Los 4 Fantásticos de Roger Corman, la película que Marvel quiso que desapareciera

Hollywood puede ser un lugar sumamente cruel. La industria de los sueños también fabrica las pesadillas. Y toda la ilusión que se pueda tener antes de que comenzar una carrera, puede destrozarse impunemente, sin que puedas hacer nada, de forma rápida y dolorosa.

Para una persona que llega, hay otras cincuenta que se quedan por el camino. No es arriesgado decir que la industria cinematográfica es un entresijo muy complicado en el que las traiciones y los conflictos van que vuelan.

Esta es la trágica historia de la película sobre Los Cuatro Fantásticos producida por Roger Corman. Es un proyecto extraño ya desde su concepción hasta el último momento. Es una anomalía propia de una película que no debería haber existido.

A día de hoy quedan una serie de incógnitas por resolver que alimentan todavía más el halo de leyenda detrás de esta producción. Todas esas circunstancias son algo que no han llegado a darse antes y es muy difícil que se vuelva a encontrar algo remotamente similar con una franquicia a esta escala. Nadie parece saber con certeza qué sucedió con esta película. Y aquellos que sí que lo saben, no han querido pronunciarse al respecto.

Por ese motivo, quedará como una de esas películas malditas y apócrifas de los personajes de Marvel. Pero, a diferencia de otras, que sí que han recibido un cierto reconocimiento oficial (ahí está el documental del Spider-Man japonés en Disney+), esta obra estaba destinada a quedar en el olvido. Y sigue buscándose eso.

El símil que mejor podría definir toda lo que condujo a la materialización película es el Titanic. Pero si los inversores del barco fueran los responsables de su hundimiento. Nadie de dentro está informado de que se van a hundir y tratan de hacerlo lo mejor posible. Pero ningún esfuerzo iba a ser útil porque, pasara lo que pasara, el final iba a ser el mismo: la desaparición.

Así pues, para tratar de aportar algo de luz ante este proyecto, se va a proceder a estudiar las tres partes del proceso.

La preproducción

El origen de esta producción, no tiene nada de extraordinario. No hay naves espaciales ni contactos con el cosmos. Ni siquiera hubo estrellas. En 1983 Bernd Eichinger, CEO de Neue Constantin (la productora más grande de Alemania. En esos momentos era conocida por ser la responsable de La Historia Interminable), se reúne con Stan Lee en su casa de Los Ángeles para poder conseguir la opción de compra de los derechos producir la película de Los Cuatro Fantásticos. Bien es conocido el interés de Lee de conseguir producciones de sus co-creaciones porque no solo le reportaría beneficios, si no que se conseguiría una visibilización para este medio. No hubo acuerdo, porque los derechos de la Antorcha Humana pertenecían a Universal desde 1977.

A pesar de que los grandes estudios estaban pujando, realmente no veían la posibilidad presupuestaria de realizar una película con estos personajes. Finalmente, se los quedó Neue Constantin tres años después (circa 1986), tras recuperar los derechos de La Antorcha Humana. Consiguieron adquirir la opción por un precio aproximado de 250.000 dólares. 

Corte a: 1992. La opción expiraría en el 31 de diciembre. Neue Constantin, en todo este tiempo, no ha conseguido encajar una producción con estos personajes. Ante esta circunstancia, la productora pidió a Marvel una prórroga de la opción, cosa que le fue denegada. Eso les dejaba dos opciones: o hacían una película in extremis, o perdían la posibilidad de hacer una para siempre.

En palabras de Stan Lee en el artículo de 2005 Fantastic Faux!:

“Este tipo (Eichinger) tenía los derechos de hacer una película de Los Cuatro Fantásticos desde hacía 15 años. Y, finalmente, iban a expirar. Si no hubiese empezado a rodar en diciembre, habría perdido la opción.  ¡Y aun así quiso hacer la película! Se las apañó para lograr hacerla rápidamente con un presupuesto de 98 dólares para poder mantener los derechos.”

Marvel, en el contrato, no tenía ningunas condiciones presupuestarias mínimas para hacer la película. Se sobreentendía que una película de superhéroes necesitaba unos mínimos de para lanzar algo en condiciones. Pero no estaba por escrito. Debido a ello, la única opción viable para Neue Constantin es realizar una película gastándose el menos presupuesto posible y rodada con la mayor eficacia posible.

