Si recientemente Venezuela proclamaba una ley contra los videojuegos que tuvieran cualquier tipo de violencia, con independencia de una regulación por edades, ahora Suiza se prepara para aprobar una legislación similar.
Para esta ley, sin embargo, todavía no se han especificado las características que determinarán que un juego se prohíba en el país, con independencia de la clasificación por edades que le haya asignado el sistema paneuropeo PEGI (o, a los mismos efectos, la USK alemana, o la BFFC británica).
Los políticos suizos, en cualquier caso, ya se han atribuido el derecho para aplicar esta ley cuando consideren necesario, aunque de momento no se ha hecho pública la lista de consideraciones a tener en cuenta a la hora de prohibir o no un videojuego.
Lo más probable es que esto impida la venta, distribución, y desarrollo, dentro del país, de videojuegos que se consideren inapropiados, lo que puede afectar a la mayor parte de los videojuegos clasificados por PEGI como títulos para mayores de 16 años y, posiblemente, a todos los clasificados para mayores de 18 años. Una ley similar ha rondado sobre Alemania, e incluso desarrolladoras como Crytek avisaron en su momento con abandonar su producción en el país germano.
La propuesta original llevada ante los órganos legisladores suizos hacía referencia concreta a prohibir cualquier videojuego "que requiera la realización de actos de violencia cruel contra humanos o criaturas de aspecto humanoide para ganar en el videojuego."
