Xbox Game Pass es parte fundamental de la estrategia de Microsoft en el mundo de las consolas. Según Aaron Greenberg, máximo responsable de la división de marketing, los usuarios han reaccionado muy bien al servicio de juego bajo demanda, sobre todo en Europa.
Un valor añadido que aumenta el vínculo y la atracción hacia la marca
"En Europa hemos notado a Game Pass de una forma particularmente fuerte, con los usuarios respondiendo de una manera muy positiva al valor añadido", explicaba Greenberg a MCV. "Simplemente depende del mercado. Hay mercados que prefieren poseer los videojuegos y tenerlos como parte de una colección, y otros simplemente quieren tener acceso a una enorme librería de juegos en todo momento", confirmaba el ejecutivo de Redmond.
En este sentido, Microsoft parece que está haciendo nuevos socios. El catálogo está creciendo, y son cada vez más las empresas las que se están interesando en añadir títulos a su servicio de juego bajo demanda. Xbox y la tecnología en la nube son parte indispensable de esta expansión y si bien un futuro en el que las suscripciones sean dominantes no es algo del agrado de todos. Greenberg explica que Bethesda es una de las empresas que más se están volcando con ellos, y ahí está el ejemplo de Fallout 4, un elemento que estaría haciendo que más jugadores se interesasen en Fallout 76.
"Son beneficios estratégicos para nuestros colaboradores", añade Greenberg. "Pienso que la idea de Bethesda, sobre todo al poner Fallout 4 en el catálogo de Xbox Game Pass, ha conseguido que un buen número de jugadores y suscriptores se interese en el título y de paso, en Fallout 76. Esto consigue generar atracción y establece vínculos, creándose la oportunidad de hacer nuevos aficionados y tenerlos atraídos con este tipo de contenidos en el futuro", concluía.
Y no le falta razón. Os recordamos que Xbox Game Pass ha conseguido fidelizar a la audiencia de Xbox. Los suscriptores pasan un 20% más de tiempo jugando en sus consolas, y no solo eso: también juegan a una mayor variedad de títulos en Xbox One, un dato que se sitúa en un 40% como promedio por encima de la comunidad de no suscriptores del servicio.
