Stardew Valley, uno de los éxitos indie de 2016, ha cumplido un año entre la comunidad. Eric Barone, su creador, ha compartido a través de un post especial algunos de sus pensamientos, ideas y problemas al concebir este curioso videojuego de gestión, crafting y aventura agrícola. El juego está disponible en varias plataformas, y pronto, llegará a Switch.
De 'Sprout Valley' a Stardew Valley
Barone comenta que el título originalmente se iba a llamar Sprout Valley, cuando se dio cuenta que necesitaba una buena capa de chapa y pintura para pulir defectos. Su autor fue consciente de que tenía que reestructurar casi cualquier aspecto del juego, incluyendo el sistema de minas, crafteo y sonido.
"Acabé por rehacer el estilo artístico varias veces. Rehice la banda sonora, y expandí el número de personajes no controlados por el jugador, aumentando varias veces su presencia en comparación a la versión del juego de 2012. Realicé un mapa más grande y detallado, añadí a JojaMart y el centro de comunidad, así como toneladas de objetos. Me vi cambiando el sistema de crafteo y las minas", declara.
"De hecho, en un punto del desarrollo, las minas iban a ser generadas de forma procedural e iban a ser completamente destructibles, con lagos que podías cruzar con balsas", explica. Barone comenta que el aspecto y el diseño visual de Stardew Valley fue evolucionando, y llegó a tener cuatro expresiones dibujadas a mano para cada personaje, pero no le satisfizo y desecho al completo el proyecto emocional.
"Stardrew Valley es el tipo de proyecto que exige mucha práctica, así que me quedé completamente estancado hasta que estaba satisfecho con mis habilidades y estas lo suficientemente desarrolladas como para seguir adelante", añade. Eric Barone cree que el proceso de aprender para sacar el juego adelante es algo que no tiene valor equiparable alguno, pues le ha ayudado a mejorar y crecer como programador.
"Es un sentimiento extraño; al comienzo, todo parece distinto, imposible, es como una castillo en el aire con el que fantaseas en la noche... Y se acaba convirtiendo en realidad. Estoy muy emocionado por lo que se aproxima en el futuro. Tengo muchas ideas y me gustaría seguir haciendo juegos por un largo tiempo. He aprendido mucho de Stardrew Valley... Y he cometido un montón de errores también. Pero viéndolo desde un lado positivo, es como un suelo fértil sobre el que mejorar y crecer más fuerte", concluía.
Os dejamos con imágenes de estas primeras versiones.