Educación contra la Homofobia: cómics para el Orgullo 2022

Como cada 28 de junio desde hace más de cincuenta años, hoy se conmemoran los eventos ocurridos en torno al bar Stonewall en Nueva York. Fue allí donde en 1969, un grupo de personas pertenecientes al colectivo LGTBIQ+, hartas de las continuas y desproporcionadas redadas policiales, se rebelaron contra la policía.

A partir de ese momento, empezaron una serie de protestas pacíficas que servirían como germen para la lucha por los derechos del colectivo en todo el mundo. En la actualidad, por desgracia, todavía hay mucho que reivindicar. Y es que no en todo el mundo existen los mismos derechos humanos para todos.

Cada año el Orgullo reivindica en cada lugar aquello que es más urgente solucionar. Y conmemora y celebra, al mismo tiempo, todo lo conseguido en años anteriores. Visto cómo está el panorama político global en torno a estos temas, la manifestación estatal en España del Orgullo 2022 se ha decidido centrar en la lucha contra el odio y los ataques que sufren todavía a día de hoy las personas queer. Reivindicando sus derechos como lo que son, derechos humanos inalienables. Aunque todavía haya gente que pretenda lo contrario.

FRENTE AL ODIO: VISIBILIDAD, ORGULLO y RESILIENCIA

Teniendo en cuenta el aumento de ataques de odio en los últimos años, desde Sala de Peligro queremos aportar nuestro granito de arena en el Orgullo 2022 recomendando cómics que ayuden a esta lucha a partir de la educación. Y es que la visibilidad que otorgan a ciertos temas las obras que vamos a recomendar, pueden ayudar a ampliar la visión de muchas personas respecto a realidades a las que quizás nunca se han enfrentado, o con las que nunca han interactuado.

Hace dos años hicimos una de estas listas, recomendando obras que ayudaban a entender mejor la problemática a la que se enfrentaban, y siguen enfrentándose, las mujeres trans así como la lucha contra la bifobia. De entre las obras que recomendamos, Us de Sara Soler terminó convirtiéndose en una novela gráfica publicada por Astiberri. Razón por la que entrevistamos a la autora, y con la que pudimos dialogar de muchos temas relacionados con las reivindicaciones del Orgullo de este año.

Empecemos con la realidades o experiencias trans. Una de las peticiones que más solemos ver por redes es la aparición de obras sobre este tipo de realidades donde les autores hablen de su propia experiencia. Que cuenten sus historias. Y eso es lo que podemos encontrar en cómics como Ensayo de la vida real de Alexa Paulette y Rebeca Peña (Liana Editorial), una novela gráfica que ficciona la autobiografía de Alexa, una de las autoras. En ella les lectores se enfrentan al desarrollo de Alexa desde su infancia, pasando por su adolescencia hasta su llegada a la vida adulta.

Cómo tuvo que deconstruirse, y razonar no sólo consigo misma acerca de qué significaba el género sino también en cómo enfrentarse al hecho de ser una mujer trans en un mundo regido por el binarismo heteropatriarcal. El testimonio de Alexa queda retratado por los lápices de Rebeca Peña, quien la acompaña en un apartado gráfico donde predominan los colores de la bandera trans y una sencilla expresividad en los trazos.

Esta obra consigue transmitir no sólo una historia personal, sino todos los sentimientos y tribulaciones de Alexa. Hasta tal punto que, una vez finalizado, sólo dan ganas de abrazarla. El punto de vista personal de este cómic reafirma la necesidad de seguir conociendo este tipo de historias, ya que cada transición es distinta y en esa diversidad se encuentra la comunidad, y los posibles referentes para otras personas.

Otra obra de este estilo, pero esta vez no basada en la experiencia personal de la autora, es P. Mi adolescencia trans de Fumettibrutti (pseudónimo de Josephine Yole Signorelli) publicada por la editorial Continta me tienes. Una novela gráfica muy distinta a la anterior, pero que también trata el proceso de autodescubrimiento de una persona adolescente trans. Lo más interesante de esta obra es cómo P. se desarrolla como persona (y personaje) y representa su género a través de su apariencia, y su arte. Cómo se enfrenta a ese autodescubrimiento y a su nueva realidad a través de excesos que la llevan a cometer errores, pero a conocerse mejor. Convirtiéndose este cómic en una opción muy interesante por tratar temas como la autoaceptación, la autoestima y la posibilidad de ser humanos imperfectos, con todo lo que ello comporta. Como, por ejemplo, ser contradictorios incluso con nosotres.

En una dirección radicalmente distinta se encuentra la obra Transiciones. Diario de Anne Marbot de Élodie Durand (Andana Gráfica) una novela gráfica basada en el diario real de una madre cuyo hijo le dice que lleva tiempo yendo a hablar con una psicóloga sobre temas de género. Empieza así su transición, porque este cómic va sobre Anne y su relación con la transidentidad de su hijo Alex. Y cómo todos sus esquemas y expectativas como madre se dan de bruces contra la realidad.

