Seleccionar las 15 mejores películas de superhéroes es una tarea complicada, puesto que hay mucho material dentro de ese género y quedarse con tan solo un número tan específico de largometrajes no es para nada sencillo, y más teniendo en cuenta la cantidad de cintas que se han lanzado en este siglo con respecto dicha temática. Pero hay algo todavía más difícil: escoger cuáles son las peores. Y es que sí, hay mucha calidad dentro del género de los superhéroes, pero seamos sinceros, también hay un montón de malos largometrajes que es mejor dejar para el olvido.
Si bien ya os trajimos ese reportaje de las 15 mejores películas de superhéroes, ahora toca repasar de nuevo la lista de productos que componen el género en el celuloide y quedarnos solamente con las peores, con aquellas que no han conseguido salvarse de la quema en ninguno de sus sentidos. Siempre hay placeres culpables, por supuesto, y puede que en esta lista haya alguno de ellos, pero desde luego no merecen estar en otro ranking que no sea este.
20. Iron Man 2 (2010)
- Duración: 124 min.
- Director: Jon Favreau
A pesar de que Favreau lo hizo maravillosamente con la primera cinta de Iron Man (que se coló en nuestro top 15 de mejores películas de superhéroes de todos los tiempos), la secuela pinchó de mala manera. Robert Downey Jr. continúo brindando una excelente actuación de Iron Man, con Mickey Rourke como Látigo Negro, no impresionó ni la mitad que la cinta de 2008. Se estiró demasiado la idea de que Tony Stark iba a perder la vida (en la primera a causa de la metralla) y su salvación a modo deus ex machina de descubrir un nuevo elemento quedaba cogido por pinzas.
19. Thor: El mundo oscuro (2013)
- Duración: 112 min.
- Director: Alan Taylor
La trilogía de Thor dentro del Universo Cinematográfico de Marvel se salvó por Thor: Ragnarok, la entrega de Taika Waititi que convirtió al Dios del Trueno en un verdadero bufón, dándole a la cinta un toque de comedia que verdaderamente le sentó como un soplo de aire fresco. El mundo oscuro, sin embargo, presentó demasiados conceptos y fueron imposibles de plasmar en un único largometraje, haciendo que el film se convirtiera en un "quiero y no puedo" de manual. Hemsworth aquí seguía sin conectar del todo con el personaje.
18. La liga de la justicia (2017)
- Duración: 121 min.
- Director: Joss Whedon (Zack Snyder)
Si hacéis buena memoria, en nuestro top 15 de mejores películas de superhéroes pusimos La Liga de la Justicia de Zack Snyder, la versión completa del director. Y lamentablemente aquí vamos a tener que colocar la versión de Whedon, porque quedó más que claro que los personajes de DC (por lo menos prácticamente todos ellos) no pueden tener el mismo tono que vemos en los largometrajes de Marvel. Y eso es debido, en parte, a que Snyder marcó muy a fuego cómo sería el universo de DC en el celuloide. Además, ese bigote de Henry Cavill eliminado por CGI todavía nos hace daño.
17. X-Men: Fénix Oscura (2019)
- Duración: 116 min.
- Director: Simon Kinberg
Quién hubiera imaginado que la saga de X-Men tomaría un rumbo totalmente inesperado con la salida de Singer de la dirección. Fénix Oscura sigue grosso modo los pasos de X-Men: Apocalipsis y se centra demasiado en la destrucción general del mundo de los mutantes en lugar de hacer lo que se hizo en la tercera entrega de la saga X-Men original, que era construir un drama alrededor de los personajes principales mirando incluso en lo más profundo de Jean Grey. Fénix Oscura es solo para los verdadero fanáticos de los mutantes.
16. Linterna Verde (2011)
- Duración: 114 min.
- Director: Martin Campbell
Hasta el propio Ryan Reynolds se ha reído de su propia interpretación en Linterna Verde. Que el director de Casino Royale dirigiese esta película hasta tiene delito, puesto que solamente se salva por sus efectos especiales. La trama está plagada de cierta incoherencias y el papel de Reynolds no convence en absoluto.
15. Spawn (1997)
- Duración: 96 min.
