"La vida se abre camino". No importa los años que pasen, puesto que la célebre frase de Ian Malcolm de Jurassic Park, interpretado por Jeff Goldblum hasta en la reciente Jurassic World: Dominion, se puede ir aplicando a diferentes campos. En 1930 se dio por extinta una especie de cucaracha carnívora en Australia. Sin embargo, un estudiante de biología encontró en la isla Lord Howe una nueva familia de esta especie que desde ya mismo se ha convertido en nuestra peor pesadilla. Lo más curioso es que dar con este tipo de cucaracha de nuevo fue completamente accidental, con un gesto tan sencillo como el de levantar una roca bajo un árbol. "Durante los primeros 10 segundos más o menos, pensé 'no, no puede ser'", decía Maxim Adams, el estudiante en cuestión.
La cucaracha carnívora se alimenta principalmente de madera, no es peligrosa
El descubrimiento se realizó bajo un enorme árbol de higuera de Bengala. "La supervivencia es una gran noticia, ya que han pasado más de 80 años desde que se vio por última vez", explica Atticus Fleming, Atticus Fleming. Esta cucaracha sin alas mide entre 22 y 40 milímetros de largo y están bañadas por un color metálico, aunque puede tener también un color más bien rojo y negro.
Aunque se la conozca como 'carnívora', este insecto se alimenta principalmente de madera. La también conocida como Panesthia lata, se extendió por todo Lord Howe hasta la llegada de las ratas en 1918.
"Son nuestra propia versión de los pinzones de Darwin, separadas en pequeñas islas durante miles o millones de años, desarrollando su propia genética única", prosigue Fleming. De momento solamente se ha encontrado una pequeña familia de ese tipo de cucarachas durante una exploración en North Bay, en una playa bastante aislada, aunque tiene acceso por tierra y por mar. La noticia ha sacudido el mundo de las ciencias biológicas, puesto que se trata de un animal que se daba por "perdido". Con esto ahora se sabe que, probablemente, habrá más familias campando a sus anchas en diferentes áreas, lo que en cierto modo preocupa un poco. Mientras solo se coman la madera, no hay problema.