Anne se enfrenta a sus prejuicios y desconocimiento, mientras aprende no sólo sobre Alex, sino también sobre comunicación tanto con él, como con el resto de su familia. Esta obra es especialmente interesante para personas adultas que traten con niñes, sean trans o no, y que quieran aprender más sobre estos temas. Ya que se trata la transidentidad a través de los ojos de la madre, y eso puede ayudar a gente que tenga las mismas dudas que la protagonista de esta historia. Sobre todo porque se trata de una madre supuestamente educada, con amplios conocimientos científicos y culturales, y sin embargo no está libre de prejuicios ni errores.

Anne resuelve sus dudas a través de conversaciones con su marido, la psicóloga a la que va Alex, el propio Alex y también sus hijos pequeños. Además, la propia Anne hace una investigación sobre género, identidad y demás temas relacionados, que también se muestra en el cómic. Teniendo un apartado educativo fantástico, sin molestar en el desarrollo de la historia por lo bien integrado que está. Con un apartado gráfico minimalista pero efectivo. Especialmente el uso del rosa y la sombra negra y enmarañada que acompaña a Anne en sus diatribas mentales. Un cómic que también puede interesar a aquellas que necesiten ejemplos de transiciones familiares.

Otro de los puntos sobre los que queríamos recomendaros algunos cómics son la lucha de los estereotipos de género, y las realidades no binarias. En cuanto a la lucha de los estereotipos de género, es decir, las características físicas, actitudes tanto en público como en privado, y el tipo de relación que tienen que tener entre sí los hombres y las mujeres según la mentalidad binaria heteropatriarcal, no hace mucho que hemos hecho la reseña de dos cómics que son magníficos: Rosa de Gaëlle Geniller (La Cúpula) y George Sand Hija del Siglo de Séverine Vidal y Kim Consigny (Garbuix Books).

Ambas novelas gráficas tienen un corte histórico, sin embargo, esto sólo sirve para poner en mejor perspectiva la importancia de esa lucha. La primera, por tratar de forma directa dichos estereotipos y cuestionarlos a través del arte. Y la segunda por hacerlo a través de la biografía de George Sand, quien subvirtió todos los roles de género que se le atribuían a las mujeres en el siglo XIX. ¿Es esto compatible con las reivindicaciones del Orgullo 2022? Por desgracia sí, ya que muchos de los temas tratados en estos cómics siguen sin ser una realidad en muchas partes. Como si no aprendiéramos de la historia. De ahí la necesidad de seguir recomendándolas.

En cuanto a realidades no binarias, Skip de Molly Mendoza (Dibbuks) muestra a través de una narrativa bastante psicodélica la historia de dos jóvenes de género no binario. Lo más interesante de esta obra es precisamente el lenguaje inclusivo o, mejor dicho, neutro y que ambos personajes protagonistas no tengan un género definido, creando una serie de conversaciones y temas a tratar muy interesantes. Sin embargo, es la obra más complicada en cuanto a su lectura de todas las que recomendaremos en este artículo debido a su apartado gráfico. Ese viaje de autodescubrimiento de les protagonistes se hace a través de un viaje interdimensional marcado por formas y, sobre todo, colores. Por lo que se recomienda su lectura a personas que estén acostumbradas a leer cómics. No como entrada a ellos.

En cuanto a representación de diversidad, y un poco en esa línea más psicodélica y divertida, pero en este caso perfectamente entendible, encontramos la obra Hoops de Genie Espinosa (Sapristi) una novela gráfica que mezcla la juventud de la autora y sus reivindicaciones feministas en una aventura gráfica con toques de Alicia en el País de las Maravillas. Una obra en la que prima la diversidad, la subversión y la sororidad.

Volviendo a la representación de realidades más cercanas a nosotres o, mejor dicho, sin un apartado fantástico en la representación de dichas realidades, queremos volver a recomendar Generaciones de Flavia Biondi (La Cúpula). Novela gráfica protagonizada por Matteo un joven que tras confesar a su padre que era homosexual huye de casa. Tras esto se instala en Milán donde construye una vida alrededor de Massimo, el supuesto hombre de su vida. Tres años después debe volver al pueblo del que huyó y enfrentarse a la ruptura con Massimo, a las decisiones que tomó en el pasado, y también a una realidad familiar que le es completamente ajena. Ya que en tres años no se ha comunicado con su familia, y las cosas han cambiado más de lo esperado. Generaciones es un retrato de la importancia de la comunicación, y de cómo la ausencia de ésta entre distintas generaciones puede generar problemas fácilmente evitables.

A este respecto, otra obra interesante es Nuestros colores de Gengoroh Tagame (Panini Manga) un manga del autor de El marido de mi hermano donde retrata la realidad del día a día del colectivo LGTBIQ+ en la sociedad japonesa. Si bien en la actualidad él es abiertamente homosexual, esta historia muestra la homofobia imperante en Japón. Y cómo las personas del colectivo se ven abocadas a mentirse incluso a sí mismas para “encajar” en una sociedad que, si bien no penaliza la homosexualidad, tampoco la trata como una realidad aceptable. Tagame trata a través del personaje protagonista la toma de conciencia respecto a la identidad sexual propia, y crea una narrativa que reafirma su convicción que todo el mundo tiene derecho a ser amado y respetado.

