Jordan Vogt-Roberts, cineasta que se está encargando de la primera película basada en la saga Metal Gear, ha opinado sobre por qué las adaptaciones de videojuegos al cine no suelen funcionar bien.
Cine y videojuegos, una relación complicada
"Creo que los directores miran las películas de videojuegos y dicen que son fantásticas, y existe un deseo muy pequeño por entender realmente el tono y la atmósfera", opina el cineasta que trabaja en la saga.
Vogt-Roberts que en el proceso de traslación del videojuego al cine es necesario captar la esencia de un título y llevarla a la gran pantalla con una visión que no se limite a copiar sin más la fórmula.
Los directores deben analizar los títulos, detectar sus puntos característicos y apuntar cuáles son para transformarlos al lenguaje cinematográfico con visión y capacidad de adaptación entre los dos formatos audiovisuales.
En su opinión, el problema no está en pasar de un medio a otro, sino en la pasión que los directores tienen que poner en este proceso, algo que se consigue con mayor éxito "si has crecido jugando a videojuegos".
Uno de los objetivos de Vogt-Roberts es respetar el legado dejado por Hideo Kojima con la película de Metal Gear que está produciendo.
"A pesar de la separación, Kojima y yo somos amigos y colegas, y es importante para mí que él esté orgulloso [del trabajo que se realizará]", explicó el director de Kong: Skull Island recientemente sobre su trabajo.
