Les fans de los cómics de DC hemos visto desde hace tiempo la conversión de Harley Quinn (Dra. Harleen Quinzel) y Poison Ivy (Dra. Pamela Isley) de villanas a anti-heroínas. Dos mujeres de armas tomar en el universo de Batman que poco a poco han ido tomando las riendas de sus vidas más allá de los orígenes con los que se crearon. De entre toda su evolución, que es mucha, muy variada e interesante, la que más ha llamado siempre la atención de les lectores es la relación que había entre ambas.
Aquí entra en juego todo el abanico de series que se cruzan en el universo DC, donde su máximo exponente es la serie de Batman. Lo que ocurre en la trama central de esa serie es lo que se considera “CANON” y lo que supuestamente es “real” en términos de guion. De ahí que muchas veces ocurran eventos en series limitadas de números que, en teoría, podrían ignorarse en dicho “canon”. También entra en juego todo el tema de los reboots (reinicios) que cada cierto tiempo hace la editorial, como The New 52 o Rebirth en este caso.
El caso es que, con toda esta ida y venida de líneas temporales, mundos paralelos y demás, Harley Quinn y Poison Ivy llevan mucho tiempo siendo una de las mejores parejas dentro de DC. Ya en la serie de los años noventa (Batman: The Animated Series) su amistad iba algo más allá de lo que se consideraría normal para una amistad convencional. Tanto en la serie, como en los cómics, ambos personajes tenían apodos cariñosos para la otra, y hacían comentarios con doble sentido.
En 2017, Marguerite Bennett y Mirka Andolfo aprovecharon la serie Bombshells para desarrollar esta historia como punto central de la misma durante algunos números. Una serie que utilizaba un diseño pin up y que se situaba en los Estados Unidos de los años cuarenta. En esta serie ambas confirman que son novias, y el amor y cuidado que se profesan la una a la otra es más que obvio.
En 2020 Harley e Ivy llegaron a casarse en una boda de lo más emotiva y perfecta en la serie Injustice: Año Cero. De la mano de Tom Taylor, Cian Tormey y Rain Beredo pudimos leer en primera persona una escena que se había insinuado en otros momentos de la serie Injustice donde se aludía a una boda en Las Vegas. Pues bien, en Año Cero pudimos leer dicha boda y constatar que ambas son lo mejor que le ha pasado a la otra en una boda sorpresa para Harley y les lectores. Eso sí, como no podía ser de otra forma en el universo DC no todo podía acabar con un felices para siempre. Pronto se trunca la tranquilidad de la escena. Pero que conste que boda tuvimos.
Además de estos momentos específicos y explícitos, la amistad tornada en relación de Harley e Ivy ha aparecido tanto en las series animadas para adultos como en los cómics derivados. En un episodio de la serie Harley Quinn no sólo se besan, sino que también tienen relaciones sexuales tras escapar de la prisión de Bane. En The New 52 también tenían una relación explícita, basada en el respeto mutuo. Y, sin embargo, durante todo este tiempo parece que parte de la gente que seguía los cómics no quería verlo. Porque “no era canon” por no haber ocurrido en ningún momento en la serie principal.
Pues bien, este argumento se ha acabado de forma oficial gracias al dibujante español Jorge Jiménez, el guionista James Tynion IV y el colorista, también español, Tomeu Morey. Quienes han introducido en el número #117 de Batman (a la venta esta semana) la confirmación de la relación entre Harley Quinn y Poison Ivy. Consolidación de una relación que anunciaba Jiménez en su twitter compartiendo la página con el beso a página casi completa. Beso, y tweet, que revolucionaron las redes porque YA ERA HORA que esto ocurriera en la serie principal.
En los últimos meses DC está avanzando mucho en sus series en cuanto a visibilidad de la diversidad. Sin embargo, como empresa, todavía le queda mucho por avanzar. Desde Sala de Peligro esperamos que los avances continúen no sólo de la mano de los equipos creativos, que lo están haciendo maravillosamente bien, sino también por parte de los directivos. Y en cuanto a Harley Quinn y Poison Ivy, felicidades por una relación más que merecida de la que esperamos salgan muchas historias que disfrutar como lectores.
