Los peores temores de todos los que querían hacerse con el nuevo Galaxy Fold se han hecho realidad.
Como recordaréis, esta mañana la compañía decidió cancelar el evento de presentación del teléfono plegable en algunos países entre los que se incluía España después de que algunos periodistas americanos encontrasen ciertos problemas en el funcionamiento de la pantalla con los terminales de prueba para realizar análisis del producto.
Tras encontrar este fallo Samsung ha decidido, finalmente, retrasar el lanzamiento del producto que iba a llegar a las tiendas el próximo viernes 26 de abril a un precio de 2000 euros.
En el texto Samsung apunta a que tras probar el dispositivo muchas personas "han destacado su gran potencial pero algunos también nos han indicado que necesita algunas mejoras extra para garantizar la mejor experiencia posible para el usuario. Para poder analizar con detalle estos comentarios y realizar más pruebas internas hemos decidido posponer el lanzamiento de Galaxy Fold".
Samsung no dice en el comunicado cuándo tiene previsto lanzar el dispositivo aunque aseguran que durante "las próximas semanas anunciaremos la fecha oficial de lanzamiento".
Además, también habla del incidente de los periodistas con las pantallas. Tras un primer análisis parece que "podrían deberse a impactos en las áreas más expuestas de la bisagra, su parte superior e inferior. También hemos descubierto un incidente en el que sustancias encontradas en el interior del dispositivo afectaban al rendimiento de la pantalla".
La marca también asegura que van a tomar medidas para reforzar la protección de la pantalla y mejorar la guía sobre su cuidado y uso, incluyendo la capa protectora para que, cuando salga a la venta, sus clientes puedan obtener el máximo rendimiento de su Galaxy Fold.
Un traspiés resuelto con una decisión acertada
Desde luego, se trata de un gran traspiés de Samsung de cara al lanzamiento de su teléfono más importante en años aunque, si me permitís opinar, es preferible que hayan sido valientes reconociendo el error (otra cosa es la gravedad del no haberlo detectado) y retrasando el lanzamiento del producto para que los usuarios finales no se vean afectados por un buen puñado de modelos defectuosos tal y como pasó en su momento con el Note 7 y sus baterías.
De los errores se aprende.