Como tantas otras producciones de una escala pequeña, necesitaba acceder a una co-producción. Especialmente si se tiene en cuenta que Neue Constantin es una productora radicada en Alemania y centrada, en ese momento, en la industria europea. Contactaron con la Troma de Lloyd Kaufman (y que recibiría a James Gunn tres años más tarde) pero quien se llevó el gato al agua no sería otro de Roger Corman.

No es de extrañar que acudieran a Corman. Es un reputado director y, sobre todo, productor de películas de serie B. Su nombre está ligado a la Historia del cine, puesto que ha sido el mentor de nombres como Martin Scorsese o Francis Ford Coppola. Además, es alguien que ha sabido entender los cambios sociales y adaptarse con ellos a lo largo de las décadas. A su vez, es alguien que ha tocado diversos géneros adelantándose e influyendo al cine producido por los estudios. Posee un legado y es una garantía de que su producción llegará a buen puesto. Pero, por encima de todo, se jacta de no haber perdido un dólar haciendo cine y nadie rueda con tanta velocidad como él. No había un colaborador mejor para Neue Constantin. Tan solo consiguieron reunir un millón de dólares de presupuesto. Ni más ni menos.

El legendario productor, que ha pasado por títulos dispersos y dispares, terminó diciendo que esta fue la producción más extraña en la que ha trabajado jamás. Que ya es decir…

En cualquier caso, tenían tres meses de margen para comenzar a rodar. Corman quiso retrasar lo máximo posible el inicio de rodaje para tener tiempo para prepararlo todo bien, pero Eichinger tenía otros planes completamente distintos. Ambos alcanzaron el acuerdo de empezar el 26 de diciembre de 1992, a cinco días de que expirase la cesión. Comenzaron a rodar el 28 de diciembre, a tan solo tres días de que expirase el contrato.

No tardarían en encontrar guionistas inexpertos. Se escribió en paralelo al proceso de casting. Lógicamente, no pretendían acceder a grandes estrellas y aun así se les presentó un primerizo Mark Ruffalo para interpretar al Doctor Muerte. No le concedieron el papel.

A quienes sí que consiguieron encontrar son a actores secundarios y semiamateurs que conformarían el reparto. Ralph Bellamy sería Mr. Fantástico, Rebecca Staab sería la Chica Invisible, Jay Underwood sería la Antorcha Humana y Michael Bailey Smith, sin apenas experiencia como actor, sería Ben Grimm.  Y el antagonista no podría ser otro que el Doctor Muerte, a quien daría vida Joseph Culp. Es a lo máximo que se podía aspirar con un pago de 3.500 dólares semanales.

El director designado para levantar el proyecto Oley Sassone, especializado en la realización de videoclips. No tuvieron que hacer una búsqueda demasiado minuciosa, porque era un realizador que ya estaba dentro de la maquinaria de Corman. Con él había dirigido Obligado a Luchar. Seguramente, su trabajo más conocido sea este:

https://www.youtube.com/watch?v=9kKMOAr4iA8

En cualquier caso, sí, las condiciones eran deplorables, lo cual era un indicativo de cómo se iba a zanjar el asunto. Ahora bien, el cebo para todos los implicados es que esta era una película basada en una franquicia superheroica relativamente reconocida en un momento cercano al éxito del Batman de Tim Burton. Todos los miembros del equipo lo vieron como una gran oportunidad para abrirse paso en Hollywood. Pero no se imaginaban lo que sucedería a continuación.

Como no podía ser de otra manera, la película se rodaría en el decadente Concorde Studios, lugar de rodaje habitual para Corman.  Ubicada en Venice (Los Angeles) es más parecido a una nave industrial a un gran set de rodaje.

La producción

El rodaje se hizo en tan solo 21 días. Teniendo en cuenta que los rodajes de este tipo de películas suelen prolongarse meses, uno se puede imaginar con todo lo que tuvieron que lidiar.

Los problemas presupuestarios se hicieron notar en todo momento y hubo cierto desencanto durante el proceso. A pesar de las buenas sensaciones iniciales con los efectos prácticos, el diseño de La Cosa y de Doctor Muerte, no se tardó en ver las costuras en el propio set.

Los actores, rápidamente, percibieron que todo era cutre pero lo que les motivaba era estar en una producción con proyección potencial. Stan Lee les visitaba en el set todos los días. Conversaba con ellos y les decía que eran tal y como los había imaginado. Parecía que todo iba bien, dentro de las circunstancias precarias y de las jornadas maratonianas de 12 horas.

