Brian Horton, director artístico de Crystal Dynamics, el estudio que se encuentra trabajando en la nueva versión de Tomb Raider, ha dicho que esta vez no quieren convertir al personaje en un objeto de deseo sexual.
"Más allá del sex appeal, nosotros siempre pensamos en hacer un personaje con el que la gente quiera jugar, y parte de eso implica un nivel de atractivo y que nos prendemos de Lara," aseguró Horton.
"Lara es una amante de la arqueología. Su inteligencia es gran parte de su sex appeal. Es una chica atractiva que no se encierra con sus libros, pero es super lista y muy ambiciosa".
"Lo estamos enfocando desde otra persepctiva y Lara Croft como objeto sexual no es nuestra meta. Nada de bikinis desbloqueables," dijo Horton.