| Es 2017 y la humanidad está pasando por sus momentos más duros. Una epidemia asoló a toda la población, y aunque los científicos consiguieron desarrollar una vacuna para ella, su efecto secundario ha sido casi peor: crea adicción. Con este panorama, el grupo mayoritario se hace con las reservas de vacunas e impone el típico y mortal torneo de conducción como única forma legal de conseguir la medicina. Así comienza Fuel Overdose, que nos llevará a competir contra otros amigos –o enemigos– en carreras frenéticas desde vista cenital. |