- Director: Mark A.Z. Dippé
No es que Mark A.Z. Dippé haya tenido jamás una gran carrera como director, pero Spawn fue una oportunidad perdida para el cineasta. Spawn terminó aquí convirtiéndose en una especie de comedia involuntaria en lugar de aprovechar la parte oscura y de género, casi hasta de serie B, que se podía estirar de los cómics. Esperemos que Jamie Foxx brinde una mejor versión.
14. Juez Dredd (1995)
- Duración: 95 min.
- Director: Danny Cannon
Aunque muchos estén encantados con tener a Sylvester Stallone dentro del universo de Guardianes de la Galaxia en Marvel Studios y como el Rey Tiburón en la Escuadrón Suicida de James Gunn, lo cierto es que el actor ya pasó por este mundillo antes de todo este gran boom de superhéroes. En los noventa se puso en la piel del Juez Dredd, pero sin grandes resultados. Como una versión más violenta de Robocop (prácticamente), la actuación de Stallone aquí es para olvidar (de hecho está enterrada) y la dirección de Danny Cannon tampoco dejó nada para el recuerdo.
13. La liga de los hombres extraordinarios (2003)
- Duración: 110 min.
- Director: Stephen Norrington
Una lástima, porque fue la última película en la que pudimos ver a Sean Connery. Adaptar a Alan Moore siempre es un reto, y sino que se lo pregunten a Snyder y su Watchmen. La liga de los hombres extraordinarios peca de casi lo mismo que el Escuadrón Suicida de David Ayer: una presentación de personajes precipitada y una trama con el objetivo de salvar el mundo que no termina de cuajar con las superhabilidades que poseen los protagonistas. Eso sí, es perfecta para los amantes de los monstruos clásicos.
12. Escuadrón Suicida (2016)
- Duración: 123 min.
- Director: David Ayer
David Ayer no supo dar en el clavo presentando a este grupo de personajes que, más que superhéroes, podemos catalogar como supervillanos. Con una introducción demasiado extensa y una presentación de personajes poco elaborada (parece que de cada uno se esté leyendo un manual de instrucciones) Escuadrón Suicida se queda a medio gas en todo, presentando un conflicto demasiado grande que en realidad tiene una solución extremadamente sencilla, que pone en duda hasta si era necesario realmente este equipo de "malos". Lo único bueno que se sacó de aquí fue la Harley Quinn de Margot Robbie.
11. The Punisher (1989)
- Duración: 89 min.
- Director: Mark Goldblatt
Dolph Lundgren tuvo mejor suerte con el boxeo en sus apariciones como Ivan Drago en la saga de Rocky y Creed. Esta olvidable de Punisher carecía de todo lo que hizo que el personaje de El Castigador de los cómics consiguiese fama de la noche a la mañana: un pasado oscuro, mucha violencia y una mala baba como pocos. Ser fuerte y poner caras serias no es suficiente, Lundgren.
10. Elektra (2005)
- Duración: 96 min.
- Director: Rob Bowman
Después de presentarse el personaje a través de la Daredevil de Ben Affleck, Jennifer Garner se aventura en solitario para dar vida a Elektra, la asesina más peligrosa del mundo. A pesar de que presenta ideas interesantes, la cinta de Bowman no termina de conectar correctamente todas sus partes del guión y el arco de Elektra se queda demasiado corto. Un buen conjunto de set pieces de acción, pero sin nada que contar detrás. O por lo menos nada interesante.
9. Los 4 Fantásticos (2015)
- Duración: 100 min.
- Director: Josh Trank
Los 4 Fantásticos no están encontrando su lugar en la gran pantalla. A pesar de los esfuerzos que se han realizado, brindando hasta tres largometrajes de corte blockbuster con estos personajes, el público no ha terminado de quedar convencido. Trank quiso alejarse aquí de las dos versiones anteriores, en las que teníamos a Chris Evans como la Antorcha Humana, y el resultado no fue precisamente bueno, dado que el tono oscuro y serio que se intentó brindar aquí fue fallido.
8. Spider-Man 3 (2007)
- Duración: 140 min.
- Director: Sam Raimi
Tobey Maguire perdió el respeto del público en la tercera entrega, con su curioso baile de malote comprando ropa una vez invadido por el simbionte de Venom. Spider-Man 3 es un caos se coja por donde se coja. Sam Raimi intentó introducir a diversos villanos en un mismo proyecto, para que la película abarcase más de lo que puede, y el resultado es un circo de los horrores que no tiene nada que ver con lo mostrado en Spider-Man 2 o en la primera entrega.