Hasta que Stan Lee comenzó a criticar públicamente la película. Como es lógico, en el set eso sentó como una puñalada trapera. Y, según han comentado algunos testimonios, como los de este documental, eso les motivó todavía más a hacer el mejor trabajo que pudieran:

https://www.youtube.com/watch?v=OzhmBdqzuJI

Hacer una película siempre es algo muy difícil. Da igual que se esté haciendo la obra maestra o un trabajo más o menos mediocre, exige la misma cantidad de esfuerzo. Nadie hace un mal producto a sabiendas que es malo. Incluso en la serie B, siempre se intenta aportar algo. Y, como es este caso, si algo no termina de funcionar, muchas veces no tiene que ver con las capacidades creativas de nadie, sino a factores externos que entorpecen todo.

Postproducción

El director tuvo que combinar todo el proceso con otros empleos y alquilaba y/o pedía prestado todo el equipamiento con el que se rodó y se montó el filme. No es nada nuevo en una producción indie, pero sí es una de superhéroes. Con todas las exigencias que ello contrae. El no poder dedicarte plenamente a un proyecto de este calado siempre es algo frustrante y eso es inevitable que permee en el trabajo. Especialmente si no puedes confiar plenamente en las aportaciones del resto del equipo. 

Debido al presupuesto, la gente que debía hacer los efectos especiales eran unos absolutos inexpertos que realizaron un trabajo completamente lamentable. A pesar de que se pretendió que casi todo fuera físico, algunas tomas como las de La Antorcha Humana tuvieron que ser digitales para no poner en riesgo al equipo

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Como se podía ver venir, el resultado no era algo presentable, así que el responsable de departamento debió terminarlo él solo a toda velocidad. Todo ello antes del boom del CGI, cosa que habría facilitado mucho la vida a ese departamento.

Afortunadamente, otros aspectos sí que tuvieron un mayor cuidado. A pesar de que la banda sonora recicló algunos temas de anteriores películas producidas por Corman, los compositores invirtieron 6.000 dólares de su propio dinero para poder grabar una banda sonora original con orquestra. Alquilaron Capital Records para poder tener un sonido adecuado.

Otro elemento a favor de esta producción es que el montaje fue relativamente sencillo. No ha habido constancia de que fuese la parte más complicada del proceso, a pesar de la presión con la que se realizó todo el rodaje. No parece que hayan surgido conflictos creativos de ninguna índole. Lo peor estaba por llegar.

En el verano de 1993 se comenzó a hacer la gira promocional. En los cines donde se proyectaba la nueva producción de Corman se emitió este tráiler:

https://www.youtube.com/watch?v=r_X5C6e3ZeY

Para sorpresa de nadie, los fans comenzaron a emocionarse viendo a los personajes que, por aquel entonces, llevaban treinta años leyendo y amando, llevados al cine. Este filme podría haber sido todo un acontecimiento si hubiese tenido el apoyo de Marvel. El único gesto por parte de La Casa de las ideas con la promoción del filme fue negar la existencia de este filme o decir que este es un piloto de una serie de televisión que no llegaría a emitirse.

Eso no impidió que los actores hicieran sesiones de firmas en distintas convenciones en las que se les prometía a los fans por activa y por pasiva que la película iba a molar. También se llevaron a cabo determinados screening de algunas escenas a un público selecto.

A pocas semanas del estreno en 1994, llegaron las malas noticias. En forma de esas llamadas que nadie querría recibir nunca. Eichinger contactó con los actores para decirles que la película jamás llegaría a estrenarse y que no se podía hacer nada.  Ese jarro de agua fría sentó al equipo como una patada. Todos lo digirieron desde la incredulidad y el enfado. En distintas entrevistas han expresado la pregunta del millón: Si esto iba a ser así desde un principio, ¿Por qué no se les avisó con antelación? Sigue siendo un misterio sin resolver.

Stan Lee, en una entrevista posterior, mostró algo de remordimiento:

“Lo trágico fue que la gente involucrada en la película no era consciente de que la película nunca tuvo el propósito de ser enseñada a nadie. Ningún ser humano debería haber visto la película”

Quien tampoco supo nada, al parecer, fue el propio Roger Corman. Pero no presentó demasiada oposición respecto a esa decisión, puesto que recibió una compensación económica por el agravio.

Y es ahora cuando las cosas se vuelven más resbaladizas. Y es que las distintas partes cuentan distintas historias. Los hechos serían los siguientes:

  • Avi Arad entra en el juego.

