por adultos con autismo.

El futuro que se prometía a las protagonistas de los anteriores cómics está presente en este último. A tal punto está relacionado con las anteriores, que el propio Miguel Gallardo (autor de las dos primeras obras recomendadas en este artículo) escribió el prólogo de esta obra. Y en él dijo que la gente suele pensar que todas las personas con autismo son niños, quizás porque en las películas solo vemos niños, en los libros, leemos sobre niños, y son niños los que salen en los periódicos cuando se habla de autismo. No tenemos relatos de vida de los adultos, como si los hubiéramos enviado a un planeta lejos de la tierra. Y la vida de esas personas merece ser contada, como la de cualquier otra.

Y eso es lo que hace este cómic, nos cuenta distintas historias personales de distintas personas con autismo. Y obliga al lector a leer distinto, ya que no es un cómic convencional, sino que su estructura gira en torno a figuras muy marcadas, planas y con un juego de colores muy concreto. Que inicialmente puede ser incómodo de entender, pero que una vez se hace (en muy pocas páginas) el lector empieza a leer y comprender de otra forma cómo los autores se quieren expresar. Al igual que ocurriría al intentar comprender a una persona autista.

A ese respecto, ya que consigue sacar al lector de su zona de confort y llevarlo a un entendimiento igual de bueno, pero distinto.

En este caso no se trata de una biografía, y es que las historias que se exponen en esta obra no son reales. Pero sí están basadas en historias reales. Ya que Marc Burleon, el guionista de la obra trabaja, y coordina, desde hace tiempo en distintos talleres para adultos con autismo. Por lo que su conocimiento sobre convivir con adultos con autismo, y comunicarse con ellos, es mayúsculo. Además, a modo informativo y de concienciación, esta obra lleva una explicación muy sencilla de lo que significa ser una persona con autismo.

Aunque las anteriores obras hacían especial hincapié en la familia que cría a niños autistas, en este caso, se trata de una obra que trata el tema del apoyo a familiares y amigos con autismo. La importancia de estas figuras, y del entendimiento por parte de todo el mundo de lo importante que es comunicarse, aunque sea sin palabras. Y en especial, que la no comunicación también es comunicación.

Cada uno vive su vida como quiere, dentro de sus posibilidades. Pero es importante saber y conocer que no todos nos enfrentamos igual a los mismos eventos de nuestras respectivas vidas.

En este día mundial de la concienciación sobre el autismo esperamos que hayáis anotado un par de obras, que hayamos sido capaces de expandir un poco vuestro campo de visión respecto al autismo y que, si conocéis más obras como éstas, decidáis compartirlas con nosotros. ¡Sed felices y comunicaos de todas las formas posibles!

Y recordad que cuando más conozcáis sobre todas las realidades que podéis encontrar en vuestro día a día, con distintos tipos de personas, más fácil os será comunicaros. Y ante cualquier duda, preguntad. Nunca deis nada por supuesto, aprended y compartid ese conocimiento.