Keith Raniere, el líder del culto sexual NXIVM, ha sido condenado a 120 años de prisión. Raniere fue acusado de cargos como tráfico sexual, conspiración, trabajos forzosos y crimen organizado. El fundador de la secta, que en los últimos años había comenzado a extenderse de forma evidente en determinados círculos de Hollywood, había abusado sexualmente a distintas mujeres luego de captarlas para sus intereses. El verano pasado, Allison Mack, la actriz de Smallville llegó admitir que participó en una red de prostitución ilegal, convirtiéndose en una de las caras más conocidas del caso.
Una secta sexual que había calado hondo en círculos de Hollywood y la política de USA
Como informan en Variety, Raniere ha sido acusado de crear una sociedad secreta solo para mujeres dentro de la organización NXIVM, un pequeño grupúsculo llamado DOS que se dedicaba a reclutar mujeres que, a posteriori, eran forzadas a mantener relaciones sexuales con el líder y otros miembros influyentes dentro del grupo. Además, eran forzadas a tatuarse y grabarse las iniciales en la piel, demostrando ser propiedad de su jefe o líder y estar dispuestas a acostarse con él en cualquier momento a cambio de alojamiento, trabajo y otros premios. "Me sentía un pedazo de carne, una esclava sexual a la que habían lavado el cerebro", confirmaba una de las testigos del caso. El control de DOS y de NXIVM en estas mujeres era omnipresente.
Una de las mujeres dijo que Raniere la castigó cuando rompió su dieta de 400 calorías diarias al comer semillas de calabaza, pues todas ellas debían tener una línea física idéntica. Raniere, que ha sido también acusado de abusos sexuales, habría violado a una de las mujeres cuando tenía solo 15 años, dejándola embarazada y obligándola a abortar. Los abogados de Raniere pedían 15 años por los cargos emitidos por la acusación, habiéndose declarado inocente de todos ellos antes de leerse la sentencia. "Intentaste destruir a mi familia poniéndome en contra de mi propia madre, diciéndome que era una psicópata", explicaba la actriz de Dynasty, Catherine Oxenberg, quien dice que fue atraída a la organización, que se vendía como una forma de rehabilitación y autoayuda de cara al público, cuando tenía solo 19 años.
NXIVM ha atraído la atención del público en general pues Hollywood ha realizado documentales y una miniserie de Starz, Seduced: Inside the NXIVM Cult. La secta operaba de una manera clara: las mujeres que ingresaban en ella tenían que revelar secretos, datos bancarios e información sensible, así como eran vejadas y les hacían fotografías desnudas. En el caso de destapar a la secta o contar lo que se hacía entre los muros de su sede, este tipo de información se filtraría a la prensa y sus familiares, buscando una manera de coartarlas a cometer traición al líder o los miembros de la organización. Allison Mack, actriz que os comentábamos antes, seleccionaba con especial cuidado a las candidatas en función de su apariencia física, posición social o estatus laboral. A cambio de estas gestiones, afirma el Departamento de Justicia de Estados Unidos, la actriz recibía una recompensa económica y la posibilidad incluso de tener sus propios beneficios sexuales.