7. Batman y Robin (1997)
- Duración: 125 min.
- Director: Joel Schumacher
George Clooney, Arnold Schwarzenegger, Uma Thurman... El reparto de Batman y Robin contaba con la élite, pero por desgracia se convirtió en simplemente una película de Batman más sin ningún sello. Más allá del de los trajes con pezones que lucían Clooney y Chris O'Donnell. En un momento donde todo valía, Batman y Robin fue el eslabón que marcó los límites a los que se puede llegar en la ciudad de Gotham en la gran pantalla.
6. Catwoman (2004)
- Duración: 101 min.
- Director: Pitof
Halle Berry ha hablado de nuevo de Catwoman en un par de ocasiones recientemente. En una de ellas aseguraba que no volvería a meterse en la piel del personaje y, en la otra, que después de dirigir Herida ya sabía perfectamente lo que requería una película como Catwoman (en lo que respecta a ponerse tras las cámaras). La Catwoman de Pitof se coció en un momento en el que el cine de superhéroes tal y como lo conocemos se estaba empezando a gestar, las bases todavía estaban temblorosas, y el film de Berry fue uno de los conejillos de indias para ver por dónde había que llevar este tipo de productos. La crítica la destrozó y el público la odió. Para olvidar, realmente, pero perfecta para conocer los primeros pasos del género actual.
5. Superman IV: En busca de la paz (1987)
- Duración: 90 min.
- Director: 1987
La presencia de Christopher Reeve ya empezaba a mostrar grandes signos de agotamiento. La cuarta entrega de la saga fue en su momento demasiado forzada y se nota hasta en la propia actuación del protagonista, que no parece estar cómodo con su personaje después de tantos años dando vida a Superman en la gran pantalla. Y es que a veces hay que dejar de explotar las sagas, porque terminan rebajando calidad.
4. Ghost Rider: Espíritu de la venganza (2012)
- Duración: 95 min.
- Directores: Mark Neveldine y Brian Taylor
La primera entrega del Motorista Fantasma con Nicolas Cage como el actor principal tuvo un pase. A pesar de que tampoco fue bien acogida, grosso modo, tampoco se le dio demasiada importancia. Pero el problema vino con la secuela, con la que se estiró todavía más el chicle. Catalogada por algunos críticos como una serie Z que debería haber ido directa a versión de DVD. Palabras mayores que sentenciaron casi de por vida al Motorista Fantasma en la gran pantalla.
3. Supergirl (1984)
- Duración: 105 min.
- Director: Jeannot Szwarc
Si la crítica puso patas arriba a la secuela del Motorista Fantasma de Nicolas Cage, la Supergirl de Szwarc no se quedó corta. Se habla de la película como una imitación barata de Superman y como un producto que desde la propia producción sabían que no iba a llegar a ningún lado, y por ello contarón con Szwarc en la dirección, porque era barato. Supergirl no terminó de encontrar su camino en los ochenta, como muchos otros superhéroes en aquel momento. Por suerte, la ficción seriada actual con Melissa Benoist ha lavado la cara del personaje y la cinta ha quedado olvidada.
2. Capitán América (1990)
- Duración: 97 min.
- Director: Albert Pyun
Antes de que Chris Evans se enfundase en el traje del Capitán América en el UCM construyendo a un personaje eterno, en los noventa ya hubo un intento de presentar a este superhéroe con Matt Salinger como Steve Rogers. El único problema, es que la cinta no tiene ni pies ni cabeza y termina siendo un experimento un tanto confuso de serie B con unos efectos para olvidar y un Capitán América sin ningún tipo de alma.
1. Steel, un héroe de Acero (1997)
- Duración: 97 min.
- Director: Kenneth Johnson
Shaquille O'Neal protagoniza la peor película de superhéroes de toda la historia del cine. Sí, así es. El profesional del baloncesto dio vida aquí a John Hery, un hombre que se transforma en una especie de Robocop fusionado con Iron Man para detener a un corrupto militar que está introduciendo en las calles armas sumamente peligrosas. Inconexa, comedia involuntaria y repleta de errores. Steel es para enmarcar, pero no precisamente para bien.