Tres cómics que queremos recomendar para lectores algo más jóvenes, por su diversidad, humor y empatía ya han sido reseñados en la web. Snapdragon de Kat Leyh (Astronave), The Avant-Guards y Heavy Vinyl (ambos de Fandogamia). Tres cómics que añadimos a esta lista por hacer una representación no sólo positiva del colectivo sino hacia la que aspirar. Y que no queríamos que quedaran sin mencionar en caso de que algún adulto esté buscando cómics para regalar.

Por desgracia, como se comentaba al principio de este artículo, en los tiempos que nos están tocando vivir han aumentado las agresiones al colectivo LGTBIQ+ amparadas por los discursos de odio de la extrema derecha. Es por eso que, para concienciar acerca de estos temas queremos recomendar el cómic Bat Alan. Biografía de un asesinato social de Ramón Boldú (Astiberri) quien presenta la historia real de Alan, un chico transgénero que, con 17 años de edad y tras sufrir serios problemas de bullying en la escuela, acabó suicidándose. Una historia muy dura pero importante, ya que Boldú no se recrea en la tragedia, sino que la comparte con nosotres para, sobre todo, concienciar del poder que tiene la sociedad sobre la vida de las personas. Y cómo de importante es la lucha contra el odio poniendo la mirada, en busca de responsabilidades, en quienes ejercen la violencia y no en quien la sufre.

Una obra que trata también estos temas desde una historia personal es Mariquita de Juan Naranjo (Sapristi) una historia autobiográfica sobre la homofobia. Si bien se trata de un libro ilustrado, aprovechamos que utiliza algunos elementos del cómic para exponer gran parte de su vida mostrándose todo lo vulnerable que puede llegar a ser. Y lo hace a través de textos muy detallados e ilustraciones que él mismo ha hecho. Ilustraciones cándidas que acompañan fragmentos de su vida terriblemente difíciles y que, conociendo en la persona que se ha convertido, conforman un texto positivo pese a todo. Mariquita es una de esas obras que debería leer todo el mundo porque, por desgracia, muchas de las situaciones que Juan tuvo que vivir en los noventa se siguen repitiendo, esta vez, exacerbadas por las redes sociales.

Otro de los temas preocupantes del momento es la pérdida de derechos, en este caso sobre el propio cuerpo. Las personas que pueden quedarse embarazadas en Estados Unidos han visto cómo las leyes del país han retrocedido más de cincuenta años criminalizando el aborto. Si bien esto puede parecer que no tiene relación alguna con el Orgullo, la autonomía y los derechos de las personas sobre su propio cuerpo, son puntos clave de la lucha.

Y es por ello que queremos añadir a esta lista de cómics La palabra que empieza por A de Elizabeth Casillas e Higinia Garay (Astiberri) un ensayo gráfico exhaustivo y documentado acerca del aborto, con un discurso narrativo donde contextualiza el aborto geográfica e históricamente, trata temas político-sociales y legales, además de luchar contra la desinformación y los falsos mitos. El apartado gráfico de Garay juega con el rosa fosforescente y el delineado negro; y crea composiciones que hacen más llevadera la cantidad de datos que aporta cada página.  Una obra que aboga por la educación y que resolverá muchas dudas. Pero que además hace pensar y debatir acerca de cómo vemos el mundo, y cómo entendemos el derecho de las personas gestantes a decidir sobre su propio cuerpo. Una obra que a estas alturas no deberíamos necesitar pero que, visto lo visto, no podemos sino recomendar una y otra vez.

Obviamente, es imposible en un artículo como el presente apuntar todas las obras que tratan estas temáticas, ni tampoco abordar todos y cada uno de los problemas en cada país. Por ello os animamos a que compartáis con nosotres en redes todas aquellas obras que habríais incluido en el presente artículo. Para que así podamos seguir debatiendo, y compartiendo, cómics con los que conseguir una mayor visibilidad.

Como siempre, leed, compartid, empatizad y recordad que el Orgullo es, ante todo, una reivindicación que debemos llevar a cabo entre todes.

De forma completamente personal, la persona que firma esta reseña (Iria Ros Piñeiro) quiere dirigirse a les lectores que puedan estar atravesando situaciones complicadas respecto a temas de identidad de género o sexual. Si después de leer este artículo, o alguno de estos cómics, crees que conoces a alguien que pueda estar en una situación complicada por bullying o incomprensión familiar. O, incluso si tú misme piensas que nadie a tu alrededor va a escucharte o entenderte, no dudes en ponerte en contacto conmigo en redes sociales, o a través de la propia web. Te ayudaré a explicarte ante quien haga falta y buscaremos ayuda juntes si fuera necesario.