El productor y ejecutivo de la Marvel antes de que Kevin Feige tomara las riendas mostró interés en levantar una película en condiciones de Los Cuatro Fantásticos poco después de que esta obra de cerrase. Según parece, él negoció con Eichinger la adquisición de derechos para poder conseguir proporcionárselos a Fox, quien se impuso como la socia adecuada para los intereses de Arad.

Según cuenta Eichinger, Arad dice haberle encantado la película que rodaron. Eso le dijo. Pero actuó con la intención de hacer que desaparezca completamente del mapa. Hasta tal punto que parece que él fue el principal responsable de que no se estrenara. Hubo una reunión en la que le compró del filme a cambio del presupuesto de la película. Y Eichinger accedió.

El productor alemán, por su parte, retomó relaciones con Chris Colombus. Desde un principio, antes de comenzar este proyecto, llevaba tanteando la posibilidad de una colaboración para levantar un filme de Los Cuatro Fantásticos. El mayor impedimento siempre fue el presupuesto. Y las negociaciones se quedaron en el limbo puesto que estaba a punto de expirar el contrato de cesión de derechos. Y es ahí cuando Eichinger comenzó a contactar con Corman.

  • Desaparición del negativo

Una noche después de que todo saltara por los aires, Sassone, se cuela de noche en las oficinas de Corman para recuperar los negativos del filme. Sentía que le habían arrebatado meses de trabajo duro y que le correspondía tener acceso al filme, cosa que también se le había denegado.

Pero se encontró con que no quedaba nada de Los Cuatro Fantásticos. Se había esfumado. Alguien tiene que haber quemado cualquier rastro de la película. Todavía se desconoce quién fue el responsable. Hay acusaciones cruzadas entre Corman, Eichinger, Avi Arad y otras partes de Marvel. Evidentemente, no hay ninguna prueba que indique la culpabilidad de nadie.

Film burn from the one side. Animation.

Habiendo dicho esto, lo cierto es que años más tarde Avi Arad se jactó de haber quemado la película. Evidentemente, la existencia de este filme jugaba en su contra puesto que afectaba directamente al prestigio de la franquicia de cara a la producción de una película de gran presupuesto.

Y al poco tiempo, comenzaron a entrevistarse con directores y a circular rumores de distintos posibles actores implicados. Todo ello hasta llegar al estreno de 2005.

  • Aparición de copia pirata

Nadie sabe cómo ni por qué, pero con la aparición de internet comenzó a circular una copia de la película. Se podía adquirir en determinadas convenciones y extendería como la pólvora.

No hay un año exacto en el que se fecha el inicio de este fenómeno, pero es anterior al estreno de la película de 2005. En cualquier caso, es la victoria final de los implicados frente a los grandes estudios.

La película pudo ser vista, lo cual fue todo un alivio para los actores y, sobre todo, para un indignado y resignado director. Y, evidentemente, las críticas no han sido en absoluto benévolas. Pero no ha habido una película de superhéroes igual.

No es el medio legal para acceder a él, pero no es la única copia circundando por Youtube. Y tampoco nadie que haya hecho el más mínimo esfuerzo por reclamar los derechos y retirar el video. Así que aquí se puede acceder a una copia de la película:

https://www.youtube.com/watch?v=SHlBsLQ4BQs

Este artículo se ha realizado en base a la información recabada. Cabe destacar que al final lo que queda de este proyecto son testimonios y versiones que, en ocasiones, son contradictorias. Con esa información se ha tratado de establecer una cronología de acontecimientos. Pero, evidentemente, algunos hechos pueden ser erróneos. Dejando eso claro, cuando una realidad es inaccesible en su versión completa, solo se puede imprimir la leyenda. Especialmente cuando se está hablando de mitología de la cultura popular.

Lo que se puede sacar en claro sobre esta lección es que Hollywood es un lugar complicado, lleno de mentiras, engaños y traiciones. Y son particularmente dolorosas cuando se tratan de franquicias centradas en gente virtuosa destinada a grandes proezas. Esta jungla un lugar impredecible y estimulante. Y, por ende, peligroso y hostil.  

Así que sí, definitivamente, siempre es difícil que las cosas salgan como uno desea. Pero eso no es motivo para el desaliento. La vida da vueltas. Y nunca puedes llegar a conocer por dónde te conducirá hasta que no se llegue al destino. Y es muy difícil que el viaje no valga la pena. Que nos quiten lo bailado.