Llegan las Navidades y, entre los regalos que los niños esperan ver debajo del árbol o sobre los camellos de los Reyes Magos, está Nintendo Switch, la plataforma híbrida de la firma japonesa. Dado que la palabra switch significa, literalmente, interruptor, los adultos han encontrado irresistible la tentación de gastar una broma a los más pequeños. ¿El método a seguir? Es sencillo: regalarle a los niños interruptores cuidadosamente envueltos en un embalaje con el logo de Nintendo Switch.
Switch, el mejor aliado del Grinch
Por un lado encontramos el caso del usuario de Twitter @RealOHMEGA, que ha escrito lo siguiente: "Este año los niños tendrán su Nintendo Switch". Claro que, si miramos la imagen que acompaña a su mensaje, nada más lejos: son interruptores de la luz con el logotipo rojo de Nintendo en la parte superior. Para poner la guinda del pastel, los interruptores están metidos en unas cajas de cartón que, sin ningún tipo de escrúpulo, cuentan con el distintivo de Nintendo Switch.
The kids are getting Nintendo Switches this year. pic.twitter.com/x4esxPG1Pu— OHM3GA (@RealOHMEGA) December 17, 2019
No sabemos si RealOHMEGA llevará a cabo su broma -esperamos que esté preparado para enfrentarse a enfados, pataleos y lloros-, pero lo cierto es que ha creado escuela: el profesor Scott L. Clark tampoco puede resistirse a gastarle una broma a sus alumnos siguiendo el ejemplo. "No voy a mentir. Me siento tentado a trolear a mis alumnos con uno de estos, diciéndoles que les he comprado una nueva Nintendo Switch por Navidad. Pero ni yo soy tan malo". En la imagen que comparte podemos ver, de nuevo, un interruptor al más puro estilo de Nintendo:
Not gonna lie. I’m tempted to troll my students with one of these by telling them I bought them a brand new Nintendo Switch for Christmas. But even I’m not that mean. pic.twitter.com/AUxOMjZlpk— Scott L. Clark (@GOcastScott) December 10, 2019
Nintendo Switch en Navidad
Lo que está claro es que la demanda de Nintendo Switch amenaza con acabar con el stock de la plataforma híbrida en tiendas. Incluso Reggie Fils-Aimé, expresidente de Nintendo of America, se ha hecho eco de la situación: "La demanda de la máquina es ingente, así como el trabajo de nuestra cadena de suministro", confirma. "¿Tendremos suficientes consolas para las Navidades? Bueno, es algo en lo que estamos trabajando". El objetivo de Nintendo es alcanzar los 10 millones de unidades vendidas antes de finalizar el actual año fiscal.