Disney no quiere saber nada de Johnny Depp. El actor, que habría ocasionado pérdidas millonarias a la empresa en uno de sus últimos rodajes, ha sido declarado persona non grata en las producciones de la compañía, siendo rechazada su oportunidad participar en la saga Piratas del Caribe. La corporación del ratón que lleva años planteando un reinicio de su licencia cinematográfica, no quiere que esté involucrado de ninguna forma en ella. Los usuarios y seguidores del actor, por otra parte, sí se han organizado para pedir su vuelta.
Su vida personal ha echado por tierra todos los planes de volver a contar con él
En los últimos años, el actor ha pasado y sufrido una serie de batallas personales en los últimos años, y perdiendo incluso una demanda pública contra un tabloide británico que alegó que era un "maltratador". La separación del intérprete de Amber Heard y todo lo que acabó rodeando a este turbio caso, ha terminado con su salida de la producción de Warner Bros. Animales fantásticos como el mago Grindelwald. Según los informes, Depp habría conseguido 16 millones de dólares por su papel pese a haber rodado un único día en el set. En este escenario, Margot Robbie, actriz de Aves de presa, se postula como la nueva gran protagonista de Piratas del Caribe.
Pero aquí subyace el problema. Durante las primeras etapas de la producción, el productor Jerry Bruckheimer ha comentado de forma pública y privada su deseo de incluir a Depp en la próxima película de Piratas del Caribe, aunque solo sea en un cameo que de coherencia a la saga y ayude a encauzar el futuro de la misma. Según The Hollywood Reporter, "Disney se ha resistido a la idea". La major se ha opuesto al concepto, pues supondría un enorme riesgo de reputación a la saga, sobre todo porque hablamos de una de las licencias más familiares y blancas de todo el catálogo de la compañía. Disney ha apuntalado su apuesta: Robbie es un intento claro de llevar Piratas del Caribe en una nueva dirección.
La decisión viene de lejos, pues no querían contar con Johnny Depp desde mucho antes del juicio en el Reino Unido. Si bien los productores han deseado presentar la nueva entrega como el punto final a las aventuras del Capitán Jack Sparrow, Disney no ha querido ni siquiera nombrarlo o considerarlo de cara a su aparición en los primeros guiones y borradores de la futura secuela. Los tiempos han cambiado. En 2015, Disney nombró a Depp una de sus leyendas por sus papeles en varias películas, pero sus constantes escándalos lo han alejado de un futuro común con la empresa cinematográfica.
