BlizzCon 2017 ha tenido lugar este fin de semana, dejando tras de sí una serie de novedades dedicadas a World of Warcraft y Overwatch. Sin embargo, en el evento también hubo lugar para las curiosidades, como la que os vamos a contar a continuación.
El principio
Jeff Kaplan, director del juego de disparos, ha compartido con los fans que el equipo de Overwatch comenzó a trabajar en un MMO llamado Crossworlds, que ofrecía más de 50 clases y tenía lugar "en las encrucijadas del universo". Después de que el MMO Titan se cancelara, el equipo comenzó a trabajar en una nueva IP, Crossworlds.
"Básicamente la idea era que existía un remoto planeta avanzado en el universo, que era la encrucijada del universo. Todas las razas alienígenas terminarían allí", explicaba el director.
"El juego iba a ser un MMO, e iba a estar basado en clases. Estábamos explorando entre seis y nueve clases para el juego", continuaba diciendo Kaplan.
Un proyecto imposible
El diseñador de clases de Blizzard, Geoff Goodman (que ahora diseña los héroes de Overwatch), animó al equipo a subir el número de clases a 50. "Cada una de ellas estaría enfocada en ciertas habilidades y serían muy diferentes entre sí".
Sin embargo, Kaplan pensó que aquel proyecto era un imposible. Aún así, el esbozo que habían trazado se quedó en su cabeza, y de ahí empezó a fraguarse lo que hoy conocemos como Overwatch. De hecho, durante la ponencia, Kaplan mostró un concepto del juego, y la distribución de algunas de las clases, donde aparecen personajes del propio Overwatch.
Durante la BlizzCon 2017 también se ha presentado un nuevo mapa y personaje, Moira, que es capaz de curar a los aliados, de hacer daño a los rivales y de teletransportarse.