Keiji Inafune, ex-director de investigación y desarrollo en Capcom, ha arremetido muy duramente contra la industria japonesa del videojuego, acusando a sus colegas de haberse convertido en simples asalariados aburguesados.
En declaraciones concedidas al medio nipón 4Games afirma que "el gran muro contra el que se pega la industria japonesa del videojuego es el cambio de creadores a asalariados", lo que, para él, "es como un estado comunista. Trabajar tan duro como te sea posible va sólo en tu contra. No trabajar duro se convierte en algo ventajoso."
Para Inafune "no puedes hacer buenos videojuegos yendo simplemente a lo fácil." Pero no es algo aislado, sino generalizado: "Esto se puede decir de toda la industria, y por supuesto Capcom no es una excepción."
Admite su parte de culpa como engranaje del sistema, pero destaca sobre todo que en el mercado occidental hay muchos más desarrolladores independientes que buscan dar el campanazo con su próximo videojuego y lograr que su compañía crezca, pues dependen de ello.
"Echo un vistazo en el Tokyo Game Show y todo el mundo hace juegos horribles. Japón lleva cinco años de retraso."
