El pasado mes de agosto, Lee Jae-Yong, el vicepresidente y heredero del grupo Samsung, fue condenado a 5 años de prisión por delitos de soborno, perjurio, ocultación de bienes y malversación de fondos.
Tras la condena, Lee decidió recurrir al tribunal de apelación para intentar librarse de la cárcel, algo que ha conseguido, según El Mundo, en el día de hoy, con la justicia coreana fallando a su favor reduciendo su sentencia de cárcel a una pena en suspenso por lo que el heredero de la marca no pisará la cárcel surcoreana.
Lee, según la justicia coreana, era beneficiario de unos sobornos por un valor de 32 millones de euros a Chou Soons-sil, amiga de la expresidenta Park que intercedió a favor del heredero de Samsung para aprobar la fusión de dos filiales de la marca, algo que reforzaba la posición de poder de Lee.
El heredero de Samsung, de hecho, lleva dirigiendo la compañía desde finales del 2014 después de que su padre y presidente, Lee Kun-hee, sufriera un infarto que le dejó prácticamente incapacitado.
