Rusia es un país especial en casi todos sus ámbitos y frentes. El hogar de una de las vacunas más eficientes contra el coronavirus, y en el que aparecen perros azules en las calles es también uno de los más desconocidos para ojos del gran público. Tanto es así que, más allá de sus avances tecnológicos, todavía pueden sorprendernos con una modalidad deportiva que nos ha dejado a cuadros: el Regball. (vía Diario Sur).
Regball: el deporte que está a medio camino entre el baloncesto y la lucha
Este formato de basquet con más contacto y movimientos de bloqueo, bebe mucho de la lucha grecorromana más clásica, y está ampliamente instalado en Rusia y en muchas de las antiguas repúblicas soviéticas. Su formato es muy directo y simple, invitándonos a competir en dos equipos compuestos por cinco jugadores cada uno, cuyo objetivo no es otro que el de encestar en la canasta rival. Hasta aquí, igual que en el baloncesto. Pero al contrario que en la vertiente estándar de este problema, no hay pasos, no hay dobles ni encontramos demasiadas penalizaciones al contacto. Lo único que hay en común son los saques de banda o de fondo.
De esta manera, cada uno de los jugadores busca evitar el avance del equipo contrario, bloqueando a los jugadores rivales mientras los sujetan de la cintura para arriba sin importar cómo ni de qué manera lo hacen. Hay cierta libertad en este formato de agarre, el árbitro y los jueces permiten el contacto, pero hay ciertas limitaciones: está prohibido sujetar por las piernas y empujar desde atrás y, por supuesto, se fomenta el juego limpio. Nada de insultos, provocaciones ni cosas por el estilo. Si no te atienes a las reglas y al buen comportamiento en la cancha, puedes acabar sancionado con una expulsión de unos cincos minutos o la descalificación total en el caso de que la cosa vaya a mayores.
En Rusia, el Regball tiene una federación nacional muy poderosa, que rige las normas y dirige la celebración de los campeonatos y ligas, y que goza de un escudo increíble con dos osos peleando con una canasta en medio. Aunque no lo creamos, en el país tiene un tirón enorme, es un deporte bastante seguido, y aunque no llega a las cuotas de importancia del baloncesto o el fútbol, tiene seguidores muy importantes como el luchador de la UFC y campeón de peso ligero Khabib Nurmagomedov. Sin ir más lejos, Nurmagomedov ha estado entrenándose con este deporte para permanecer en forma y saber cómo se las puede gastar un rival en contacto directo. ¿Lo veremos en España? Todavía es pronto, pero en la época de las redes sociales no sería de extrañar que este formato tuviera más aceptación tras el boom de estos días, por lo que algunos clubs deportivos podrían comenzar a implementarlo en sus actividades.
