Muchos estaréis familiarizados con los sistemas NVIDIA G-Sync, AMD Free Sync o VESA DisplayPort Adaptive-Sync, que nos permiten que el monitor funcione a diferentes tasas de refresco sincronizándose con la gráfica para eliminar el tearing y otros defectos gráficos.
Un cuarto sistema menos conocido es Variable Refresh Rate o VRR que hoy es noticia porque Microsoft ha decidido añadirlo en las opciones gráficas de la última actualización de Windows 10 (versión 1903) para permitirnos que todos los juegos DX11 a pantalla completa puedan funcionar con esta tecnología y tener tasas de refresco variables.
Para poder utilizar esta nueva característica los jugadores necesitarán tener Windows actualizado, un monitor compatible con G-Sync o Adaptive-Sync y una gráfica con drivers WDDM 2.6 o superior que soporte G-Sync/Adaptive-Sync y esta nueva característica.
Esta compatibilidad está desactivada por defecto y deberá activarse de forma manual. Además, no funciona con DX12 así que los juegos con esta API que no sean compatibles con GSync/Free Sync no funcionarán con esta opción.