El crecimiento de los drones tanto para fines de ocio como para fines comerciales (o no tan lícitos) ha subido como la espuma durante los últimos años, obligando a gobiernos a modificar las leyes para intentar proteger la privacidad de la población y reducir los problemas derivados en los aeropuertos o bases militares.
Con esta premisa, son muchos los programas y gadgets que se han ideado para atrapar o eliminar a los drones que invaden ciertos espacios aéreos y, entre ellos, nos encontramos con Drone Gun Tactical, un arma pensada especialmente para combatirlos.
Se trata de una especie de fusil que nos permite interceptar la señal de los drones siempre que estén a nuestra vista a 1 kilómetro de distancia, provocando que hagan un aterrizaje de emergencia, vuelvan al punto de inicio marcado por GPS o, en el caso de los drones más simples, que caigan en picado estrellándose contra el suelo para acabar con su existencia.
El fusil incluye dos baterías de 30 minutos de duración, pesa algo más de 6 kilos y es compatible con un complemento que, además de interceptar la señal de control del dron también es capaz de anular su GPS.
De momento, el arma es ilegal en casi todos los países incluyendo a Estados Unidos, lugar en el que el Drone Gun Tactical aún no ha sido regulado por la Comisión Federal de Comunicaciones no estando, por lo tanto, disponible para su venta de forma legal.
